La española Silveria Martín Díaz, que el pasado mes de agosto se convirtió, a sus 114 años, en la mujer más longeva de España y la novena persona de mayor edad del mundo, falleció en la residencia de mayores donde residía.
La muerte tuvo lugar ayer miércoles en la localidad de Villanueva de la Vera, en el este de España, informó la web Extremeños Centenarios, que dio a conocer la noticia de su deceso.
Silveria Martín había nacido el 20 de junio de 1910 en un pequeño pueblo de Extremadura que en 1963 desapareció bajo uno de los pantanos más importantes de España, en una época en la que, en pleno desarrollismo franquista, se construyeron en el país decenas de ellos.
Y allí se crió, se casó con José «El Retratista» -como le conocían sus vecinos-, nacieron sus cinco hijos y vivieron hasta que cumplió los 53 años, hasta que llegó la orden de desalojo del pueblo y la familia tuvo rehacer su vida en otro lugar, en uno de las múltiples localidades construidas en esa época para acoger a las personas que había que realojar.
Como miles de familias campesinas y obreras de la España de los años 60 del siglo pasado, Silveria y los suyos acabaron emigrando a otro país de Europa, en su caso a Francia.
Ella siempre se dedicó a su familia y a su hogar, «le encantaba cocinar, hacer punto, ganchillo, no podía estar parada en casa, ha sido y es una mujer muy activa», señalaba en su 112 cumpleaños su hija, Julia Arroyo Martín.
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