En respuesta a la escasez de equipos en medio de la pandemia del COVID-19, el CEO de Tesla, Elon Musk, dijo que compró 1255 respiradores médicos en China aprobados por la FDA y que hizo que los dispositivos fueran transportados por avión a Los Ángeles.
Síp, China tenía un exceso de oferta, así que compramos 1255 respiradores ResMed, Philips y Medtronic aprobados por la FDA el viernes por la noche y los enviamos por avión a Los Ángeles. Si quiere que le instalen un respirador gratis, ¡por favor háganoslo saber!
Musk dijo en un tuit el 23 de marzo que compró los dispositivos el viernes, añadiendo que «¡si quiere un respirador gratis instalado, por favor háganoslo saber!»
Yup, China had an oversupply, so we bought 1255 FDA-approved ResMed, Philips & Medtronic ventilators on Friday night & airshipped them to LA. If you want a free ventilator installed, please let us know!
— Elon Musk (@elonmusk) March 24, 2020
El gobernador de California, Gavin Newsom, dijo en una conferencia de prensa el lunes que Musk había entregado los respiradores, calificando el movimiento como «un esfuerzo heroico».
Antes, Musk escribió que Tesla produciría «respiradores si hay escasez». Dijo en un tuit por separado la semana pasada que los planes de producción ya estaban en marcha en las fábricas de Tesla, «Estamos trabajando en respiradores, aunque creo que no habrá escasez para cuando podamos hacer lo suficiente para dar».
«Millones de artículos de diferentes tipos están en camino»
Los respiradores, que cuestan decenas de miles de dólares, son dispositivos mecánicos de respiración que pueden dirigir el aire y el oxígeno a los pulmones. Son cruciales para el cuidado de las personas con insuficiencia pulmonar, que puede ser una de las complicaciones que sufren los pacientes con COVID-19 grave.
The Epoch Times se refiere al nuevo coronavirus, que causa la enfermedad COVID-19, como el virus del PCCh porque el encubrimiento y la mala gestión del Partido Comunista Chino permitieron que el virus se extendiera por toda China y alimentara una pandemia mundial.
El rápido brote, que ha matado a miles de personas en todo el mundo, ha puesto a prueba los sistemas de atención de salud en todo el mundo y ha dado lugar a una escasez de respiradores necesarios para tratar a los pacientes que padecen una enfermedad similar a la gripe, que puede provocar dificultades respiratorias y neumonía en casos graves.
El presidente Donald Trump dijo en un tuit el martes que su administración acababa de asegurar 400 respiradores para Nueva York y que se enviarían millones de artículos diferentes para ayudar a los estados en su respuesta de emergencia a la pandemia.
«El mercado mundial de mascarillas y respiradores es una locura», escribió Trump. «Estamos ayudando a los estados a conseguir equipos, pero no es fácil. Acabo de conseguir 400 respiradores para el alcalde de @NYCMayor Bill de Blasio. ¡Comienza el trabajo en 4 hospitales de Nueva York! ¡Millones de artículos de diferentes tipos están en camino!»
Anteriormente, Trump dijo que General Motors (GM), Tesla y Ford fueron aprobados para producir respiradores para combatir el avance del virus en Estados Unidos.
GM se ha asociado con el fabricante de equipos médicos Ventec y está construyendo respiradores en su planta en Indiana.
«Estamos trabajando en estrecha colaboración con Ventec para ampliar rápidamente la producción de sus productos respiratorios de importancia crítica para apoyar la lucha de nuestro país contra la pandemia de COVID-19. Continuaremos explorando formas de ayudar en este momento de crisis», dijo Mary Barra, presidente y CEO de GM, en una declaración.
El martes, Ford se lanzó al impulso de la emergencia para producir ventiladores y respiradores.
«Hemos estado en diálogo regular con funcionarios federales, estatales y locales para entender las áreas de mayor necesidad», dijo el director ejecutivo de Ford, Jim Hackett, y agregó que el objetivo de la compañía era aumentar el suministro de equipos médicos necesarios.
Ford y GE Healthcare ampliarán la producción del diseño de los respiradores de GE, mientras que Ford también trabajará por separado con 3M para aumentar la capacidad de fabricación de sus respiradores purificadores de aire.
La compañía dijo que estaba explorando cómo podría producir estos nuevos respiradores en una de sus plantas de manufactura en Michigan y ayudar a 3M a incrementar la producción diez veces. Usaría respiradores de sus asientos refrigerados de la Ford F-150 para fabricar partes de los respiradores, dijo la compañía.
«Acción significativa»
Anteriormente, la Administración de Medicamentos y Alimentos (FDA) dijo que había tomado «medidas significativas» para aumentar la disponibilidad de dispositivos respiratorios, incluidos los respiradores, en la lucha contra COVID-19.
«Las nuevas medidas de la FDA significarán que Estados Unidos puede fabricar más respiradores durante esta crisis», dijo el Secretario de Salud y Servicios Humanos, Alex Azar, en un comunicado.
Las nuevas medidas de la FDA para apoyar los esfuerzos de respuesta a la pandemia, que se detallan en un documento de orientación (pdf), incluyen la eliminación de barreras a la producción de respiradores y otros dispositivos respiratorios, tales como la escasez de suministros o las limitaciones de fabricación.
Por ejemplo, la guía dice que la FDA tiene la intención de ejercer su discreción para hacer cumplir ciertas modificaciones a los dispositivos autorizados por la FDA.
«Los hospitales y otros proveedores de atención de la salud pueden reutilizar las máquinas que tienen ahora para que sirvan como respiradores», dijo Azar. «Si quieren ayudar a expandir la producción de respiradores para salvar vidas estadounidenses en esta pandemia, vamos a trabajar con ustedes para eliminar todas las barreras posibles».
Otro cambio es que los hospitales y los profesionales de la salud pueden usar respiradores destinados a otros ambientes, dijo la FDA.
La agencia declaró que esta política tiene la intención de permanecer en vigor solo mientras dure la emergencia de salud pública relacionada con COVID-19.
Según los datos recopilados por la Universidad Johns Hopkins, hasta el 24 de marzo a las 9:55 a.m., hora del este, había 46,485 casos confirmados de COVID-19 en Estados Unidos y 591 muertes.
Reuters contribuyó a este informe.
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