Estados Unidos evacuó este lunes al personal del Departamento de Estado en funciones en la embajada de Ucrania hacia Polonia, mientras sigue creciendo el temor de una invasión liderada por Moscú, momentos después de que Rusia ordenara la entrada de tropas en las regiones separatistas ucranianas de Donetsk y Luhansk para dar curso a lo que llamó «mantenimiento de la paz».
Citando «razones de seguridad», el secretario de Estado, Antony Blinken, dijo a través de una declaración que el personal que se encontraba en la ciudad occidental de Ucrania, Lviv, pasaría la noche en Polonia.
«Nuestro personal regresará regularmente para continuar su trabajo diplomático en Ucrania y prestar servicios consulares de emergencia», dijo Blinken. «Ellos seguirán apoyando al pueblo ucraniano y al gobierno ucraniano, coordinando los esfuerzos diplomáticos».
El compromiso de Estados Unidos con Ucrania sigue siendo «inquebrantable», dijo.
«El hecho de que estemos tomando precauciones prudentes en aras de la seguridad del personal del gobierno de Estados Unidos y de los ciudadanos estadounidenses, como hacemos regularmente en todo el mundo, no socava en absoluto nuestro apoyo o nuestro compromiso con Ucrania», añadió Blinken.
La decisión de reubicar temporalmente al personal se produjo apenas unos días después de que el personal de la embajada estadounidense fuera trasladado de Kiev a Lviv, debido a la «dramática aceleración» del número de soldados rusos cerca de su frontera con Ucrania.
The Epoch Times se ha puesto en contacto con el gobierno de Biden para pedirle comentarios.
El presidente ruso, Vladimir Putin, anunció el lunes que reconocía a las autoproclamadas República Popular de Donetsk y República Popular de Luhansk, dos enclaves respaldados por el Kremlin que han acusado a las fuerzas armadas ucranianas de bombardear y exacerbar las tensiones, afirmaciones que Ucrania ha negado inequívocamente.
Estados Unidos y funcionarios ucranianos advirtieron que esperan que Moscú pueda inventarse «pretextos» para justificar una invasión de Ucrania.
Putin firmó el lunes un decreto emitido por el Kremlin que autoriza la entrada de tropas militares rusas en la región Donbas, en el este de Ucrania, diciendo que los soldados «mantendrán la paz». La presencia de fuerzas de operaciones especiales rusas en el Donbas ha sido advertida en numerosas ocasiones desde la crisis de Crimea en 2014.
«La posición rusa es que no hay fuerzas rusas presentes en esta parte de Donbas», dijo un alto funcionario de la administración Biden a los periodistas, respondiendo al decreto el lunes. «La realidad, como hemos señalado en varias ocasiones a lo largo de estos últimos años, ha sido muy diferente».
«Ha habido fuerzas rusas presentes en estas zonas en todo momento y, por tanto, vamos a observar muy de cerca lo que hagan en las próximas horas y días y nuestra respuesta se medirá en función, de nuevo, de sus acciones”, añadió el funcionario.
Blinken en su declaración del lunes también instó a los ciudadanos estadounidenses a salir de Ucrania «inmediatamente».
«La situación de seguridad en Ucrania sigue siendo impredecible en todo el país y puede deteriorarse con poco aviso», dijo el secretario de Estado.
Es muy probable que cualquier operación militar rusa «restrinja severamente los viajes aéreos comerciales», añadió.
«Las tropas rusas han seguido acercándose a la frontera en lo que parecen planes para una invasión en cualquier momento», advirtió Blinken, citando la escalada de violencia y los informes de bombardeos en las regiones de Kharkiv, Luhansk y Donetsk en los últimos días.
«Los ciudadanos estadounidenses que decidan permanecer en estas áreas a pesar de nuestro consejo de salir de Ucrania inmediatamente deben permanecer vigilantes y alertas a sus alrededores. En caso de ataque, los ciudadanos estadounidenses deben buscar refugio en una estructura reforzada y seguir los principales medios de comunicación para saber cuándo es seguro moverse», añadió.
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