La China comunista está utilizando puertos de ultramar para extender su influencia militar y, potencialmente, recopilar inteligencia de forma encubierta sobre Estados Unidos y sus aliados, según expertos.
El Partido Comunista Chino (PCCh), que gobierna China como un estado de un solo partido, está aprovechando las instalaciones de doble uso en todo el mundo para satisfacer sus necesidades comerciales y militares, según Isaac Kardon, investigador principal de Estudios sobre China en la Fundación Carnegie para la Paz Internacional.
“Las observaciones más significativas de esta capacidad de uso dual existente surgen de la red de casi 100 puertos marítimos propiedad de empresas de la RPC en jurisdicciones extranjeras u operados por ellas”, dijo Kardon, utilizando un acrónimo del nombre oficial de la China comunista: República Popular China.
«Los buques de guerra [chinos] han hecho escala en más de un tercio de estas instalaciones, utilizando la red de infraestructuras centradas en el comercio de China con un alcance y una intensidad crecientes para cumplir una misión cada vez más global».
Los comentarios de Kardon se entregaron como parte de una declaración (pdf) a la Comisión de Revisión Económica y de Seguridad de Estados Unidos y China (USCC), que celebró una audiencia sobre el tema de la diplomacia militar china el 26 de enero.
Advirtió que la red portuaria global del PCCh, que incluye algunas de las terminales de envío más grandes del mundo, podría usarse para recopilar inteligencia de forma encubierta sobre las fuerzas estadounidenses y aliadas, así como sobre barcos civiles.
“La red portuaria china también ofrece una plataforma lista para la recopilación de inteligencia”, dijo Kardon.
“En el curso normal de las operaciones en una terminal portuaria, los operadores portuarios recopilarán y procesarán enormes volúmenes de información confidencial sobre los buques y sus diversas necesidades de combustible y suministros, rutas y destinos, cargas, personal y otros detalles destacados”.
“Estos datos son potencialmente valiosos para fines de inteligencia militar, especialmente dada la relativa facilidad con la que se pueden tomar las mismas observaciones de los buques militares que hacen escala en puertos comerciales”.
Es una práctica normal que las armadas realicen este tipo de escalas cuando están fuera de sus aguas territoriales, dijo Kardon, pero las flotas navales del PCCh eran únicas en el sentido de que lo hacían utilizando una extensa red de instalaciones de propiedad y gestión china en lugar de depender de puertos extranjeros.
Kardon señaló que el control del PCCh a los puertos de ultramar también le daba al régimen la capacidad de controlar eficazmente el comercio internacional y denegar el uso de sus instalaciones para afectar negativamente a adversarios o competidores.
También dijo que el régimen estaba buscando múltiples vías de proyección de poder marítimo y continuaría aumentando su control a los puertos comerciales mediante la construcción de nuevas bases militares en todo el mundo.
«La utilización militar de las infraestructuras extranjeras operadas por la RPC también se desarrollará con mayor intensidad a medida que maduren sus proyectos clave y relaciones de seguridad», dijo Kardon.
“Deberíamos esperar que continúen sus esfuerzos para establecer bases militares formales en el extranjero, y probablemente tengan éxito en algunos casos”.
El PCCh busca influencia y poder a través de su presencia militar global
La capacidad del PCCh para dar forma al entorno de seguridad internacional e interferir en los intereses de seguridad de EE.UU. está alcanzando un nuevo pico, según Phillip Saunders, director del Centro para el Estudio de Asuntos Militares Chinos en la Universidad de Defensa Nacional, quien también brindó testimonio (pdf) a la USCC.
De hecho, el ala militar del PCCh, el Ejército Popular de Liberación (EPL), ahora tiene una presencia global que ejerce influencia dondequiera que pasen los ojos del régimen.
El régimen se ha comprometido a usar el EPL para asegurar victorias diplomáticas y políticas, dijo Saunders, y ahora controla a más de 130 oficiales militares en todo el mundo.
«Los escritos militares chinos describen la diplomacia militar como un componente de los esfuerzos diplomáticos más amplios de China y enfatizan que la diplomacia militar ‘siempre debe tomar como objetivo los objetivos diplomáticos generales del país y siempre tomar la dirección correcta'», dijo Saunders.
Kristen Gunness, investigadora senior de políticas de la Corporación RAND, dijo (pdf) que el PCCh está utilizando al EPL para dar forma al orden internacional buscando contrarrestar las narrativas anticomunistas, obtener ventajas políticas y degradar la capacidad de Estados Unidos para coordinar y crear alianzas.
Esa tendencia, dijo, solo se acelerará a medida que el régimen encuentre más socios dispuestos a otorgarle tierras para sus instalaciones militares en el extranjero.
“Los compromisos y la presencia ampliada del EPL en el extranjero crean más oportunidades para la recopilación de inteligencia, particularmente en áreas donde las fuerzas del EPL y de EE.UU. operan en proximidad o donde las fuerzas chinas pueden observar las actividades de EE.UU., sus socios y aliados”, dijo Gunness.
“La diplomacia militar también respaldará los esfuerzos de China para establecer más bases en el extranjero, lo que luego podría proporcionar una plataforma para ampliar el alcance operativo del EPL en el sur de Asia, el Océano Índico y Oriente Medio, por ejemplo, dependiendo de dónde China elija establecer bases adicionales y qué capacidades el país anfitrión acepta albergar en su suelo”.
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