El aumento del escrutinio oficial del régimen chino a las empresas extranjeras que operan en el país, puede ser un movimiento de represalia contra las entidades extranjeras por las acusaciones de espionaje chino en el extranjero, según el exalto funcionario de inteligencia y autor, Nicholas Eftimiades.
El 26 de abril, el régimen comunista aprobó su ley antiespionaje recientemente revisada, que entrará en vigor el 1 de julio.
La revisión ha ampliado la definición de espionaje, haciéndola más amplia y vaga, lo que aumentó la gama de información y recursos que Beijing considera relevantes para la seguridad nacional.
Eftimiades dijo que, con este cambio legislativo, el gobernante Partido Comunista Chino (PCCh) envió un mensaje escalofriante a las empresas extranjeras en China.
Señaló una redada en marzo de la oficina de Beijing de Mintz Group, una firma de diligencia debida con sede en Nueva York. Según los informes, cinco empleados de Mintz, todos ciudadanos chinos, fueron detenidos bajo sospecha de participar en operaciones comerciales ilegales, y el régimen confirmó esos cargos.
Según un informe del Wall Street Journal, un ejecutivo de Mintz dijo que la compañía no tenía idea de quién estaba deteniendo a sus empleados, cuándo podrían ser liberados o por qué se llevó a cabo la redada.
Debido a los arrestos, Mintz cerró su única oficina en China continental. El cierre de la empresa es un revés para la comunidad empresarial global de China, que depende de ella para realizar investigaciones corporativas internacionales confiables como parte de contrataciones, transacciones y litigios en China.
Eftimiades también señaló el arresto de un ejecutivo en la oficina en Beijing de Astellas Pharmaceuticals de Japón, en abril, por presunto espionaje.
“Han arrestado a empresarios japoneses; han acusado a Estados Unidos de espiar. Se convirtieron en víctimas de muchas maneras”, dijo Eftimiades a “China in Focus” en NTD, el medio de comunicación asociado de The Epoch Times.
“Creo que esta es su versión de prepararse para responder o tomar represalias a todas las acusaciones de espionaje chino a nivel mundial”, dijo.
Con estos actos, dijo, el PCCh envía el mensaje: “Ya no vamos a ser víctimas. Vamos a demostrar que podemos tomar represalias contra los extranjeros y las empresas extranjeras aquí en China”.
Creciente tensión geopolítica
Como autor del libro: “Chinese Espionage Operations and Tactics” (Operaciones y tácticas de espionaje chino), Eftimiades señaló que Beijing ha intensificado sus acciones coercitivas al apuntar a empresas extranjeras a pesar de su compromiso con una mayor apertura y deseo de atraer más inversión extranjera.
El primer ministro chino, Li Qiang, reiteró la nueva política de “reforma y apertura” del PCCh en el reciente Foro de Boao.
“Pase lo que pase en el mundo, siempre nos adheriremos a la reforma y la apertura”, afirmó Li en su discurso de apertura el 30 de marzo en la reunión anual de los principales líderes de Asia.
Li también afirmó que se introducirán nuevas medidas para ampliar el acceso, optimizar el entorno empresarial y garantizar la implementación de proyectos para que todos los países puedan compartir el «dividendo» del desarrollo de China.
Sin embargo, Eftimiades atribuyó el cambio de actitud del régimen a la creciente tensión geopolítica entre China y otras potencias, incluido Estados Unidos.
“Así que creo que ese es el factor clave aquí, a medida que aumenta la tensión geopolítica, las empresas extranjeras tendrán menos entusiasmo por operar en China”, dijo.
“No hemos tenido la tensión geopolítica que hemos tenido ahora, en los últimos años, cuando Estados Unidos empieza a responder a los actos que China ha estado haciendo durante algún tiempo», añadió.
El reciente repunte de las acciones coercitivas contra empresas extranjeras también manifiesta cómo el líder chino Xi Jinping avanza en su consolidación del poder político, según el experto.
La medida conduce a un aumento de las empresas extranjeras y la retirada de inversiones de China.
“Xi Jinping está solidificando su poder político. Ya lo ha hecho. Pero está buscando controlar más a la sociedad china. Y como sabes, aprietas el puño, la gente se te escapa entre los dedos”, dijo.
“Y entonces las empresas están saliendo, la gente está saliendo. Creo que ves una gran parte del movimiento de dinero tratando de salir de China, no por las élites. Todas estas cosas son una función del poder de consolidación de Xi Jinping”, agregó.
Alex Wu contribuyó a este artículo.
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