Los trabajadores de Chicago que fueron despedidos por no cumplir con la orden de vacunación contra COVID-19 impartida por la ciudad deben recuperar sus puestos de trabajo, dice el nuevo fallo de la jueza que lleva el proceso.
Los funcionarios de la ciudad violaron múltiples partes de la Ley de Relaciones Laborales Públicas de Illinois al imponer una orden de vacunación sin negociar con los sindicatos que representan a los trabajadores sobre los efectos del mandato, incluidas las consecuencias de no vacunarse, dijo la jueza de Derecho Administrativo Anna Hamburg-Gal, en un fallo de 78 páginas fechado el 19 de abril.
La orden de vacunación en sí no estaba sujeta a negociación porque era «parte integrante de la capacidad [de la ciudad] para mantener una plantilla funcional capaz de prestar servicios públicos durante una pandemia mundial», declaró la jueza Hamburg-Gal. Pero eso no elimina la necesidad de negociar sobre los aspectos del mandato.
«Incluso cuando la decisión de un empleador de aplicar una política de gestión no está sujeta a negociación, la Ley exige una negociación colectiva de buena fe sobre los efectos de esa decisión política en las condiciones de empleo de los empleados de la unidad de negociación», dijo la jueza.
Entre los efectos que deberían haberse negociado figuraba la disponibilidad de bajas por enfermedad para los trabajadores lesionados por la vacuna y la sanción por no informar sobre el estado de vacunación o por no vacunarse, según la sentencia.
Ninguna emergencia eliminaba los requisitos de negociación de la orden de vacunación que se impuso el 8 de octubre de 2021, agrega la sentencia.
«Para esa fecha, la pandemia llevaba existiendo bastante más de un año y el público disponía de una vacuna desde hacía más de diez meses en virtud de la Autorización de Uso de Emergencia», indicó la jueza.
La ciudad también infringió la ley al no facilitar a los sindicatos la información que solicitaron que era relevante para las negociaciones, y por descartar probar una alternativa a la vacunación.
A los funcionarios de la ciudad la sentencia ordena que negocien con los sindicatos, incluida la Federación Estadounidense de Empleados Estatales, Municipales y de Condados (AFSCME), que faciliten la información retenida y que anulen los requisitos de vacunación.
También ordena a los funcionarios municipales que readmitan a todos los trabajadores despedidos a consecuencia de la orden de vacunación, que revoquen las medidas disciplinarias impuestas a los trabajadores no despedidos y que borren los expedientes de ambos grupos de trabajadores en relación con las medidas adoptadas a raíz del mandato.
Los empleados que perdieron su salario o prestaciones debido a indebidos cambios por una baja por enfermedad como parte de la orden de vacunación deben ser compensados, dijo también la jueza.
«Nosotros creemos que esta es una decisión firme y favorable para los derechos de los trabajadores en general», dijo un portavoz de AFSCME a los medios de comunicación.
La sentencia «fue una decisión errónea que no sigue la ley, los hechos ni, lo que es más importante, la ciencia», dijo un portavoz de la oficina del alcalde al indicar que la ciudad estaba considerando sus próximos pasos.
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