FILADELFIA —Con la vista puesta en el lugar donde el primer y único candidato independiente que ganó la presidencia estadounidense ayudó a establecer el gobierno del nuevo país, Robert F. Kennedy Jr. se paró frente al Centro Nacional de la Constitución en Filadelfia el 9 de octubre y dijo a sus partidarios que cree que tomará un camino similar hacia la Casa Blanca.
«Hoy, estamos pasando una nueva página en la política estadounidense», dijo el Sr. Kennedy tras hacer el esperado anuncio de que se postulará a la presidencia como independiente en las elecciones de 2024 y se apartará de las primarias del Partido Demócrata.
«Ha habido candidatos independientes antes. Pero esta vez es diferente. Esta vez, el independiente va a ganar», dijo el Sr. Kennedy.
«Tres cuartas partes de los estadounidenses creen que el presidente Biden es demasiado mayor para gobernar con eficacia. El presidente Trump se enfrenta a múltiples juicios civiles y penales. Ambos tienen índices de favorabilidad profundamente en territorio negativo», dijo. «Eso es lo que nos ha dado la política bipartidista, y por eso necesitamos soltar el martillo del poder corrupto sobre Washington D.C. y hacer que esta nación vuelva a ser nuestra».
George Washington, el primer presidente de Estados Unidos, es el único candidato que se presentó a las elecciones como independiente y ganó. El presidente Washington se opuso al desarrollo de los partidos políticos, temiendo que el partidismo acabara destruyendo el país. El Sr. Kennedy hizo referencia al discurso de despedida del presidente Washington en 1796.
«Inevitablemente, dijo, los partidos políticos serán tomados por una minoría astuta, ambiciosa y sin principios que servirá a los intereses del partido más que a los de la nación y usurpará para sí las riendas del gobierno», dijo el Sr. Kennedy. «La funesta predicción de Washington ciertamente se ha hecho realidad. Tengo la intención de arrebatar las riendas a ambos partidos y devolvérselas al pueblo americano».
«Poderes corruptores»
Durante su discurso del 9 de octubre, el Sr. Kennedy dijo a una audiencia entusiasta que ha «declarado su independencia de los dos partidos políticos y de los intereses corruptos que los dominan, y de todo el sistema amañado de rencor y rabia, corrupción y mentiras, que ha convertido a los funcionarios del gobierno en sirvientes de sus jefes corporativos. Si no se los controla, mercantilizarán nuestro aire, agua, alimentos, mano de obra y niños, y convertirán el Sueño Americano en desesperación y polvo».
«Declaré mi independencia de estos poderes corruptores porque son incompatibles con los derechos inalienables que nuestra Declaración de Independencia original invocó en 1776: la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad», añadió el Sr. Kennedy, tras incluir a «los medios de comunicación mercenarios, las élites cínicas», las corporaciones que han secuestrado al gobierno, Wall Street, las grandes empresas tecnológicas, la gran industria farmacéutica, las grandes corporaciones agrícolas y los contratistas militares y sus grupos de presión en la lista de entidades de las que se separa.
El Sr. Kennedy admitió que declarar su independencia del Partido Demócrata fue una decisión que no se tomó a la ligera.
«Es doloroso para mí abandonar el partido de mis tíos, de mi padre, de mi abuelo y de mis dos bisabuelos —John ‘Honey Fitz’ Fitzgerald, primer alcalde católico irlandés de Boston, y Patrick Kennedy, jefe de distrito de Boston— que, juntos, lanzaron la dinastía política de mi familia hace más de un siglo», explicó el Sr. Kennedy.
«Pero mi sacrificio no es nada comparado con el riesgo que corrieron nuestros padres fundadores cuando firmaron la Declaración de Independencia hace 247 años, justo ahí», continuó el Sr. Kennedy, señalando el Independence Hall.
«Sabían que si su revolución fracasaba, hasta el último de ellos sería ahorcado. Decidieron jugárselo todo».
Amplio apoyo
Desde que anunció su candidatura en abril para desafiar al presidente Joe Biden por la nominación presidencial del Partido Demócrata en 2024, Kennedy ha conseguido el apoyo de conservadores, moderados, independientes y libertarios.
El Comité Nacional Demócrata (DNC, por sus siglas en inglés), y los demócratas progresistas, lo han criticado constantemente. En su reunión de invierno a principios de este año, el DNC votó a favor de dar todo su apoyo al presidente Biden y desplazar a Nuevo Hampshire e Iowa de sus tradicionales primeros puestos en el proceso de nominación, sustituyéndolos por Carolina del Sur.
En 2020, el presidente Biden perdió decisivamente el caucus de Iowa y las primarias de Nuevo Hampshire frente al senador Bernie Sanders (I-Vt.) antes de ganar Carolina del Sur.
En los últimos meses, el Sr. Kennedy ha insinuado que está «explorando todas las opciones» debido a los obstáculos presentados por el DNC, al que acusó de «amañar» el proceso de primarias.
«Ha habido candidatos anti-establishment antes, pero ninguno que entienda cómo hacer ese trabajo», dijo el Sr. Kennedy.
«A diferencia del presidente Trump, llevo 40 años luchando contra la corrupción empresarial y demandando a las agencias gubernamentales. Sé cómo funcionan y sé cómo limpiarlas».
«Y a diferencia de cualquier presidente desde 1963, me enfrentaré al complejo militar-industrial. Cobraré el dividendo de la paz y traeré a nuestros soldados a casa con honor. Reconstruiré la fortaleza de Estados Unidos desde dentro hacia fuera».
«Sin embargo, lo que realmente aterroriza a las élites no soy yo. Es lo que yo represento: un movimiento populista que desafía la división izquierda-derecha», continuó el Sr. Kennedy.
«Sigue siendo un demócrata»
Tras el anuncio del Sr. Kennedy, el Comité Nacional Republicano emitió un comunicado que decía: «No se equivoquen: un demócrata vestido de independiente sigue siendo un demócrata». RFK Jr. no puede esconderse de su historial de respaldo a Hillary, de apoyo al Nuevo Pacto Verde, de lucha contra el oleoducto Keystone y de alabanza a las subidas de impuestos de AOC. Es el típico liberal elitista y los votantes no se dejarán engañar.
«Las familias estadounidenses merecen un liderazgo con sentido común que devuelva a Estados Unidos su independencia energética, detenga la Bidenflación, asegure nuestra frontera y vuelva a encarrilar a nuestro país, por eso nuestro candidato republicano será el próximo presidente de Estados Unidos».
Según múltiples encuestas, el gran favorito para asegurarse la nominación del Partido Republicano es el expresidente Donald Trump. Tras el discurso del Sr. Kennedy el 9 de octubre, la campaña del presidente Trump dijo en un comunicado que «los votantes no deben dejarse engañar por nadie que pretenda tener valores conservadores».
«El hecho es que RFK tiene unos antecedentes inquietantes impregnados de posiciones radicales y liberales. Ya sea simpatizando con China, denigrando a los propietarios de armas, promoviendo políticas ecologistas que matan a las empresas o apoyando el aborto a petición, una candidatura de RFK no es más que un proyecto de vanidad para un Kennedy liberal que busca sacar provecho del nombre de su familia».
El 2 de octubre, una encuesta encargada por el comité de acción política American Values 2024 que trabaja para que el Sr. Kennedy sea elegido presidente y realizada por Zogby Strategies mostró que si el Sr. Kennedy se presentara como candidato independiente o de un tercer partido en una contienda contra el presidente Biden y el presidente Trump, partiría con un 19 por ciento en comparación con el 38 por ciento del presidente Biden y el presidente Trump.
«Demasiado bagaje»
Un republicano registrado que votó por el presidente Trump en 2016 y 2020, Brent Snyder asistió al anuncio del Sr. Kennedy en Filadelfia y dijo a The Epoch Times que «hay demasiada corrupción con los dos partidos y estoy cansado de ello. Necesitamos a alguien nuevo, alguien fresco, que pueda unirnos».
El Sr. Kennedy atrae a los moderados y a los independientes mientras que el presidente Trump tiene problemas para llegar a esos votantes, comentó el Sr. Snyder.
«Creo que ahora mismo, mucha gente siente que hay una enorme división en este país. Y aunque apoyo al presidente Trump, simplemente creo que trae demasiada división y demasiado bagaje», dijo el Sr. Snyder.
«Quiero decir, no puede centrarse en postularse a presidente y no puede centrarse en su trabajo como presidente si sigue teniendo estas imputaciones».
Brigid Linsenmeyer es una enfermera que condujo dos horas desde Maryland para escuchar el anuncio del Sr. Kennedy.
«No estuve afiliada durante muchos años y luego, después de oírlo hablar, me registré como demócrata para poder votar por él en las primarias», dijo a The Epoch Times.
La Sra. Linsenmeyer cree que el hecho de que el Sr. Kennedy abandone las primarias del Partido Demócrata y se presente como independiente ayudará a sus posibilidades de ganar en 2024 porque le dará 13 meses para hacer campaña.
«Es importante para él ponerse delante de la gente para que puedan oírlo hablar y escuchar lo que va a hacer», dijo la Sra. Linsenmeyer. «Tener 13 meses es bueno, ya que eso le da más tiempo para que la gente le escuche de primera mano en lugar de lo que oyen de él en los medios de comunicación».
El Sr. Kennedy dijo que «va a ser difícil saber si nuestra administración es de derechas o de izquierdas». Admitió que se equivocó al criticar la política del presidente Trump sobre la frontera sur, y cómo eso demuestra su compromiso de «escuchar con nuevos oídos a las personas con las que no estoy de acuerdo, y ver soluciones que de otro modo habrían sido invisibles».
«Hace seis meses, pensaba que una frontera abierta era una política humanitaria, y que sellar la frontera significaba que eras un xenófobo o quizás incluso un racista. Estaba equivocado», dijo el Sr. Kennedy.
«¿Cómo aprendí que estaba equivocado? No fue sólo porque escuchara a la otra parte. Fue cuando realmente visité la frontera y escuché a la gente que no estaba en ninguno de los dos lados. Mi punto de vista cambió cuando hablé con agentes de la Patrulla Fronteriza, con funcionarios locales, con trabajadores humanitarios y con los propios migrantes», añadió.
«Vi que ningún partido tiene el monopolio de la sabiduría, y que ninguna narrativa simplista contiene toda la verdad. Mi promesa como presidente es que, en cada asunto, escucharé a las partes interesadas de cada lado y más allá de cualquier lado. Mantendré mis convicciones morales absolutamente, pero también sostendré mis opiniones con ligereza».
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