Elon Musk, director ejecutivo de Tesla, ha decidido retirar su demanda contra OpenAI y sus cofundadores Sam Altman y Greg Brockman tras meses de batalla legal.
Sus abogados presentaron el martes una moción en una Corte Superior de California para desestimar la demanda sin perjuicio, aunque no dieron ninguna razón para la decisión, según la presentación judicial.
Esto se produce justo un día después de que Musk amenazara con prohibir los dispositivos de Apple en sus empresas si el fabricante del iPhone procedía a integrar ChatGPT de OpenAI en el sistema operativo.
En una serie de posteos en X, Musk calificó la medida de «violación de seguridad inaceptable» y dijo que prohibirá «todos los dispositivos de Apple» en las instalaciones de sus empresas y exigirá a los visitantes que registren sus dispositivos de Apple en la puerta.
Musk, también director ejecutivo de SpaceX y de la plataforma de redes sociales X, añadió que Apple «no tiene ni idea de lo que ocurre realmente» cuando transfiere los datos de los usuarios a OpenAI.
El CEO de Tesla cofundó OpenAI junto con Altman y Brockman en 2015, pero más tarde abandonó la empresa. En febrero, demandó a OpenAI y a sus cofundadores, acusándolos de incumplir su acuerdo fundacional de desarrollar IA en beneficio de la humanidad.
«Hasta el día de hoy, el sitio web de OpenAI Inc sigue profesando que su carta es asegurar que [la inteligencia artificial general] ‘beneficie a toda la humanidad'», dice la demanda.
«En realidad, sin embargo, OpenAI Inc se ha transformado en una filial de facto de código cerrado de la mayor empresa tecnológica del mundo: Microsoft», añade.
Musk solicitó que la corte ordenara a OpenAI, que ahora cuenta con el respaldo de Microsoft, que pusiera sus trabajos «a libre disposición del público» y prohibiera a cualquiera, incluida Microsoft, obtener beneficios de su tecnología de IA.
En respuesta, OpenAI publicó el 5 de marzo en un blog lo que parecían ser extractos de correos electrónicos privados del Sr. Musk, destacando la supuesta hipocresía derivada de lo que supuestamente había previsto para la empresa.
Según los correos electrónicos, OpenAI necesitaba más financiación de la prevista inicialmente, lo que llevó a Musk a animar a la empresa a recaudar 1000 millones de dólares en lugar de los 100 millones iniciales. El Sr. Musk también sugirió que «tiene sentido» que la empresa «empiece a ser menos abierta» con el tiempo y «no comparta» el trabajo de la empresa con el público.
OpenAI también afirmó que el Sr. Musk quería «la mayoría del capital, el control inicial de la junta, y ser CEO» en la empresa con fines de lucro, y que retuvo la financiación durante estas negociaciones. El Sr. Musk dejó OpenAI en febrero de 2018.
Con información de Bill Pan.
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