La última norma de la Administración Biden sobre el COVID-19 entró en vigor el lunes y exige a todos los viajeros internacionales que den negativo en la prueba del virus del PCCh en las 24 horas previas a la salida hacia Estados Unidos, independientemente del estado de vacunación.
«Todos los usuarios del transporte aéreo de 2 años o más con un vuelo que parta hacia Estados Unidos desde un país extranjero a partir de las 12:01 de la mañana EST (5:01 de la mañana GMT) del 6 de diciembre de 2021, deben mostrar un resultado negativo de la prueba del virus del COVID-19 tomada como máximo un día antes del viaje, o la documentación de haberse recuperado del COVID-19 en los últimos 90 días, antes de abordar su vuelo», dice el sitio web de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés).
Las medidas fueron anunciadas por el presidente Joe Biden el 2 de diciembre en un intento de «endurecer los protocolos de pruebas previas a la salida exigiendo a todos los viajeros internacionales entrantes que se sometan a la prueba en el plazo de un día antes de la salida en todo el mundo, independientemente de su nacionalidad o estado de vacunación», según un comunicado de la Casa Blanca.
De acuerdo con las normas publicadas la semana pasada, los CDC justificaron la nueva orden diciendo que no está claro si la variante de COVID-19 recientemente nombrada ómicron es más infecciosa, puede vulnerar los anticuerpos contra el COVID-19 o si puede causar una enfermedad más grave. Según un análisis de Epoch Times, hasta el domingo se habían confirmado casos de ómicron en un tercio de los estados de Estados Unidos.
“A medida que el virus que causa el COVID-19 se propaga, tiene nuevas oportunidades de cambiar (mutar) y volverse más difícil de controlar”, escribieron los CDC en la nueva orden. “Si bien se sabe y se espera que los virus cambien a través de la mutación que conduce a la aparición de nuevas variantes, la variante emergente ómicron es particularmente preocupante y de importancia crítica para esta Orden Enmendada”.
Ahora, todos los pasajeros deben presentar una prueba vírica «recogida como máximo un día natural antes de la salida de su vuelo para cumplir los requisitos de esta Orden Enmendada», dice la orden. La única excepción es la de las personas «que presenten una documentación válida de recuperación», según los CDC.
La nueva restricción es una «reducción del plazo anterior de tres días para los pasajeros totalmente vacunados, proporcionará menos oportunidades para desarrollar la infección con la variante ómicron antes de la llegada a Estados Unidos”.
Días antes de la publicación de la norma, Estados Unidos aplicó restricciones de viaje a ocho países del sur de África, donde se descubrió por primera vez la variante ómicron el mes pasado. Otras naciones, como la Unión Europea, Japón e Israel, han impuesto restricciones de viaje por la variante.
Algunos funcionarios de salud pública, incluidos los médicos sudafricanos, han dicho que los pacientes con la variante ómicron han presentado síntomas «extremadamente leves» hasta ahora. Un estudio previo, que no ha sido revisado por expertos, publicado hace varios días también descubrió que ómicron podría haber recogido material genético de un tipo de coronavirus no COVID-19 que causa el resfriado común.
Un equipo de investigadores dirigido por la empresa Nference teorizó que una mutación de inserción de ómicron podría haberse desarrollado en una persona infectada simultáneamente con el virus del PCCh (Partido Comunista Chino) causante del COVID-19 —también conocido como SARS-CoV-2— y el coronavirus HCoV-229E, que puede causar el resfriado común.
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