El fundador de Oath Keepers, Elmer Stewart Rhodes III, busca testificar y exponer, según él, las mentiras del Comité Selecto de la Cámara del 6 de enero.
Quiero un “testimonio público televisado, esa es la única condición”, dijo Rhodes.
«Si me dieran la oportunidad de dar una declaración inicial, estoy escribiendo lo que les daría», le dijo Rhodes a The Epoch Times el 10 de julio. «Si declinan aceptar mi oferta, voy a seguir adelante y publicaré mi declaración inicial».
Rhodes dijo que no espera que el comité acepte su oferta porque su aparición sería una discusión libre, no una presentación con guion.
“Deberían aprovechar la oportunidad, pero no lo harán porque no quieren eso”, dijo. “Lo que quieren es lo que has visto, que es solo un programa de prueba con guion, controlado y preseleccionado. Solo van a poner personas frente al público que saben que van a decir lo que quieren que digan”.
“Quiero que se retracten”, dijo Rhodes. “Quiero rebatir esta falsa narrativa. No quieren la verdad. Por eso no me dejan subir al estrado, sin ser investigado ni entrenado, y responder a las preguntas porque no quieren que se sepa la verdad”.
“Si estuvieran preocupados por la verdad, toda la verdad y nada más que la verdad, agradecerían la oportunidad de hablar conmigo porque abogué por la Quinta Enmienda en todo, desde el momento de las elecciones en febrero. No respondí preguntas sobre nada después de la noche de las elecciones”.
“Renuncio a mis derechos de la Quinta Enmienda”
El Comité Selecto se reunirá el 12 de julio en Washington D.C.
El panel podría celebrar una audiencia en horario estelar el 14 de julio. Planea cubrir el tema del extremismo doméstico y los roles supuestamente desempeñados por Oath Keepers y Proud Boys el 6 de enero de 2021.
A diferencia de su aparición anterior ante el comité, Rhodes dijo que abandonaría su derecho de la Quinta Enmienda contra la autoincriminación y respondería preguntas, pero solo si la audiencia se transmite en vivo.
“Así que lo haré ahora y renunciaré a mis derechos de la Quinta Enmienda y lo haré frente al público”, dijo Rhodes en una llamada desde el Centro de Detención de la ciudad de Alexandria en Virginia, donde está detenido en espera de juicio. Está acusado de conspiración sediciosa y conspiración para obstruir un procedimiento oficial, entre otros cargos.
Rhodes fue acusado por primera vez el 12 de enero, más de un año después de los disturbios en el Capitolio. Él, otros seis Oath Keepers y un asociado recibieron una nueva acusación formal (pdf) el 22 de junio.
Los fiscales dicen que los implicados conspiraron para “oponerse a la transferencia legal del poder presidencial por la fuerza” al “irrumpir e intentar tomar el control de los terrenos y el edificio del Capitolio” para prevenir, obstaculizar o retrasar la certificación de los votos del Colegio Electoral en una sesión conjunta del Congreso.
Oath Keepers y sus abogados dicen que el cargo de conspiración sediciosa se inventó completamente al leer mal y tergiversar chats de mensajería, llamadas telefónicas y reuniones en Internet. Dicen que los Oath Keepers estaban en Washington D.C. ese día para brindar seguridad a los oradores VIP conservadores en eventos que respaldan al presidente Donald Trump.
Su transporte de armas a la cercana Virginia fue parte de los preparativos del grupo para lo que creían que podría ser la situación en la que el presidente invocara la Ley de Insurrección debido a un ataque de Antifa en la Casa Blanca, dijo Rhodes.
Narrativas incompletas
Rhodes dijo que el comité ya ha engañado al hablar sobre los Oath Keepers. Señaló una audiencia en la que se mostró una imagen fija de él en un estacionamiento de Washington, D.C., con el expresidente de Proud Boys, Enrique Tarrio, el 5 de enero de 2021. Si el comité hubiera mostrado el video completo del evento, habría sido claro que la supuesta reunión entre los hombres fue un mero apretón de manos sin discusión, dijo Rhodes.
“Mostraron una foto fija de mí hablando con Enrique Tarrio en lugar del video, que me muestra acercándome, saludando y alejándome porque no era mi reunión; era la reunión de otra persona”, dijo Rhodes.
El vídeo muestra que el contacto entre Tarrio y Rhodes duró menos de 30 segundos, aunque en los documentos de la fiscalía se ha descrito como un encuentro de 30 minutos.
Rhodes dijo que Tarrio estaba en el garaje para hablar con Bianca Gracia de Latinos for Trump y la abogada Kellye SoRelle. Querían asegurarse de que tuviera representación legal después de su arresto por prenderle fuego a una pancarta de Black Lives Matter en Washington D.C. en diciembre de 2020.
Rhodes dijo que era parte del equipo de seguridad de SoRelle. SoRelle, quien también se desempeña como consejera general de Oath Keepers y Latinos for Trump, había recibido amenazas de muerte, dijo Rhodes.
«Era su conversación, así que me retiré», dijo Rhodes. «Yo estaba allí por seguridad sólo para Kellye SoRelle».
Rhodes dijo que parte de su motivación para hablar públicamente fue la reciente acusación de Michael Greene, un amigo que dirigía operaciones de seguridad para Oath Keepers en Washington, D.C., el 6 de enero. Greene, de 39 años, de Indianápolis, fue acusado de conspiración para obstruir un procedimiento oficial y otros tres cargos.
Según los resúmenes del FBI de esas reuniones, las entrevistas de Greene con agentes del FBI en mayo de 2021 contradicen muchas de las acusaciones contra los Oath Keepers.
“Él es un hombre totalmente inocente que estaba al frente de las operaciones ese día; un amigo mío, directo, excelente, increíble veterano del ejército y expolicía”, dijo Rhodes. “Un hombre totalmente inocente. Simplemente lo están persiguiendo”.
Greene tenía todo el derecho de estar en el Capitolio el 6 de enero porque los Oath Keepers estaban brindando seguridad para un mitin de “Stop the Steal” en el Área 8 del césped del Capitolio y para un evento de Latinos for Trump a dos cuadras de distancia. El fundador de Stop the Steal, Ali Alexander, tenía un permiso para la manifestación del Capitolio y para la construcción de un escenario.
“Se suponía que él (Greene) estaría en los terrenos del Capitolio. Se supone que debía estar allí en el Área 8, que está en los terrenos del Capitolio”, dijo Rhodes. “Ahí es donde se suponía que debía estar, para ir y proteger el lugar que Ali Alexander había reservado allí. Así que se suponía que debía estar en los terrenos del Capitolio. Y ahora lo acusan de allanamiento. Es simplemente ridículo”.
Seguridad de eventos, no conspiración
Rhodes dijo que la presencia de Oath Keepers en Washington D.C. ese día no fue diferente a lo que habían hecho en las manifestaciones a favor de Trump en noviembre y diciembre de 2020.
“Nuestros muchachos se vestían igual y hacían lo mismo”, dijo. “La diferencia es que dos de los líderes de nuestro equipo decidieron llevar a su gente dentro del Capitolio por su propia voluntad. Esa es la única diferencia. Su comportamiento y ambición fueron los mismos, proteger a las personas en los eventos de Washington D.C., lo cual hicieron”.
Los Oath Keepers se encargaron de la seguridad en la zona VIP de la Elipse donde Trump habló el 6 de enero. A continuación, se les encomendó la tarea de escoltar a Alexander y a los oradores, incluido Roger Stone, desde la Elipse hasta el Capitolio para un evento que estaba en el calendario mucho antes de que se reservara el discurso del presidente, dijo Rhodes.
Dos grupos de Oath Keepers entraron en el Capitolio.
Los fiscales afirman que estaban buscando a la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi. Rhodes dijo que no había planes para que nadie entrara al Capitolio. Uno de los grupos intervino entre un oficial de policía del Capitolio de EE.UU. armado y una multitud enojada, lo que calmó la situación, dijo.
Rhodes ridiculizó la acusación de los fiscales que decía que los Oath Keepers usaron una “formación apilada” militar para ascender los escalones del este del Capitolio. Los Oath Keepers han sido mostrados en video caminando con las manos sobre los hombros de los demás en una fila.
«Esa formación subiendo los escalones no es una formación militar. Yo era un hombre de infantería, infantería aerotransportada», dijo Rhodes. «Esa no es una formación militar. Es una técnica de PSD (personal de seguridad) para atravesar una multitud».
Los Oath Keepers han utilizado la técnica en otros lugares concurridos para mover a sus protegidos a través de masas de personas, dijo, incluido un evento en Atlanta en 2020.
«Utilizan el término de ‘apilamiento militar’. No, es un detalle de PSD. No atraviesas una multitud así si estás en el ejército».
Los preparativos eran para Antifa, no para “atacar el Capitolio”
Los Oath Keepers sí tenían armas y municiones almacenadas en Virginia y tenían «Fuerzas de Reacción Rápida» (QRF) en espera. Los fiscales afirman que las QRF eran para atacar el Capitolio. Rhodes dijo que los Oath Keepers en las QRF estaban disponibles para extraer a otros Oath Keepers o protectores de Washington si había un gran ataque de Antifa.
Las armas estaban allí solo si Trump invocaba la Ley de Insurrección y convocaba milicias para defender la Casa Blanca, dijo Rhodes. Antifa había amenazado con asaltar la Casa Blanca y expulsar a Trump por la fuerza, dijo.
“Tendríamos veteranos de combate de Oath Keeper bien entrenados con sus armas fuera de D.C. pero listos en caso de que el presidente invoque la Ley de Insurrección y nos llame como milicia, lo cual es completamente legal”, dijo Rhodes.
Acuerdos de culpabilidad
Los tres Oath Keepers que aceptaron acuerdos de culpabilidad y están cooperando con los fiscales fueron coaccionados con amenazas de largas penas de prisión, dijo.
Una carta enviada a los acusados y a sus abogados en mayo por los fiscales Kathryn Rakoczy y Justin Sher decía que, si los acusados de Oath Keepers son condenados en el juicio, podrían enfrentar cadena perpetua según las pautas de sentencia relacionadas con el terrorismo. The Epoch Times obtuvo una copia de la carta. La carta también fijó la fecha límite para aceptar ofertas de acuerdos de culpabilidad.
El destacado abogado defensor y profesor emérito de derecho de Harvard, Alan Dershowitz, dijo que “es absurdo” el intento de vincular la conspiración sediciosa con las pautas de sentencia por traición.
Rhodes dijo que, en al menos uno de los tres acuerdos de culpabilidad, el acusado les había dicho a los miembros de su familia que estaba aterrorizado por la perspectiva de la vida en prisión. El cargo de conspiración sediciosa incluye una pena máxima de prisión de 20 años.
«Atemorizaron a estos tipos y los coaccionaron para que se declararan culpables por algo que no hicieron», dijo Rhodes. «No hay [improperio] de conspiración. ¿Entró en el Capitolio? Sí, como un imbécil, entró en el Capitolio. Pero no hubo conspiración».
Rhodes dijo que el Comité Selecto está haciendo casi imposible que cualquiera de los Oath Keepers tenga un juicio justo. Recientemente, el juez de distrito, Amit Mehta, rechazó una moción de los acusados de Oath Keepers para trasladar sus juicios de D.C. a Virginia.
“La única forma en que podemos tener alguna posibilidad de un juicio justo en este país es si estamos fuera de D.C.”, dijo Rhodes. “Creo que es una conclusión inevitable.
«Un jurado de D.C. va a votar según las líneas políticas», dijo. «Entramos allí, tenemos cuernos, colas de demonio, ya, los ‘malvados Oath Keepers’. Han sido condicionados durante 13 años en los medios de comunicación de izquierda para odiarnos. Y estos son todos demócratas dentro de la circunvalación”.
Abiertamente antirracistas
Rhodes dijo que le gustaría abordar lo que llamó la calumnia difamatoria a los Oath Keepers por parte del presidente del Comité Selecto, el representante Bennie Thompson (D-Miss.), quien dijo que el grupo era de “supremacistas blancos”. Rhodes dijo que las reglas de los Oath Keepers prohíben cualquier discriminación racial y que no tolera tales actitudes en el grupo.
El 6 de enero de 2021, el vicepresidente de los Oath Keepers era un oficial de policía negro, dijo. Greene, el exoficial de policía que dirigió la seguridad de los Oath Keepers en D.C. el 6 de enero, también es negro.
“Somos abiertamente antirracistas y ellos tienen que saberlo. Nos han difamado a propósito”, dijo Rhodes. “Entonces, desde ese momento, ha habido una campaña implacable de difamación, caracterización errónea de Oath Keepers e, incluso, demonización”.
Rhodes dijo que cree que el verdadero objetivo del Comité Selecto es acusar al expresidente Trump por los hechos del 6 de enero. El comité y el Departamento de Justicia trabajarán juntos en ese objetivo, dijo.
“Trabajan de la mano como dos dedos del mismo puño de hierro”, dijo.
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