Frank McCourt, antiguo propietario de Los Ángeles Dodgers entre 2004 y 2012, anunció que está organizando una oferta para comprar la popular plataforma de redes sociales TikTok.
La empresa matriz ByteDance, con sede en China, se enfrenta a una posible prohibición en Estados Unidos si no logra vender el sitio web durante el próximo año después de que el presidente Joe Biden firmara una legislación que obliga a la empresa a vender la plataforma o ser prohibida en Estados Unidos. La entidad tendrá hasta enero de 2025 para localizar un comprador, aunque los responsables de la compañía afirman que no tienen intención de vender.
El Sr. McCourt está haciendo planes de todos modos.
El miércoles confirmó que está organizando una adquisición a través del Proyecto Liberty, una iniciativa para establecer una nueva Internet descentralizada de código abierto. Trabaja con el banquero de inversiones Guggenheim Securities y el bufete de abogados Kirkland & Ellis. Además, el ejecutivo multimillonario planea consultar con una amplia gama de voces, incluidos académicos, líderes comunitarios, padres y tecnólogos.
Si tiene éxito, McCourt pretende migrar la plataforma a un nuevo «protocolo digital de código abierto».
«Los cimientos de nuestra infraestructura digital están rotos y es hora de arreglarlos», dijo McCourt en un comunicado de prensa. “Podemos y debemos hacer más para salvaguardar la salud y el bienestar de nuestros niños, familias, democracia y sociedad. Vemos esta posible adquisición como una oportunidad increíble para catalizar una opción diferente al modelo tecnológico que ha colonizado Internet”.
La búsqueda corporativa ha atraído a varias personas conocidas, como Tim Berners-Lee, inventor de la World Wide Web, y Jonathan Haidt, un renombrado psicólogo social y autor del bestseller del New York Times “The Anxious Generation” (La generación ansiosa).
“Esta propuesta tiene mi apoyo. La red que inventé fue para brindar poder y valor a las personas, algo que no tienen en este momento. Los usuarios deberían tener la capacidad de controlar sus propios datos, de compartirlos con otras personas y organizaciones según lo deseen”, dijo Berners-Lee en un comunicado. «Un TikTok que utilice protocolos de Internet abiertos, como Solid, adoptará los valores críticos de privacidad, soberanía de datos y salud mental del usuario».
Según Haidt, la relación de la sociedad con la tecnología se encuentra en «un punto de inflexión» y la nueva visión y las soluciones de McCourt para TikTok son «necesarias para avanzar en la era digital».
«Las redes sociales no van a desaparecer, pero están evolucionando, y McCourt quiere que evolucionen de maneras que sean mucho menos dañinas para los niños y adolescentes de lo que lo son hoy», añadió.
Otros esfuerzos para comprar TikTok
Desde que se aprobó una legislación bipartidista en Washington y fue firmada por el presidente Biden, ha habido voces conocidas en Wall Street que han revelado sus planes para intentar hacerse con la plataforma de vídeo.
El exsecretario del Tesoro, Steven Mnuchin, durante la administración Trump anunció en CNBC que está formando un grupo para comprar la aplicación.
«Es un gran negocio y voy a formar un grupo para comprar TikTok», dijo Mnuchin, que dirige Liberty Strategic Capital, al programa «Squawk Box» de la red de noticias empresariales en marzo. “Esto debería ser propiedad de empresas estadounidenses. Es imposible que los chinos permitan que una empresa estadounidense posea algo como esto en China”.
Kevin O’Leary, presidente de O’Leary Ventures y presentador de la popular serie «Shark Tank», también confirmó a CNBC en marzo que está creando un sindicato para una posible adquisición de TikTok.
«Es la red de entretenimiento y negocios más grande de Estados Unidos tal como está hoy, por lo que es de gran interés y gran valor», afirmó en el programa «Street Signs Asia». Sería “el acuerdo más complejo jamás realizado en las redes sociales y tengo que crear un nuevo algoritmo. Es un trato muy interesante y me gusta”.
Pase lo que pase, una adquisición final requeriría la bendición del presidente de Estados Unidos por motivos de implicaciones para la seguridad nacional.
Además, incluso si TikTok fuera comprada por una entidad estadounidense, la aplicación podría ser bastante diferente de lo que los usuarios han estado acostumbrados después de todos estos años. Las regulaciones de exportación chinas determinarían si el algoritmo, que le permitió a TikTok dominar la industria de las redes sociales, podría transferirse a otra parte.
No buscan venderlo
La empresa matriz de TikTok confirmó que no tiene intención de vender la aplicación.
Como resultado, el asunto se está llevando a los tribunales.
ByteDance y TikTok demandaron al gobierno de EE.UU. en el Tribunal de Apelaciones del Circuito del Distrito de Columbia el 7 de mayo en un intento de bloquear la venta forzosa de la aplicación por parte del presidente Biden. La demanda sostiene que la ley viola la Constitución de Estados Unidos, incluidas violaciones de la Primera Enmienda.
«Por primera vez en la historia, el Congreso ha promulgado una ley que somete una única plataforma de discurso con nombre propio a una prohibición permanente a nivel nacional», dijeron las empresas en la demanda, añadiendo que la medida está «silenciando a los 170 millones de estadounidenses que utilizan la plataforma para comunicarse en formas que no se pueden replicar en ningún otro lugar”.
En un caso separado, el 14 de mayo un grupo de creadores de TikTok presentó una demanda ante un tribunal federal de EE.UU. intentando bloquear la misma ley.
Las personas dicen que la aplicación ha tenido «un efecto profundo en la vida estadounidense».
«Aunque provienen de diferentes lugares, profesiones, estilos de vida y tendencias políticas, están unidos en su opinión de que TikTok les proporciona un medio único e irremplazable para expresarse y formar una comunidad», dijo la compañía en la demanda.
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