La noche del martes 29 al miércoles 30 de octubre, España se vio duramente afectada por históricas inundaciones, con un número de víctimas mortales que supera las 200 personas. Entre ellos, una mujer de 34 años y su bebé de tres meses, que fueron arrastrados por las inundaciones en la Comunidad Valenciana.
Lourdes María García, de 34 años, se había refugiado en el techo de su coche con su bebé de tres meses en brazos, mientras las inundaciones causaban estragos el martes 29 de octubre.
En una última llamada telefónica, a las 20:50 horas, ella pidió a su amiga Clara que cuidara de sus otros dos hijos, de unos diez años.
Los cuerpos de la madre y el bebé fueron encontrados al día siguiente por la Guardia Civil. Su trágico final fue recogido por el diario El País.
«Pedían ayuda desde el techo del coche».
Lourdes María García, su marido Antonio Tarazona, de 59 años, y su bebé Angeline, de tres meses, viajaban el martes de Paiporta a Valencia. Por el camino, observaron que el mal tiempo empeoraba y de que el nivel del agua subía. Pero se dieron cuenta de que era demasiado tarde para dar marcha atrás.
«El coche empezó a flotar. Lo pudimos anclar a una señal, yo intenté bajar por la ventana, porque la altura del agua era de metro y medio, pero la fuerza era brutal», cuenta Antonio Tarazona a El País. Tras conseguir salir del coche, intentó sacar al bebé, pero le fue imposible. «Intenté llevarme a la niña a una rotonda, no lo pude conseguir y me desprendí del coche. En el coche se quedó Lourdes y la bebé. Estaba anclado, pero la corriente empezó a arrastrar el coche para abajo y lo último que vi fue cómo pedían auxilio desde el techo del coche», continuó el hombre de 59 años.
Antonio Tarazona relató que intentó escalar una valla para llegar hasta la madre y la hija, pero fue en vano. «Era imposible», lamentó, y añadió que «ya había tenido suerte de no haber fallecido en el intento, no pude hacer nada».
Los otros dos niños de Lourdes ilesos
Antonio Tarazona fue rescatado y trasladado a una sala de alojamiento. Luego siguieron largas horas de espera, durante las cuales no pudo cerrar los ojos, con la esperanza de que su pareja y su bebé fueran encontrados sanos y salvos y se reunieran.
Mientras tanto, la mejor amiga de Lourdes intentaba desesperadamente recabar información sobre el paradero de la madre y su bebé. «Ella es mi mejor amiga, yo soy la tía de sus hijos, no de sangre, pero somos como hermanas, y todavía no sé nada de ellas», comentó a los periodistas españoles en una llamada telefónica el miércoles por la tarde, añadiendo que había recuperado ilesos a los otros dos hijos de Lourdes, de 8 y 10 años.
Los dos cuerpos encontrados el miércoles por la noche
La triste noticia llegó a las diez de la noche del miércoles. La Guardia Civil confirmó a Antonio Tarazona que se habían encontrado los cuerpos de su pareja y de la bebé.
La cifra de muertos por las apocalípticas inundaciones se elevó el jueves a 202, mientras continuaba la búsqueda de las personas que aún están con paradero desconocido. Según la alcaldesa, Maribel Albalat, en la localidad de Paiporta, situada en la periferia sur de Valencia y de unos 25,000 habitantes, murieron al menos 62 personas.
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