El verano es el tiempo para «desescolarizar»

Anime a sus hijos a volver a involucrarse con sus intereses y el mundo que los rodea, y mírelos brillar

Por Barbara Danza
01 de junio de 2023 11:55 AM Actualizado: 01 de junio de 2023 12:30 PM

Si usted es padre de niños en edad escolar que se acercan a las gloriosas vacaciones de verano, le sugiero que aproveche el tiempo para cosechar los muchos beneficios de la desescolarización.

La desescolarización es un proceso familiar para muchos educadores en el hogar durante el cual usted y su familia se deshacen de las muchas nociones, suposiciones y creencias sobre el aprendizaje que la escuela les inculcó a usted y a sus hijos.

A todos nos enseñaron, por ejemplo, que para aprender y educarse hay que ir a la escuela. Una mirada superficial a muchos grandes eruditos y triunfadores a lo largo de la historia demuestra lo contrario, al igual que cualquier aprendizaje independiente por parte de usted o sus hijos.

Algunos argumentan que nuestro sistema de escuelas públicas de hoy en día en realidad impide el aprendizaje y, en realidad, es perjudicial para la educación. (Para obtener más información, consulte el trabajo de John Taylor Gatto, un maestro del año de la ciudad y el estado de Nueva York que compartió sus reveladoras experiencias; o simplemente consulte los datos alarmantes que miden las tasas de alfabetización en los Estados Unidos).

La verdad es que uno no necesita la escuela para aprender. El verano es un momento oportuno para descubrir esa chispa de curiosidad, esa alegría de aprender que sus hijos pueden haber exhibido cuando eran más pequeños, antes de ir a la escuela.

Beneficios de la desescolarización

Muy al contrario del llamado «tobogán de verano», la desescolarización durante las 10 u 11 semanas de las vacaciones de verano permitirá a sus hijos recordar los procesos naturales de jugar, explorar, leer por placer, usar la imaginación, crear, construir, diseñar, inventar, imitar y jugar. Estas son las actividades que, cuando son autodirigidas, resultan en inconmensurables oportunidades de aprendizaje.

Cuando se les permita la libertad de participar en estos ritos de la infancia sin presión ni coerción, sus hijos serán libres de experimentar su entusiasmo y curiosidad innatos para los que la escuela tiende a dejar poco espacio.

Cómo desescolarizar

La desescolarización es simple y alegre.

Olvídese del ajetreo y el bullicio del horario escolar e intégrese al solaz del verano. Vuelva a conectar con sus hijos. Pase tiempo con ellos, escúchelos, juegue con ellos y conozca cuáles son sus intereses actuales y qué los ilumina por dentro. En esencia, haga todas las cosas que sus hijos están naturalmente inclinados a hacer cuando no están en la escuela.

En lugar de actividades centradas en la pantalla, fomente las que involucren sus mentes y corazones. Pase mucho tiempo al aire libre y en conversaciones profundas con sus hijos. Escúchelos y obsérvelos de cerca. Observe cómo su curiosidad innata comienza a volver a relacionarse con el mundo y cómo la monotonía de la escuela se convierte en un recuerdo lejano. Sentirá que no está haciendo nada, pero es probable que en algún momento se sorprenda de lo mucho que están aprendiendo sin la «ayuda» de la escuela. Ahí es cuando sabrá que la desescolarización está funcionando.

Visitar la biblioteca y las librerías, y aprovechar un festín de lectura deliciosa. Disfrutar de un audiolibro aquí y allá. Reproducir música. Ver documentales. Ir al parque. Nadar en el océano. Comenzar un proyecto tan solo por diversión.

En medio de todo, su hijo va a aprender cosas. Y usted también.

Sabrá que la desescolarización está funcionando cuando sea testigo de que el verdadero yo de su hijo brilla una vez más. Experimentará la alegría de la desescolarización cuando deje de preocuparse por el nivel de lectura de su hijo o por lo que los otros niños están aprendiendo en su grado. Comprenderá los profundos beneficios de la desescolarización cuando comience a preguntarse cómo se convenció alguna vez de que la escolarización convencional era la única forma de que sus hijos aprendieran.

Desescolarizar, en pocas palabras, es dejar ir. Tómese el tiempo que necesite.


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