El FBI respondió a las afirmaciones de que sus agentes estaban armados y estaban autorizados a usar la fuerza letal durante un registro de la propiedad Mar-a-Lago del expresidente Donald Trump en 2022.
La oficina de aplicación de la ley dijo a los medios que el FBI siguió el protocolo estándar, incluida «una declaración de política estándar que limita el uso de la fuerza letal».
«El FBI siguió el protocolo estándar en esta búsqueda como lo hacemos para todas las órdenes de registro, que incluye una declaración de política estándar que limita el uso de la fuerza mortal», dijo el FBI en su comunicado. «Nadie ordenó que se tomaran medidas adicionales y no hubo ninguna desviación de la norma en este asunto», añadió el buró.
The Epoch Times se ha puesto en contacto con el FBI en múltiples ocasiones para pedirle comentarios esta semana.
Esto se produjo después de que el expresidente Trump escribiera el martes en su cuenta de Truth Social que el Departamento de Justicia (DOJ, por sus siglas en inglés) «autorizó al FBI a usar la fuerza mortal (letal)», en respuesta a un documento judicial recientemente desvelado que revelaba que los agentes del FBI y del DOJ estaban para que el Servicio Secreto estadounidense opusiera resistencia durante la redada en Mar-a-Lago.
Si los agentes del Servicio Secreto «ofrecían resistencia o interferían con la línea de tiempo o los accesos del FBI», entonces los funcionarios del FBI se pondrían en contacto con ciertas personas —sus nombres y cargos fueron tachados— indicaban los documentos.
Los documentos incluían una declaración sobre el uso de la fuerza letal, que citaba la política del gobierno al afirmar que «los agentes de la ley del Departamento de Justicia pueden usar la fuerza letal solo cuando sea necesario, es decir, cuando el oficial crea razonablemente que el sujeto de dicha fuerza representa un peligro inminente de muerte o lesiones físicas graves para el oficial o para otra persona».
Además del presidente Trump, la representante Marjorie Taylor Greene (R-Ga.) afirmó en las redes sociales que el FBI y el Departamento de Justicia estaban «planeando asesinar al presidente Trump y dieron autorización».
Sin embargo, algunos señalaron que la política del FBI es usar la fuerza letal incluso para la ejecución de una orden de registro.
«Cada orden de operaciones del FBI contiene un recordatorio de la política de fuerza letal del FBI», escribió en X el ex director adjunto de contrainteligencia del FBI Frank Figliuzzi. «Incluso para una orden de registro. La fuerza letal siempre está autorizada si se presenta la amenaza requerida».
Pero, según los abogados del expresidente, no había razón para que los agentes llevaran armas a Mar-a-Lago.
«No había amenazas ni riesgos para la seguridad de los agentes derivados de sus alegaciones relacionadas con la posesión de documentos en un lugar ya vigilado por el Servicio Secreto», dijeron los abogados en una presentación que se hizo pública esta semana.
Los abogados defensores escribieron en una nueva moción que el registro de Mar-a-Lago en agosto de 2022 fue ilegal y que la declaración jurada del FBI utilizada como base de la redada no era exacta. En el caso, el presidente Trump está acusado de retener ilegalmente registros clasificados después de abandonar la Casa Blanca y obstruir los esfuerzos de los funcionarios federales para recuperarlos; se ha declarado inocente de los cargos.
Pero los funcionarios de la oficina del abogado especial Jack Smith, que presentó el caso contra el ex comandante en jefe, dijeron en su propia presentación que los abogados del expresidente Trump están equivocados, defendiendo los métodos utilizados durante la investigación. La orden, argumentaron, se obtuvo después de que sus investigaciones obtuvieran imágenes de video de vigilancia que mostraban que hubo presuntos esfuerzos para ocultar los documentos clasificados en el corazón del caso.
«La orden estaba respaldada por una declaración jurada detallada que establecía una causa probable y no omitía ninguna información material. Y la orden proporcionó una amplia orientación a los agentes del FBI que llevaron a cabo el registro». Trump no identifica ninguna base plausible para suprimir los frutos de esa búsqueda», escribió el equipo del Sr. Smith.
A principios de este mes, la jueza de distrito Aileen Cannon aplazó indefinidamente la fecha del juicio sobre los documentos clasificados. No está claro cuándo comenzará el juicio del expresidente o si lo hará antes de las elecciones presidenciales de noviembre.
Con información de Zachary Stieber.
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