Una embajada de Estados Unidos emitió el miércoles una alerta de seguridad después de que los intereses estadounidenses en Kuwait recibieran una amenaza de un grupo proiraní, en medio de las crecientes tensiones en Medio Oriente por el conflicto entre Israel y Hamás.
«La embajada está al corriente de las amenazas proferidas en las redes sociales por Alwiyat al-Waad al-Haq, un grupo de milicianos iraquíes, contra las bases militares estadounidenses en Kuwait. Como resultado, la Embajada de EE. UU. en Kuwait está limitando su actividad en las bases militares de EE. UU. únicamente a actos esenciales y oficiales. Se aconseja a los ciudadanos estadounidenses que permanezcan alerta», decía un boletín de la embajada estadounidense en Kuwait, un pequeño país situado entre Irak y Arabia Saudí que también comparte frontera marítima en el Golfo Pérsico con Irán.
Se produjo después de que un grupo, Alwiyat al-Waad al-Haq, escribiera en las redes sociales que «consideramos las bases estadounidenses en Kuwait y los Emiratos como objetivos legítimos para nosotros, en respuesta a los crímenes de la entidad sionista y de Estados Unidos. Y en represalia por los mártires de la amada Palestina», según múltiples reportes. Algunos funcionarios creen que el grupo está respaldado por Irán y se dice que está vinculado al grupo terrorista iraquí Kataib Hezbolá.
«Afirmamos que nuestra paciencia tiene límites», dice la declaración del grupo. The Epoch Times no pudo verificar inmediatamente la autenticidad de la afirmación, y el comunicado de la embajada estadounidense no mencionaba específicamente al grupo.
Días antes del aviso de la embajada estadounidense, el Departamento de Estado de EE. UU. envió una alerta de seguridad de «precaución mundial» a los estadounidenses que viajan al extranjero.
«Debido al aumento de las tensiones en varios lugares del mundo, a la posibilidad de ataques terroristas, manifestaciones o acciones violentas contra ciudadanos e intereses estadounidenses, el Departamento de Estado aconseja a los ciudadanos estadounidenses en el extranjero que extremen la precaución», decía la alerta.
El Departamento de Estado aconsejó entonces a los ciudadanos estadounidenses que se mantuvieran cautos en los lugares frecuentados por turistas, que se inscribieran en el programa de viajes de la agencia y que la siguieran en las redes sociales para recibir actualizaciones. La última vez que se envió una alerta de este tipo fue cuando Estados Unidos llevó a cabo un ataque con aviones no tripulados que mató a Ayman al-Zawahiri, el exlíder de Al Qaeda, en una casa de huéspedes talibán en Kabul, Afganistán, en julio de 2022.
También se produjo cuando Estados Unidos elevó recientemente la alerta de viaje para partes de Israel y el cercano Líbano al nivel 4, o su nivel más alto. La embajada estadounidense en Beirut también permitió la salida del personal que no se encuentre en situación de emergencia y de sus familiares.
El Departamento de Estado cataloga a Kuwait como Nivel 1, o el nivel más bajo posible. Cabe destacar que el país fue invadido por las fuerzas del líder iraquí Saddam Hussein en 1990, lo que provocó la primera invasión estadounidense de Irak.
Al menos 21 países de todo el mundo siguen bajo alerta de nivel 4, según el Departamento de Estado. La mayoría se encuentran en África y Medio Oriente.
Las advertencias estadounidenses se aplican desde hace tiempo a los ciudadanos que viajan a Irán, donde los estadounidenses corren el riesgo de ser «arrestados y detenidos arbitrariamente». Estados Unidos también incluye a Irak en su lista de nivel 4, advirtiendo de que existe un alto riesgo de secuestro, terrorismo y conflicto armado.
Funcionarios dijeron a los medios de comunicación que los simulacros se llevarán a cabo «para validar los sistemas de armas y mantener la competencia y preparación de las tripulaciones» cerca de la región de al-Hasakah en Siria y la región de Khalidiyah en Irak.
Funcionarios de Israel dijeron que sus fuerzas terrestres habían realizado un gran avance en Gaza durante la noche para atacar objetivos de Hamás, mientras el primer ministro Benjamin Netanyahu decía que seguía preparándose para una invasión terrestre que podría ser una de varias.
Estados Unidos y otros países están instando a Israel a que retrase una invasión total; Gaza se tambalea tras casi tres semanas de bombardeos israelíes desencadenados por una matanza masiva en el sur de Israel por parte de Hamás, respaldado por Irán, que dirige el enclave asediado.
Otros grupos respaldados por Irán han atacado desde entonces a Israel y a las fuerzas estadounidenses en otros lugares de la región, ya que los líderes occidentales temen que una invasión terrestre con un elevado número de víctimas entre los civiles palestinos, que ya han muerto en gran número por los ataques aéreos israelíes, podría desencadenar una guerra más amplia.
El presidente Joe Biden mantuvo una llamada con Netanyahu en la que se habló de los «esfuerzos en curso para localizar y asegurar la liberación» de los estadounidenses que se cree que son rehenes de militantes en Gaza, según informó la Casa Blanca durante la noche.
Israel dijo que había 224 rehenes. Hamás ha amenazado con matar a algunos de los que retiene, entre los que se encuentran muchos titulares de pasaportes extranjeros, pero ha liberado a cuatro desde el viernes. Gaza comenzó a recibir una pequeña cantidad de ayuda al día siguiente.
Con información de Reuters.
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