Políticos canadienses de ambos lados del espectro político condenaron las concentraciones celebradas este fin de semana en todo el país en apoyo de la resistencia palestina. Las concentraciones se produjeron tras los mortíferos atentados del 7 de octubre contra civiles israelíes perpetrados por el grupo terrorista palestino Hamás.
La extrema izquierda lleva mucho tiempo oponiéndose a Israel, y algunos manifestantes en Canadá mostraron el símbolo comunista de la hoz y el martillo. El Partido Comunista de Canadá también salió en masa, ondeando banderas rojas con el símbolo circular blanco del partido.
«El Partido Comunista está con el pueblo palestino que está muriendo como resultado del expansionismo sionista apoyado por el imperialismo estadounidense, canadiense y europeo», dijo la rama de Ontario del Partido Comunista de Canadá en la plataforma X el 9 de octubre. Afirmó que no se dejaría amilanar por las críticas del primer ministro Doug Ford y de la alcaldesa de Toronto Olivia Chow.
Políticos de izquierda y sindicatos de todo el mundo se han puesto del lado de la resistencia palestina tras el ataque múltiple que dejó más de 1.000 israelíes muertos, según fuentes israelíes.
El terrorismo palestino se ha entremezclado durante mucho tiempo con el comunismo y fue fomentado por los regímenes comunistas soviético y chino, como se detalla en la serie editorial especial de Epoch Times, «Cómo el espectro del comunismo está gobernando nuestro mundo.»
Raíces comunistas
El término «terrorismo» se registró por primera vez en 1795 en referencia al Reinado del Terror durante la Revolución Francesa, que inspiró en muchos aspectos la idea comunista de revolución.
El terrorismo fue decisivo para la victoria de los comunistas en muchos lugares, incluidas las victorias de Vladimir Lenin en Rusia, como señaló el teórico marxista Karl Kautsky en su libro de 1919 «Terrorismo y comunismo.»
Félix Dzerzhinsky, jefe de la policía secreta del Sr. Lenin, dijo en 1918: «Defendemos la organización del terror; esto debe admitirse francamente.»
El marxismo-leninismo, una influyente facción del comunismo, inspiró a Sayyid Qutb, considerado el pionero del extremismo islámico. Los escritos de Qutb contienen el vocabulario del marxismo-leninismo, como «vanguardia», «estado» y «revolución».
Hamás es un grupo extremista islámico. En los atentados del 7 de octubre contó con la ayuda de otro grupo de este tipo con base en Gaza llamado Yihad Islámica.
El propio comunismo no arraigó fácilmente en el religioso Oriente Próximo, como explica «El espectro del comunismo», en gran parte porque el comunismo es fundamentalmente ateo. Sin embargo, la teoría y los métodos del extremismo islámico moderno están estrechamente vinculados al marxismo-leninismo.
Desde la década de 1960, el terrorismo palestino ha contado con un fuerte apoyo del régimen comunista chino. El antiguo líder de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Yasser Arafat, fallecido en 2004, visitó China en 14 ocasiones y se reunió con dirigentes del PCCh, entre ellos Mao Zedong y Jiang Zemin.
El PCCh ofreció a las fuerzas de Arafat armas, dinero, entrenamiento y orientación estratégica.
Los soviéticos también fomentaron la OLP, como recordó el desertor Ion Mihai Pacepa, ex teniente general y jefe en funciones del servicio de inteligencia exterior de la Rumanía comunista.
En su artículo «Huellas rusas», Pacepa citaba al jefe de la inteligencia exterior soviética, Aleksandr Sakharovsky: «En el mundo actual, en el que las armas nucleares han dejado obsoleta la fuerza militar, el terrorismo debe convertirse en nuestra principal arma».
Según Pacepa, Sakharovsky tenía en su despacho un mapamundi cubierto de banderas rojas, cada una de las cuales representaba el secuestro de un avión. Sakharovsky le dijo que la táctica de secuestrar aviones era una invención suya, según Pacepa. La OLP fue responsable de muchos de los secuestros, según «El espectro del comunismo».
El apoyo soviético y del PCCh a los terroristas de Oriente Próximo forma parte de la agenda de la izquierda radical para destruir y apoderarse de la sociedad occidental, explica el «Espectro del comunismo».
La ideología izquierdista occidental y el extremismo islámico comparten raíces de odio y lucha, afirma la serie editorial especial. El marxismo señala a los «opresores» y promueve la lucha contra ellos como solución a los males de la sociedad, prometiendo una utopía igualitaria si son derrocados.
«Apoyar a los terroristas contra la sociedad democrática occidental forma parte de la larga marcha de la izquierda radical para destruir y apoderarse de la sociedad occidental desde dentro», afirma la serie.
La conexión actual entre la resistencia palestina y la izquierda
Hoy en día, el llamamiento a la revolución en Palestina sigue estando relacionado con grupos políticos de izquierda en el extranjero. Estos grupos suelen expresar su apoyo a la resistencia palestina en términos de lucha contra la colonización y la opresión.
El partido de extrema izquierda español Podemos dijo en X en español el 9 de octubre: «Por la paz, la descolonización y el fin del apartheid. Hoy, junto a @IdoiaVR e @isaserras en la Puerta del Sol, trasladamos toda nuestra solidaridad al pueblo palestino.»
El partido de izquierdas francés Francia Insumisa ha recibido críticas por negarse a calificar a Hamás de organización terrorista.
La Liga Antidifamación (ADL), grupo que se autodefine como de lucha contra el antisemitismo, publicó en agosto un informe sobre la tendencia antisionista en la política progresista de izquierdas. En él se señalaban numerosos casos de políticos de izquierdas europeos que se manifestaban en contra de Israel y en solidaridad con la resistencia palestina. También los sindicatos adoptan a menudo esta postura.
El sindicato local 3906 del Sindicato Canadiense de Empleados Públicos (CUPE), que representa a los empleados de la Universidad McMaster, publicó en X el 8 de octubre: «Palestina se levanta, viva la resistencia». El mensaje ha sido eliminado, pero han circulado capturas de pantalla del mismo en X.
Fred Hahn, presidente de CUPE Ontario, ha publicado desde entonces en X a favor de la resistencia palestina. CUPE Ontario y CUPE local 3906 no han respondido a las solicitudes de comentarios.
El activismo contra Israel ha tenido una fuerte presencia en los campus universitarios de Canadá. El año pasado, la Universidad McGill y la Universidad de Toronto fueron algunas de las instituciones que tomaron medidas contra grupos de estudiantes que promovían el movimiento Boicot, Desinversión y Sanciones, que es una campaña para presionar a empresas y grupos israelíes acusados de violar los derechos de los palestinos.
La ADL dice que la «penetración en la corriente política dominante» de las inclinaciones antiisraelíes de la izquierda «es motivo de preocupación».
«Fundado en el odio y la lucha, el comunismo es la causa fundamental del terrorismo en todo el mundo», dice el «Espectro del Comunismo». «Hasta que no se desentierren las raíces tóxicas del comunismo, la humanidad no disfrutará ni de un solo día de paz».
Aunque el terrorismo a menudo tiene como objetivo la sociedad occidental, señala la serie, la gran mayoría de las personas a las que ha asesinado son musulmanes corrientes que viven en países islámicos y personas que viven bajo regímenes comunistas.
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