Los californianos son resistentes. Han resistido apagones, incendios y sequías —por no hablar de los edictos y costos del gobierno. A pesar de todo, los empleados que trabajan duro y los empresarios intrépidos continúan no solo sosteniendo la economía, sino también elevándola a nuevas e innovadoras alturas.
Antes que termine el año, es hora que Washington recompense sus esfuerzos y apruebe el Acuerdo México-Canadá.
El clima de California es tan diverso como sus muchas industrias y la manufactura todavía juega un papel importante en la economía del estado. En todo el estado, más de 1.3 millones de puestos de trabajo están vinculados a la industria manufacturera, que fabrica productos que van desde equipos informáticos hasta semiconductores y autopartes.
Gracias, en parte, al comercio relativamente libre con nuestros vecinos norteamericanos, 95,000 californianos tienen empleos bien pagados en la industria manufacturera, ganando casi el doble que los trabajadores de todas las industrias privadas no agrícolas.
Según la Asociación Nacional de Fabricantes (NAM, por su sigla en inglés), Canadá y México compran USD 44 mil millones de productos manufacturados en California, más de un cuarto del total de las exportaciones mundiales de manufacturas de California. A nivel nacional, estos dos países son el mayor mercado para las exportaciones de Estados Unidos en todo el mundo.
En general, el fortalecimiento de nuestra relación comercial con Canadá y México es de innegable importancia para la economía estadounidense y para los millones de trabajadores de todo el país cuyos medios de vida dependen del libre comercio con esos dos países. Al ratificar este nuevo acuerdo comercial negociado entre los líderes de América del Norte, el Congreso puede hacer su parte para ayudar a los trabajadores estadounidenses.
En su esencia, el USMCA realiza mejoras sustanciales que se basan en el ya obsoleto Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) —al que reemplazará cuando se promulgue— a fin de servir mejor a los intereses de los trabajadores, agricultores, ganaderos y empresas estadounidenses y apoyar el comercio mutuamente beneficioso. Promoverá mercados más libres, un comercio más justo y un crecimiento económico sólido en los Estados Unidos y en toda América del Norte.
El USMCA también allanará el camino para una mejor protección en la investigación médica y la fabricación, desde las instalaciones de biotecnología en los EE.UU. Davis de California hasta los Laboratorios Nacionales Lawrence Livermore. Incluye las mejores reglas de propiedad intelectual de su clase para proteger toda la gama de invenciones e innovaciones de Estados Unidos, incluyendo nuevas regulaciones diseñadas para fortalecer la protección y el cumplimiento de la propiedad intelectual y mejores castigos anticorrupción. Además, este acuerdo trilateral establece el marco para los futuros acuerdos comerciales digitales que desbloquearán la innovación estadounidense sin precedentes.
Según un análisis realizado a principios de este año por la Comisión de Comercio Internacional de Estados Unidos, el USMCA crearía 176,000 puestos de trabajo en Estados Unidos y contribuiría con más de 68,000 millones de dólares a nuestra economía, y gran parte de ese impulso se abriría camino hasta el Estado Dorado, impulsando nuestro clima empresarial y creando nuevos puestos de trabajo bien remunerados. El no avanzar en este acuerdo podría costar a los fabricantes de California hasta USD 10.1 mil millones en impuestos adicionales de acuerdo con el NAM.
México ratificó el final del acuerdo comercial en junio a principios de este año. Canadá está a punto de hacerlo en colaboración con los Estados Unidos. Ahora les corresponde a nuestros líderes en Washington hacer lo mismo. La ratificación del USMCA proporcionará a las empresas de todos los sectores de California y del país la certeza que sus exportaciones a Canadá y México entrarán en esos mercados libres de impuestos.
Durante más de un siglo, Estados Unidos ha sido líder en innovación, invención y prosperidad económica. Al aprobar el USMCA, podemos asegurarnos de que sean los innovadores y trabajadores estadounidenses los que continúen liderando la carga.
Thomas Del Beccaro es un aclamado autor, orador, Fox News, Fox Business, y escritor de opinión de Epoch Times y ex presidente del Partido Republicano de California. Es autor de las perspectivas históricas «La Era Dividida» y «El Nuevo Paradigma Conservador».
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Las opiniones expresadas en este artículo son propias del autor y no necesariamente reflejan las opiniones de The Epoch Times
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