Un senador estadounidense exigió respuestas a las autoridades de Estados Unidos sobre las indemnizaciones que se conceden a las personas que resultaron lesionadas por las vacunas contra COVID-19.
El senador Ron Johnson (R-Wis.), miembro de mayor rango del Subcomité Permanente de Investigaciones del Senado, pidió detalles clave sobre el plan de indemnizaciones de Estados Unidos, incluida la cantidad que solicitó cada persona que ha sido indemnizada.
El gobierno recientemente pagó a tres personas que resultaron lesionadas por las vacunas, siendo la primera vez que se efectuaban pagos por las vacunas contra COVID. El pago más alto fue de solo 2019 dólares.
Johnson también preguntó si el gobierno ha publicitado el Programa de Compensación de Lesiones por Contramedidas (CICP), la única vía para la compensación federal y si los funcionarios esperan un aumento de las reclamaciones a la luz de cuántos informes de lesiones se han registrado en el Sistema de Notificación de Eventos Adversos a las Vacunas. Además cuestionó sobre cuánto dinero pueden recibir las personas lesionadas en virtud del programa.
El senador republicano esbozó la información solicitada en una carta dirigida a Xavier Becerra, secretario del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS), y a Carole Johnson, administradora de la Administración de Recursos y Servicios de Salud (HRSA).
La HHS y HRSA no respondieron a las solicitudes de comentarios.
«Aunque el gobierno parece estar proporcionando una compensación muy limitada a las personas que han presentado reclamaciones por lesiones causadas por las vacunas contra COVID-19, el proceso por el cual el HHS evalúa estas reclamaciones o incluso anuncia la existencia de este programa de compensación sigue siendo opaco», dijo Johnson a The Epoch Times en una declaración enviada por correo electrónico.
«El HHS debe al pueblo estadounidense una explicación completa de su administración del programa de compensación para las personas que han sufrido lesiones por la vacuna contra COVID-19», añadió el senador.
Una oficina dentro del HHS y HRSA administra el Programa de Compensación de Lesiones por Contramedidas (CICP). El CICP cubre las vacunas contra COVID-19 porque la administración Trump a principios de la pandemia COVID-19 hizo una declaración en virtud de la Ley de Preparación para Emergencias y Preparación Pública que protege a los fabricantes y otros, como los administradores de vacunas, de la responsabilidad. La administración Biden amplió la declaración.
Todas las personas que sufran o crean haber sufrido lesiones por una vacuna contra COVID-19 u otra contramedida pueden solicitar al Programa de Compensación de Lesiones por Contramedidas una indemnización por gastos médicos no reembolsados y pérdida de ingresos laborales. Las personas cuyos familiares hayan fallecido a causa de una lesión pueden solicitar prestaciones para supervivientes.
Según la Administración de Recursos y Servicios de Salud, una persona debe demostrar una «conexión causal» entre una vacuna y una lesión grave o fallecimiento. La conexión debe estar respaldada por «evidencias convincentes, fiables, válidas, médicas y científicas».
Hasta el 1 de abril se habían presentado 11,425 solicitudes sobre COVID-19, muchas de ellas por presuntas lesiones causadas por las vacunas. Solo 22 fueron consideradas con derecho a indemnización, y hasta hace poco no se había concedido ninguna. Otras 684 fueron denegadas.
Mientras que en un programa similar, el Programa Nacional de Indemnización por Lesiones Causadas por Vacunas, son los jueces quienes deciden sobre los casos de lesiones, en el Programa de Compensación de Lesiones por Contramedidas (CICP) son los administradores de la Administración Recursos y Servicios de Salud (HRSA) quienes deciden sobre las solicitudes.
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