NUEVA YORK—El expresidente Donald Trump saludó a sus partidarios el 3 de abril antes de entrar a la Torre Trump de Nueva York, donde tenía planeado pasar la noche previa de comparecer a la lectura de cargos de una acusación del gran jurado fijada para el 4 de abril.
Trump entró en el edificio por una puerta lateral de la calle 56, lejos de la multitud de periodistas y decenas de seguidores que le esperaban frente a los accesos principales. Tres helicópteros negros sobrevolaron el edificio antes de su llegada al rascacielos de 58 plantas, donde su comitiva se detuvo poco después de las 16.00 hora local.
Stephanie Lu, una estadounidense de origen chino, formaba parte de un pequeño grupo de partidarios de Trump que ondeaban banderas de Estados Unidos y coreaban «amamos a Trump» cuando el expresidente pasó acompañado de su hijo Eric Trump. Lu dijo sentirse emocionada por la oportunidad de expresar su apoyo.
«Al menos nos vio ondeando las banderas», dijo Lu a The Epoch Times. «Nosotros le queremos mucho, porque está luchando por nuestro país».
Trump se enfrenta a cargos relacionados con el pago de un dinero por silencio a la actriz de cine para adultos, Stormy Daniels, durante la campaña presidencial de 2016. Se espera que el fiscal del distrito de Manhattan, Alvin Bragg, presente los cargos alegando que Trump clasificó ilegalmente el pago, en violación de las leyes federales de financiación de campañas. Trump negó cualquier irregularidad en el asunto.
La seguridad se intensificó cerca de la Torre Trump y de al Corte Suprema de Manhattan antes de la comparecencia del 4 de abril. La policía levantó barreras metálicas y bloqueó el acceso a una parte de la corte en el bajo Manhattan, donde se celebrarán los procedimientos judiciales.
A lo largo de la tarde, los conductores de varias furgonetas negras que pasaban por el lugar hicieron sonar las bocinas de sus vehículos en señal de apoyo a Trump, provocando los vítores de la multitud.
En un momento dado, el conductor de un camión gritó obscenidades dirigidas al expresidente, lo que provocó que los simpatizantes respondieran gritando «nosotros amamos a Trump».
Paul Ingrassia, miembro del Club de Jóvenes Republicanos de Nueva York que ha estado mostrando su apoyo frente a la Torre Trump, tachó las acusaciones contra Trump de «falsas» y dijo que espera que su presencia pueda ayudar a demostrar que «Donald Trump todavía tiene partidarios, hasta en la parte más liberal del país».
Haciéndose eco de algunos analistas políticos, Ingrassia cree que la acusación solo va a dar a Trump un impulso en la carrera presidencial de 2024, señalando que el expresidente fue capaz de recaudar 4 millones de dólares en 24 horas después de que se informara la imputación de cargos.
El alcalde de Nueva York, el demócrata Eric Adams, ha instado a las personas que tengan previsto viajar a la ciudad para protestar a que ejerzan el control y «se comporten lo mejor posible».
«Aunque puede haber algunos agitadores pensando en venir a nuestra ciudad mañana, nuestro mensaje es claro y sencillo: contrólense», dijo Adams el 3 de abril. «Nueva York es nuestro hogar, no un patio de recreo para vuestra ira fuera de lugar».
Karen Lichtbraun, profesora de preescolar en Nueva York, de 62 años, rechazó la advertencia de Adams, señalando el aumento de la tasa de criminalidad en la ciudad.
«¿Por qué no les dice a las personas que están disparando en las calles de nuestra ciudad para que se comporten? Nosotros no somos violentos, nosotros protestamos pacíficamente», dijo Lichtbraun, otra de las simpatizantes frente a la residencia de Trump en Manhattan, en declaraciones a The Epoch Times. «La ciudad está ardiendo en llamas, ¿y él les dice a los partidarios de MAGA que se comporten?».
Lichtbraun, que es judía, dijo que apreciaba especialmente la política pro israelí de Trump durante su presidencia.
Mientras tanto, Robert Hoatson se encontraba entre un grupo de contra manifestantes que esperaban cerca de la Torre Trump.
Hoatson llevaba carteles en los que se leía «Enciérrenlo» y «Tiren la llave», una referencia al cántico «Enciérrenla» que Trump ayudó a popularizar durante la campaña presidencial de 2016, centrada en el manejo de información clasificada por parte de su rival demócrata, Hillary Clinton.
«Nosotros tenemos que neutralizarlo hasta el punto de que no pueda participar nunca más en ninguna determinación de la política estadounidense», dijo Hoatson.
La representante Marjorie Taylor Greene (R-Ga.) está lista para organizar un mitin a favor de Trump en un parque cerca del juzgado de Manhattan en la mañana del 4 de abril. Ingrassia, quien asistirá, cree que tendrá una gran participación.
“Estoy seguro de que vendrán muchos otros partidarios no solo del estado de Nueva York, sino de todo el país”, dijo Ingrassia. “Ellos van a manifestarse en un rally a favor del presidente Trump y a demostrar que su base es fuerte y que lo apoyamos”.
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