El volcán Pacaya de Guatemala sigue hoy con un flujo de lava de 500 metros de largo que desciende desde el cráter Mackenney y genera, a su vez, pequeñas explosiones tipo estromboliano a una altura de 30 metros.
El Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología indicó, en un boletín emitido este domingo que el cono, que en los últimos meses ha mantenido pulsos de incremento de actividad, tiene una desgasificación de color blanca a unos 30 metros que se dispersa hacia el suroeste.
La estación sísmica también registra un tremor -vibración interna- debido al arrastre del flujo de lava y el ascenso de magma.
El flujo de 500 metros apareció el sábado en horas de la noche en el cráter activo del volcán desde 1961, pero en las últimas horas aumentó 100 metros de tamaño, aunque por el momento no afecta a comunidades o aldeas aledañas.
El volcán, de unos 2.562 metros de altura, está ubicado unos 40 kilómetros al suroeste de Ciudad de Guatemala, en el municipio de San Vicente Pacaya, departamento de Escuintla.
Guatemala tiene 32 volcanes de los que tres -Pacaya, Santiaguito y Fuego- están en constante actividad.
De hecho, el pasado 3 de junio, el de Fuego registró una de las erupciones más fuertes de su historia dejando al menos 113 muertos y unos 329 desaparecidos, además de casi dos millones de personas afectadas y cuantiosos daños materiales.
Este domingo, el Volcán de Fuego tiene una desgasificación de color blanco, entre 1 y 2 explosiones débiles por hora y una columna de ceniza de 4.300 metros de altura que se dispersa hacia el suroeste por la dirección del viento.
En los flancos del volcán se generan avalanchas de bloques en dirección a las barrancas Seca, Cenizas o Las Lajas, pero el ente científico advierte que por las lluvias que se esperan para más tarde se podrían generar lahares.
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