Uno de cada ocho adultos estadounidenses consumió los populares fármacos para la pérdida de peso y la diabetes conocidos como agonistas del GLP-1, según la última Encuesta de Seguimiento Sanitario de KFF.
La encuesta, en la que participaron cerca de 1500 adultos y que se llevó a cabo a finales de abril, reveló que dos tercios de los que utilizan actualmente estos fármacos lo hacen para controlar la diabetes o las cardiopatías, mientras que aproximadamente cuatro de cada diez los toman principalmente para perder peso.
Según la encuesta, aproximadamente el 6 por ciento de los adultos estadounidenses, lo que equivale a más de 15 millones de personas, toman actualmente un medicamento de la clase de los agonistas del GLP-1.
Otras conclusiones clave
Otros resultados clave revelan que, entre quienes tomaron alguna vez agonistas del GLP-1, al 43 por ciento se les diagnosticó diabetes, al 25 por ciento enfermedades cardíacas y al 22 por ciento le dijo un médico en los últimos cinco años que tenían sobrepeso o eran obesos.
Las razones por las que se utilizan estos fármacos están divididas casi a partes iguales: El 39 por ciento de los estadounidenses recurre a los agonistas del GLP-1 para tratar una enfermedad crónica, mientras que el 38 por ciento lo hace para perder peso. El 23 por ciento restante recurre a estos fármacos tanto para tratar enfermedades crónicas como para controlar el peso.
La encuesta confirma también las noticias aparecidas en los medios de comunicación de que la popularidad de estos fármacos aumentó en los dos últimos años. Según la encuesta, el 32 por ciento de los adultos afirma haber oído hablar «mucho» de los agonistas del GLP-1, lo que supone un aumento del 19 por ciento respecto a julio de 2023.
A pesar de su creciente popularidad, la encuesta señaló que el 54 por ciento de todos los adultos que han tomado fármacos GLP-1 encuentran difícil permitirse su costo. Uno de cada cinco adultos que tomaron los fármacos dijo que era «muy difícil» costearlos. Aunque a veces el seguro cubre parte del costo, incluso los adultos asegurados consideran que los gastos suponen un reto, ya que el 53 por ciento afirma tener dificultades para asumirlos.
Ozempic, fabricado por Novo Nordisk, cuesta 935.77 dólares por una inyección mensual, mientras que Wegovy cuesta 1349.02 dólares por un suministro para 28 días —ambos sin seguro médico.
Uno de cada cinco adultos en edades entre 50 y 64 años afirma haber tomado fármacos GLP-1 en algún momento, una proporción mayor en comparación con otros grupos de edad. Entre este grupo de edad de 50 a 64 años, el 15 por ciento indica haber utilizado estos medicamentos para tratar enfermedades crónicas, mientras que el 5 por ciento los tomó únicamente para perder peso. Relativamente pocos adultos menores de 50 años tomaron fármacos GLP-1 para tratar enfermedades crónicas, pero porcentajes similares de personas de 18 a 29 años (7 por ciento) y de 30 a 49 años (6 por ciento) revelan utilizarlos para objetivos de pérdida de peso.
La mayoría de los estadounidenses quieren cobertura de Medicare
Aunque algunos proveedores de seguros ofrecen cobertura para los agonistas del GLP-1, Medicare no cubre estos medicamentos si se recetan para perder peso. La encuesta revela que sólo el 8 por ciento de los adultos de 65 años o más tomaron un fármaco GLP-1 para una enfermedad crónica, y el 1 por ciento lo utilizó únicamente para perder peso. Y ello a pesar de que el 37 por ciento de los encuestados mayores de 65 años declararon que un médico les había informado que padecían sobrepeso u obesidad.
La mayoría de los encuestados cree que Medicare debería empezar a cubrir los medicamentos recetados para adelgazar (aunque actualmente la ley prohíbe que el programa lo haga). De hecho, el 60 por ciento de los adultos que respondieron a la encuesta apoyan que Medicare cubra estos medicamentos.
En el mercado estadounidense existen varios agonistas del GLP-1 para personas diabéticas u obesas, como Ozempic, Trulicity, Byetta, Victoza, Rybelsus, Adlyxin y Bydureon. También se prescribe un tipo de medicamento similar denominado agonista de los receptores GLP-1/GIP, como Mounjaro. Wegovy es un agonista del GLP-1 relativamente nuevo que se comercializa específicamente para quienes desean controlar su peso.
Los agonistas del GLP-1 actúan imitando la hormona GLP-1 que el organismo produce de forma natural. Esta hormona es secretada por el intestino delgado y es responsable de desencadenar la liberación de insulina, bloquear la secreción de glucagón y ralentizar el vaciado del estómago. También ayuda a crear una sensación de saciedad después de comer al afectar a zonas del cerebro que procesan las señales de hambre y saciedad.
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