El sindicato Teamsters comunicó el 16 de diciembre que el 99 por ciento de sus afiliados había votado a favor de autorizar una huelga en las cervecerías estadounidenses de Anheuser-Busch si el sindicato no lograba llegar a un acuerdo sobre un nuevo contrato laboral con la cervecera a principios del año próximo.
El sindicato pretende alcanzar un acuerdo que mejore los salarios, proteja los puestos de trabajo y garantice la asistencia sanitaria y las prestaciones de jubilación de sus 5000 afiliados en las 12 fábricas de Anheuser-Busch, fabricante de Bud Light y Budweiser. El convenio actual expira el 29 de febrero de 2024.
«Si los directivos de Anheuser-Busch no consiguen negociar un convenio que respete a los trabajadores, los veremos en la calle», declaró el 16 de diciembre el presidente general de los Teamsters, Sean O’Brien.
El mes pasado, la cervecera llegó a un acuerdo provisional con los Teamsters para restablecer algunas prestaciones sanitarias. Sin embargo, el sindicato declaró que la empresa ha retrasado las conversaciones sobre cuestiones de seguridad laboral desde el mes pasado.
«Anheuser-Busch no puede seguir dando largas a este asunto», declaró Jeff Padellaro, responsable de los Teamsters. «Los Teamsters no quieren verse obligados a formar parte de la línea de piquetes de ningún empleador, pero estamos totalmente preparados para marcharnos si Anheuser-Busch no se toma en serio la negociación de un contrato récord que también proteja los buenos empleos sindicales.»
Actualmente «no hay fechas» previstas para las conversaciones entre las dos partes, declararon los Teamsters.
«Los Teamsters de Anheuser-Busch se manifestaron recientemente en New Hampshire, California y Florida. Pronto se llevarán a cabo más acciones en todo el país», declaró el sindicato.
Anheuser-Busch no ha hecho ningún comentario público al respecto; los responsables de la empresa no respondieron al cierre de esta edición a una petición de The Epoch Times.
La amenaza de huelga del sindicato contra Anheuser-Busch se produce después de que los Teamsters llegaran a un acuerdo con United Parcel Service (UPS) durante el verano para evitar una posible huelga. El acuerdo incluía aumentos salariales de 2.75 dólares por hora en 2023 y de 7,50 dólares a lo largo de los cinco años del contrato.
En virtud de ese acuerdo, los conductores a tiempo completo podrán tener un salario máximo medio de 49 dólares por hora y un aumento de 21 dólares por hora para los trabajadores a tiempo parcial. El acuerdo también proporcionó a los miembros de UPS Teamsters un día libre el Día de Martin Luther King.
El anuncio de los Teamsters se produce mientras Bud Light, de Anheuser-Busch, ha lidiado con las consecuencias de un esfuerzo promocional que involucró a un activista transgénero e influenciador a principios de este año, lo que llevó a un boicot que ha afectado negativamente a las ventas de la marca en EE.UU. durante meses.
En medio de la reacción, la empresa matriz de la cervecera, Anheuser-Busch InBev, registró una caída del 13.5 por ciento en sus ingresos en EE.UU. por cada 100 litros durante el tercer trimestre de 2023, según un informe trimestral publicado el 31 de octubre. Meses antes, se informó que Modelo Especial, propiedad de Constellation Brands, con sede en Nueva York, superó a Bud Light después de décadas como la cerveza número 1 en ventas en Estados Unidos.
Hace aproximadamente un mes, la empresa comunicó que prescindiría de Benoit Garbe, director de marketing de EE.UU., a finales de 2023.
«Estos cambios en la cúpula directiva acelerarán nuestra vuelta al crecimiento mientras seguimos centrándonos en lo que mejor sabemos hacer: fabricar una gran cerveza para todos y ganarnos un lugar en los momentos importantes», declaró en un comunicado Brendan Whitworth, consejero delegado de Anheuser Busch en Estados Unidos.
Al principio del boicot, el músico Kid Rock publicó un vídeo en el que aparecía utilizando latas de Bud Light como blanco de tiro. Sin embargo, durante una aparición la semana pasada en el programa de Tucker Carlson en X, dijo que Bud Light «se merecía un ojo morado y se lo pusieron», pero señaló que ya no boicotea la marca.
«Entonces, ¿quiero sostenerles la cabeza bajo el agua y ahogarlos porque cometieron un error? No, creo que entendieron el mensaje», dijo Kid Rock, cuyo nombre real es Bob Ritchie.
«Espero que otras empresas también lo entiendan, pero al fin y al cabo, no creo que el castigo que se les está imponiendo se ajuste al delito», dijo a Carlson. «Me gustaría que la gente nos volviera a la carga y nos hiciéramos más grandes, porque ésa es la América en la que quiero vivir».
Sin embargo, el comentarista conservador Matt Walsh dijo que el boicot debería continuar.
«Bud Light es una marca propiedad de un conglomerado extranjero que trató de impulsar la ideología trans y ahora está pagando el precio», dijo en X. «No hay absolutamente ninguna razón legítima para echarse atrás o soltar el acelerador. Se merecen todo lo que les ha pasado».
Con información de Reuters.
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