El gobierno de Joe Biden recibió diversas respuestas del Congreso sobre su decisión de que Estados Unidos vuelva a participar en el Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Bajo el gobierno de Donald Trump, Estados Unidos se retiró del consejo de 47 miembros en junio de 2018, señalando que algunos de los peores violadores de derechos humanos —China, Cuba y Venezuela— eran miembros del consejo.
El 8 de febrero, el secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, criticó la decisión de 2018 y dijo que la retirada «no hizo nada para alentar un cambio significativo, sino que creó un vacío del liderazgo estadounidense», según una declaración de prensa.
Reconociendo que el consejo es un «organismo defectuoso» que necesita reforma, Blinken dijo que el presidente Joe Biden dio instrucciones al Departamento de Estado de «volver a participar de inmediato y enérgicamente en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU», como observador.
Un observador en el consejo puede presentar proyectos de resolución pero no tiene derecho a voto.
El senador Marco Rubio (R- Fla.), que forma parte del Comité de Relaciones Exteriores del Senado y de la Comisión Ejecutiva del Congreso sobre China (CECC), criticó a Biden y dijo que «no debería dar ni una pizca de credibilidad» al consejo, ya que «se convirtió en un lugar para que los regímenes despóticos se unan y reciban cobertura internacional para continuar cometiendo sus horribles abusos», según una declaración de su oficina.
Rubio indicó los abusos a los derechos humanos que ocurren actualmente bajo la supervisión de cuatro miembros actuales: China, Cuba, Rusia y Venezuela. El Partido Comunista Chino (PCCh), detuvo a más de un millón de minorías étnicas, incluidos los pueblos uigur, kazajo y kirguís, en campos de internamiento en la región de Xinjiang, en el extremo occidental de China.
En enero, el entonces secretario de Estado, de EE.UU., Mike Pompeo, calificó la persecución del PCCh contra estas minorías como genocidio y «crímenes contra la humanidad».
Rubio sugirió que el gobierno de Biden se centre en «trabajar con aliados democráticos para presionar por la rendición de cuentas y la justicia de estos regímenes brutales y promover la protección de los derechos humanos en todos lados».
El senador Rick Scott (R-Fra.) calificó la decisión del gobierno de Biden como «un trágico error», de acuerdo a una declaración.
«El gobierno de Biden debe dejar absolutamente claro que Estados Unidos defiende los derechos humanos y rechaza relacionarse con una organización que cierra los ojos ante el genocidio».
Si bien el principal republicano del Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes, Michael McCaul, no pidió a Biden que se retire del organismo de la ONU, dijo: “Insto a @POTUS @JoeBiden & @SecBlinken a tener en cuenta las atrocidades cometidas por los miembros del UNHRC cuando la administración vuelva a participar”.
“Nuestra participación debe centrarse en implementar reformas significativas en el UNHRC (Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas), incluyendo terminar con el claro sesgo contra Israel y hacer que el organismo investigue el genocidio en #Xinjiang sin demora”, agregó.
LR @RepMcCaul: The @UN_HRC has revealed its deep hypocrisy on too many occasions. By empowering governments like the #ChineseCommunistParty & the #Maduro & #Putin regimes, they are whitewashing their atrocities the council was created to fight against. (1/3)
— House Foreign Affairs GOP (@HouseForeignGOP) February 8, 2021
El secretario general de la ONU, António Guterres, acogió con satisfacción la decisión de Estados Unidos de volver a participar, según una declaración emitida por su portavoz, en la que califica al consejo como «el foro líder mundial para abordar la gama completa de desafíos de derechos humanos».
Varios demócratas recurrieron a Twitter para expresar su apoyo a la decisión del gobierno de Biden, incluida la representante Barbara Lee (D-Calif.). Ella dijo que la medida «empodera a los oprimidos y restablecer la credibilidad de Estados Unidos en el mundo».
La semana pasada, el representante estadounidense Chip Roy (R-Texas) y otros 44 legisladores republicanos de la Cámara enviaron una carta a Biden, pidiendo al presidente que no se una al Consejo, ya que ha adoptado cero resoluciones de condena a países como China, Rusia, Cuba y Pakistán entre 2006 y 2019.
I joined House Republicans last week in urging President Biden not to rejoin the @UN Human Rights Council.
The US should not become party to a body that systematically shields the world’s worst regimes from accountability: pic.twitter.com/3OEJxUefWv
— Rep. Mark Green (@RepMarkGreen) February 8, 2021
“Nosotros creemos que el [ex]presidente Trump tuvo razón al retirar a Estados Unidos del Consejo de Derechos Humanos. La participación de Estados Unidos en este organismo no ha llevado a ninguna reforma significativa”, agregaron.
Funcionarios estadounidenses no identificados dijeron a The Associated Press que Estados Unidos buscará uno de los tres puestos de miembro de pleno derecho en el grupo «Europa Occidental y otros Estados» —actualmente ocupados por Austria, Dinamarca e Italia hasta fines de 2021— en las próximas elecciones de este año. Los países ganadores tendrán un mandato de tres años en el consejo.
El consejo está dividido en cinco grupos regionales, y China ocupa actualmente un asiento miembro en el grupo de Estados de Asia y el Pacífico hasta 2023, después de ganar el asiento en las elecciones de octubre del año pasado. Antes China ocupó un asiento en el consejo de 2017 a 2019.
La exembajadora de Estados Unidos ante la ONU, Nikki Haley, quien se dirigió a Twitter en enero para instar a Biden a no volver a unirse al Consejo, expresó su decepción por la decisión de volver a participar.
«Es triste ver que el administrador Biden legitime una organización que se ha convertido en una farsa para los defensores de los derechos humanos en todo el mundo», escribió Haley en Twitter.
Hillel Neuer, director ejecutivo de U.N. Watch, pidió al gobierno de Biden que evite repetir las acciones del gobierno de Barack Obama, actuando «como una animador del consejo» e hizo un llamado al mandatario para exigir reformas serias, como «sacar a los dictadores del consejo tales como el régimen de Maduro de Venezuela».
“Estados Unidos debería evitar otorgar legitimidad a un consejo donde las tiranías y otras no democracias ahora comprenden el 60 por ciento de los miembros”, agregó.
«[L]a administración de Biden debería ser sincera al denunciar los abusos del consejo y poner sus pies en el fuego», concluyó Neuer.
Siga a Frank en Twitter: @HwaiDer
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
