Opinion
Nunca adivinará cuántos murieron o resultaron gravemente heridos solo en el primer año. Sin embargo, la FDA y los CDC siguen impulsando las inyecciones, a pesar de que sus propios datos de ensayo muestran que no tienen ningún beneficio en términos de reducir su riesgo de hospitalización o muerte.
-Según una encuesta realizada en diciembre del 2021 a 2840 estadounidenses, entre 217,330 y 332,608 personas murieron a causa de las vacunas COVID en 2021.
-Los resultados de la encuesta también muestran que las personas que se vacunaron tenían más probabilidades de conocer a alguien que experimentó un problema de salud a causa de la infección por COVID-19, mientras que los que conocían a alguien que experimentó un problema de salud después de vacunarse tenían menos probabilidades de vacunarse.
-De los encuestados, el 34 por ciento conocía a una o más personas que habían experimentado un problema de salud importante debido a la enfermedad por COVID-19, y el 22 por ciento conocía a una o más personas que habían resultado heridas por la inyección.
-El 51 por ciento de los encuestados habían sido vacunados. De ellos, el 13 por ciento declaró haber experimentado un problema de salud «grave» tras la inyección. Compárese con el análisis de seguridad de seis meses de Pfizer, que afirmaba que sólo el 1,2 por ciento de los participantes en el ensayo experimentaron un acontecimiento adverso grave.
-En diciembre del 2022, Rasmussen Reports encuestó a 1000 estadounidenses. En este sondeo, el 34 por ciento afirmó haber experimentado efectos secundarios leves y el 7 por ciento, efectos secundarios graves.
Aunque está claro que las inyecciones experimentales de COVID mataron a un número considerable de personas, el número total de víctimas mortales sigue siendo escurridizo, gracias a que las agencias sanitarias estadounidenses ofuscan, ocultan y manipulan los datos.
Dicho esto, el estudio más reciente1,2, publicado en la revista BMC Infectious Diseases, sitúa el número de víctimas mortales de las inyecciones contra el COVID entre 217,330 y 332,608 solo en 2021. Como señala Steve Kirsch:3
«Matamos al menos a 217,000 estadounidenses y herido gravemente a 33 millones … sólo en el primer año, y los CDC (Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades) y la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU.) quieren dar más inyecciones. Dado que las muertes por la vacuna fueron mayores en 2022, la mayoría de los expertos estimarían que el número de muertes por todas las causas de las vacunas COVID está en el rango de 500K a 600K.
«Así que el coste global de vida a causa de estas vacunas es del orden de 10 a 12 millones de personas. Estos datos son consistentes con los números que estuve diciendo durante mucho tiempo. No es una coincidencia».
Encuesta: Por qué la gente recibió o no la vacuna
El enfoque de este estudio es interesante. Su objetivo principal era «identificar los factores asociados por los ciudadanos estadounidenses con la decisión de vacunarse contra el COVID-19».
El autor tenía curiosidad por saber por qué el 31 por ciento de la población estadounidense había rechazado la inyección o no había completado la serie primaria en noviembre del 2022, casi dos años después de una campaña de «vacunación» anunciada masivamente.
El cálculo de la proporción de casos mortales provocados por la vacuna era secundario. Como explica el autor, Mark Skidmore,4 doctor en economía y profesor de la Universidad Estatal de Michigan:5
«Un factor en gran medida inexplorado es el grado en que los problemas graves de salud derivados de la enfermedad COVID-19 o de las vacunas COVID-19 entre familiares y amigos influyen en la decisión de vacunarse.
«Una enfermedad grave debida al COVID-19 haría más probable la vacunación; los beneficios percibidos de evitar el COVID-19 mediante la vacunación serían mayores.
«Por otro lado, la observación de problemas de salud importantes tras la vacunación de COVID-19 dentro de la propia red social aumentaría los riesgos percibidos de la vacunación. Los estudios anteriores no evaluaron el grado en que las experiencias con la enfermedad y los daños causados por la vacuna influyen en el estado de vacunación.
«El principal objetivo de esta encuesta online sobre experiencias sanitarias con el COVID-19 es investigar el grado en que la enfermedad y los acontecimientos adversos de la vacuna contra el COVID-19 entre amigos y familiares, ya sean percibidos o reales, influyeron en las decisiones de inoculación. El segundo objetivo de este trabajo es estimar el número total de muertes inducidas por la vacuna COVID-19 en todo el país a partir de la encuesta».
He aquí un extracto que describe la metodología:6
«Se realizó una encuesta en línea sobre las experiencias sanitarias de COVID-19. Se recopiló información sobre las razones a favor y en contra de la vacunacion contra el COVID-19, las experiencias con la enfermedad COVID-19 y las vacunaciones contra COVID-19 por parte de los encuestados y sus círculos sociales. Se realizaron análisis de regresión logit para identificar los factores que influyen en la probabilidad de vacunarse».
Resultados de la encuesta
Un total de 2840 personas completaron la encuesta entre el 18 y el 23 de diciembre del 2021. La edad media era de 47 años, y la proporción de sexos era de 51 por ciento mujeres y 49 por ciento hombres. Algo más de la mitad, el 51 por ciento había recibido una o más dosis de COVID.
Como sospechaba Skidmore, los resultados mostraron que las personas que se vacunaron tenían más probabilidades de conocer a alguien que hubiera experimentado un problema de salud debido a la infección por COVID-19, mientras que las que conocían a alguien que había experimentado un problema de salud después de vacunarse tenían menos probabilidades de vacunarse.
De los encuestados, el 34 por ciento conocía a una o más personas que habían experimentado un problema de salud importante debido a la enfermedad COVID-19, y el 22 por ciento conocía a una o más personas que habían resultado heridas por la inyección. Así pues, como señala el autor:7
«Conocer a alguien que informó de problemas de salud graves a causa del COVID-19 o de la vacunación contra el COVID-19 son factores importantes para la decisión de vacunarse».
En cuanto a los tipos de efectos secundarios experimentados por las personas de los círculos sociales de los encuestados, incluían (pero no se limitaban a) los «sospechosos habituales», tales como
-Problemas cardiacos y cardiovasculares.
-Infección grave por COVID u otras enfermedades respiratorias.
-Malestar general, debilidad, fatiga y falta de aliento durante semanas.
-Coágulos sanguíneos e ictus.
-Muerte.
Cientos de miles de muertos sin motivo
Basándose en estos datos de la encuesta, Skidmore estima:
«… el número total de muertes debidas a la vacunación contra el COVID-19 puede ascender a 278000 (95 por ciento CI 217.330-332.608) cuando se eliminan las muertes que podrían haber ocurrido independientemente de la vacunación».
Si el COVID-19 fuera una infección con una tasa de mortalidad extremadamente alta, tal vez las altas tasas de mortalidad de una vacuna serían aceptables. Pero el COVID-19 tiene una tasa de mortalidad excepcionalmente baja, a la par o inferior a la de la gripe, por lo que el riesgo asociado a las vacunas contra el COVID debería ser igualmente bajo.
Tal y como están las cosas, los riesgos de las vacunas son muy altos, mientras que los propios datos del ensayo de Pfizer, con más de 40,000 participantes, muestran que no ofrecen ningún beneficio en términos de riesgo de hospitalización y/o muerte. La reducción absoluta del riesgo es tan ínfima que resulta intrascendente.8
Elevadas tasas de efectos secundarios
Sin embargo, el número de muertes provocadas por las vacunas no es lo único preocupante de este estudio. Los hallazgos de Skidmore también sugieren que los efectos secundarios de la vacuna pueden ser más comunes de lo que se sospechaba.
Como ya se mencionó, el 51 por ciento de los encuestados había recibido la vacuna. De ellos, el 15 por ciento declaró haber experimentado un nuevo problema de salud tras la inyección y el 13 por ciento lo consideró «grave». Compárese con el análisis de seguridad a los seis meses de Pfizer,9 que afirmaba que sólo el 1,2 por ciento de los participantes en el ensayo había informado de un acontecimiento adverso grave.
Ahora, como sugiere Kirsch,10 «tenemos que descontar eso por un factor de dos porque la gente reporta eventos adversos menos severos como eventos adversos». Aun así, eso significa que los acontecimientos adversos graves de la vacuna son cinco veces superiores a los que Pfizer comunicó.
«Esta es la razón por la que la FDA nunca hace estudios posteriores a la comercialización de los medicamentos que aprueba. Porque la realidad duele», escribe Kirsch.11 «Es la FDA la que debería haber descubierto esto antes que Mark Skidmore. La FDA está dormida al volante y se cree a pies juntillas todo lo que le dicen las compañías farmacéuticas. Esto es un gran error. ¿Por qué no hacen encuestas como ésta para ver si la realidad coincide con el estudio?».
Más comparaciones de las tasas de efectos secundarios
Para una comparación adicional, he aquí los resultados de otras investigaciones:
-Rasmussen Reports12: En diciembre del 2022, Rasmussen Reports encuestó a 1000 estadounidenses. En esta encuesta, realizada un año después de la encuesta de Skidmore, el 34 por ciento informó haber experimentado efectos secundarios leves por la vacuna y el 7 por ciento, efectos secundarios graves.
-Datos V-Safe de los CDC13: En octubre del 2022, ICAN [Informed Consent Action Network] obtuvo los datos V-Safe de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades. Se trata de un programa voluntario para controlar las reacciones adversas a las vacunas. De los 10,1 millones de receptores de la vacuna COVID que utilizaron la aplicación, el 7,7 por ciento tuvo que buscar atención médica después de la vacuna.
-Encuesta financiada por Kirsch14: Una encuesta realizada en junio del 2022 en EE.UU. por la empresa de estudios de mercado Pollfish reveló que el 16,3 por ciento de los vacunados contra el COVID sufrieron alguna lesión y el 9,7 por ciento necesitó atención médica.
El siguiente gráfico, que compara visualmente los resultados de Skidmore con los de las encuestas de Rasmussen, V-Safe y Pollfish, fue creado por InfoGame en Substack.15 Como señala InfoGame:
«El artículo de Skidmore sirve como otra señal de que la tasa de efectos secundarios del COVID-19 es extremadamente alta y de que las vacunas COVID-19 son un producto médico de riesgo sin precedentes».
Las irregularidades menstruales son comunes después de la vacuna
Ya que estamos hablando de efectos secundarios, varias encuestas también se centraron en la frecuencia de menstruaciones anormales en mujeres que recibieron la vacuna, lo que podría ser indicativo de daños reproductivos. Por ejemplo:
-Una encuesta británica publicada a principios de diciembre del 2021 reveló que el 20 por ciento de las mujeres experimentaron alteraciones menstruales después de la inyección.16
–Un estudio publicado en Science Advances a mediados de julio del 2022 reveló que el 66 por ciento de las mujeres posmenopáusicas «totalmente vacunadas» experimentaron un sangrado intermenstrual anormal. En total, el 42,1 por ciento informó de un flujo menstrual más abundante después de la vacuna (esto incluía a mujeres de todas las edades, así como a transexuales con tratamientos hormonales).17
Un estudio italiano revisado por pares y publicado en marzo del 2022 descubrió que «entre el 50 por ciento y el 60 por ciento de las mujeres en edad reproductiva que recibieron la primera dosis de la vacuna COVID-19 informaron de irregularidades en el ciclo menstrual, independientemente del tipo de vacuna administrada». Después de la segunda dosis, entre el 60 y el 70 por ciento informaron de menstruaciones anormales.18
La gente de las altas esferas busca la retractación
No es de extrañar que las altas esferas ya estén intentando forzar una retractación del artículo. Un aviso especial del editor, fechado apenas dos días después de la publicación, afirma:
«Se advierte a los lectores de que las conclusiones de este artículo son objeto de críticas que están siendo estudiadas por los editores. En concreto, que las afirmaciones carecen de fundamento y que existen dudas sobre la calidad de la revisión por pares».
Como señala Kirsch:19
«Están intentando activamente que se retracte el artículo porque destruye la narrativa. Estoy seguro de que lo conseguirán porque las revistas están sometidas a una intensa presión para censurar cualquier artículo contrario a la narrativa». El problema es que la encuesta de Mark coincidía totalmente con mis encuestas.
«Si quieren que se retracte el artículo tienen que mostrarnos SUS encuestas. Pero, por supuesto, no tienen ninguna encuesta porque tienen demasiado miedo de los resultados.
«Así que, en lugar de recopilar sus propios datos, esgrimen argumentos como «no me gusta la metodología» o alguna tontería por el estilo. NUNCA nos mostrarán datos de encuestas que apoyen su narrativa porque no están ahí.
«Por eso no hay anécdotas de éxito. NADIE puede darme el nombre de una consulta geriátrica estadounidense en la que las muertes por todas las causas cayeran en picada tras la implantación de las vacunas. En todos los casos, tomaron el camino equivocado. La narrativa se está desentrañando a un ritmo acelerado, pero la comunidad médica sigue luchando contra la verdad».
Publicado originalmente el 07 de febrero de 2023 en Mercola.com
◇ Fuentes y referencias
1, 5, 6, 7 BMC Enfermedades Infecciosas 2023; 23 número de artículo 51
2 Jean Marc Benoit MD Substack 24 de enero de 2023
3, 10, 11, 19 Steve Kirsch Substack 25 de enero de 2023
4 Universidad Estatal de Michigan Mark Skidmore
8 Steve Kirsch Substack 24 de enero de 2023
9 NEJM 4 de noviembre de 2021; 385: 1761-1773
12 Rasmussen Reports 7 de diciembre de 2022
13 ICANdecide.org 3 de octubre de 2022
14 SKirsch.com 1 de julio de 2022
15 Infogame Substack 25 de enero de 2023
16 MedRxiv 6 de diciembre de 2021
17 Science Advances 15 de julio de 2022; 8(28)
18 Open Med 9 de marzo de 2022; 17(1): 475-484
Las opiniones expresadas en este artículo son las del autor y no reflejan necesariamente los puntos de vista de The Epoch Times.
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.