Estados Unidos instó al diálogo con Corea del Norte este lunes después de que Pyongyang advirtiera de que podría derribar un avión de reconocimiento de la Fuerza Aérea estadounidense por una supuesta intromisión en su espacio aéreo.
«Yo solo diría que nosotros urgiríamos a la RPDC que se abstenga de llevar a cabo acciones de escalada y de nuevo les pediríamos que participen en una diplomacia seria y sostenida», dijo a los reporteros el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller.
RPDC se refiere al nombre oficial de Corea del Norte, República Popular Democrática de Corea.
Miller reiteró que Washington está dispuesto a dialogar con Corea del Norte sin condiciones previas.
«Lo hemos dejado claro en varias ocasiones y, por desgracia, ellos se han negado a participar de una manera significativa», añadió.
El Sr. Miller también dijo que China, un importante aliado de Corea del Norte, podría desempeñar un papel para convencer a Corea del Norte de que adopte medidas de desescalada «si así lo decide» y que Washington seguirá instando a Beijing a que lo haga.
Sus comentarios se produjeron después de que Kim Yo Jong, hermana del líder norcoreano Kim Jong Un, dijera que Estados Unidos sobrevoló el lunes varias veces la zona económica exclusiva de Corea del Norte con un avión de reconocimiento.
Ella advirtió de que las fuerzas estadounidenses «experimentarán un vuelo muy crítico» si continúan entrometiéndose ilegalmente en el espacio aéreo norcoreano, informó la Agencia Central de Noticias de Corea (KCNA).
Un portavoz del ministerio de Defensa de Corea del Norte acusó a Estados Unidos de un «provocativo espionaje aéreo» y amenazó con derribar cualquier avión de reconocimiento que se inmiscuya en su espacio aéreo, informó la KCNA.
El portavoz afirmó que Washington había sobrevolado con aviones espía y drones -RC-135, U-2S y RQ-4B- los mares oriental y occidental de Corea entre el 2 y el 9 de julio y advirtió de que el país «pagaría el precio».
«Nosotros ahora mantenemos nuestra máxima paciencia y autocontrol, pero todo tiene un límite», declaró el portavoz.
«Aquí no hay garantías de que un accidente tan impactante como el derribo del avión de reconocimiento estratégico de la Fuerza Aérea de EE. UU. no se produzca en el Mar Oriental de Corea».
La portavoz del Pentágono, Sabrina Singh, rechazó la afirmación de Corea del Norte como una «mera acusación» y reiteró que el ejército estadounidense opera de acuerdo con el derecho internacional.
«No tengo nada más que decir sobre esos comentarios o amenazas procedentes de Corea del Norte. Operamos de forma responsable y segura en las vías navegables y en el espacio aéreo internacional, siempre que podemos», declaró a los periodistas.
Los militares surcoreanos también rechazaron la afirmación de Corea del Norte y dijeron que los activos de vigilancia aérea de Estados Unidos realizan regularmente vuelos de reconocimiento alrededor de la península, informó Reuters.
Submarino nuclear
Corea del Norte criticó a Estados Unidos por desplegar un submarino nuclear cerca de la península coreana, calificándolo de «el chantaje nuclear más indisimulado» contra Corea del Norte y sus países vecinos.
«Que se cree o no en la península coreana una situación extrema, no deseada por nadie, depende de la acción futura de Estados Unidos, y si se produce alguna situación repentina en el futuro, Estados Unidos será totalmente responsable de ella», afirmó Corea del Norte.
El mes pasado, Estados Unidos envió a Corea del Sur el submarino nuclear de misiles guiados USS Michigan, como parte de la Declaración de Washington firmada entre ambos países en abril.
El USS Michigan es el primer submarino nuclear de misiles guiados que atraca en Corea del Sur en casi seis años. Su despliegue se produjo después de que Corea del Norte disparara dos misiles de corto alcance al mar, los que cayeron dentro de la zona económica exclusiva de Japón.
Una imagen de archivo del submarino de misiles guiados USS Michigan el 25 de abril de 2017, en Busan, Corea del Sur. (Especialista en Comunicación de Masas de 2ª Clase de la USN Jermaine Ralliford vía Getty Images)
El presidente Joe Biden y el presidente surcoreano Yoon Suk Yeol firmaron la Declaración de Washington el 29 de abril, en la que se esboza la ampliación de un conjunto de medidas de disuasión de Estados Unidos que implican el despliegue de activos estratégicos estadounidenses en la península coreana. Biden dijo que Estados Unidos desplegará sistemas con capacidad nuclear en la península coreana.
En la declaración, Corea del Sur expresó su «plena confianza» en la ampliación de los compromisos de disuasión de Estados Unidos, y Washington se comprometió a hacer «todo lo posible» para consultar con Corea del Sur sobre «cualquier posible empleo de armas nucleares» en la región.
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