Una nueva encuesta muestra que más de dos tercios de los banqueros chinos no son optimistas sobre el entorno macroeconómico actual de China.
El 29 de junio, el Banco Popular de China publicó su último Informe de encuesta de banqueros a nivel nacional (pdf), que muestra varios índices sobre el entorno macroeconómico, el sector bancario, la demanda de préstamos y la política monetaria.
El informe del banco central indicó que tan solo el 33.1 por ciento de los banqueros chinos consideraron «normal» el entorno macroeconómico actual del país en el segundo trimestre (Q2), lo que supone una fuerte caída del 29 por ciento respecto al primer trimestre.
Mientras tanto, un 12.7 % adicional de banqueros consideró que la política monetaria del país era «relajada» en comparación con el trimestre anterior. En un entorno de política monetaria relajada, el banco central baja los tipos para estimular el crecimiento económico. Los índices más bajos llevan a los consumidores a pedir más préstamos, aumentando la oferta monetaria.
Por otro lado, el índice de presión macroeconómica de los banqueros (BMHI) bajó 16.6 puntos porcentuales desde el primer trimestre. BMHI es una indicación de la macroeconomía general del país; incluye tendencias como el PIB, la inflación, el empleo, el gasto y la política monetaria y fiscal.
Asimismo, en una tendencia a la baja, el índice de demanda global de préstamos (OLDI) cayó 13.9 puntos porcentuales en comparación con el periodo del año pasado y 15.8 puntos porcentuales respecto al trimestre anterior. El OLDI refleja la demanda de préstamos de varios sectores, como el comercio al por mayor, el comercio al por menor, las empresas inmobiliarias y otras empresas grandes y pequeñas.
El índice del entorno de la industria bancaria (BICI) y el índice de rentabilidad bancaria también cayeron 3.6 y 3.7 puntos porcentuales en comparación con el mismo período del año pasado y cayeron un 6.1 y 5.3 por ciento, respectivamente, en comparación con el trimestre anterior.
El BICI refleja el funcionamiento general del sector bancario, incluida la evaluación de los riesgos financieros en la coyuntura económica actual.
Entre los diversos índices, el índice de sentimiento de política monetaria (MPSI) fue el único que experimentó un aumento, con un 12.7 por ciento más de banqueros que consideraron la política monetaria del país como «relajada» en comparación con el trimestre anterior. Sin embargo, solo el 57.9 por ciento de los banqueros considera que la postura de la política monetaria del país fue «moderada», 12.6 puntos porcentuales menos que en el primer trimestre.
El banco central chino lleva a cabo el Informe de la encuesta de banqueros a nivel nacional desde 2004. La encuesta está dirigida a los directores de instituciones bancarias en toda China, incluidos los bancos comerciales con financiación extranjera, así como a los ejecutivos de diversas empresas de crédito dentro del país.
Albert Song, analista de temas de actualidad y experto en el sistema financiero chino, dijo a The Epoch Times que la política de reducción a cero COVID de Beijing era la causa principal del entorno macroeconómico bajista de China.
“En China, algunos casos nuevos de COVID-19 pueden provocar cierres en toda la ciudad que interrumpen las actividades económicas y cortan las cadenas de suministro. A las empresas les resulta difícil sobrevivir con las restricciones pandémicas intermitentes. Y, en consecuencia, no logran pagar sus préstamos bancarios», dijo Song.
“Los bancos están ansiosos por ver la alta demanda de los préstamos. Por otro lado, las empresas tienen miedo o no están dispuestas a pedir prestado”, explicó Song. “La economía china se enfrenta a tres presiones principales—la contracción de la demanda, la interrupción de la oferta y la debilidad de las expectativas, siendo la debilidad de las expectativas su mayor reto, lo que significa que el público en general y las empresas carecen de confianza en la economía».
La falta de confianza en la economía china también se refleja en el dinero recaudado por los fondos privados recientemente lanzados en China. En la primera mitad de 2022, los fondos privados recién registrados totalizaron USD 102,700 millones, un 60 por ciento menos que en el mismo período del año pasado. Mientras tanto, 15 fondos no pudieron ponerse en marcha durante ese período, según Finance China.
“La falta de recaudación de esos fondos se debe principalmente al mal entorno económico, el debilitamiento de las expectativas de inversión y la falta de buenas oportunidades de inversión”, dijo Song, y agregó que el rendimiento promedio de los fondos de bonos ha sido negativo desde 2022.
Dijo que los riesgos financieros en China están aumentando sustancialmente ya que algunos fondos tienen temas de inversión muy riesgosos, que inevitablemente incurrirán en pérdidas para los inversionistas.
A medida que surgen más noticias negativas, los riesgos bancarios se han convertido en un tema álgido en China tanto para los inversionistas como para los prestatarios.
En abril, casi un millón de chinos no pudieron acceder a sus depósitos bancarios en la provincia central china de Henan. Poco después, los residentes de Shanghai en el este de China; Shenzhen en el sur de China; Dandong en el norte de China y Jiujiang en el centro-este de China también informaron dificultades para retirar efectivo de sus cuentas bancarias, y muchas aún no se han resuelto.
Según se informa, algunos bancos solo atenderán a un número limitado de clientes diariamente, algunos limitan el retiro de cada cliente a no más de 1000 yuanes (unos USD 149) y otros cierran sus sucursales dejando la mayoría de sus cajeros automáticos vacíos.
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