Fiscal de Maryland revela trágico alcance de presuntos abusos sexuales en arquidiócesis de Baltimore

Se aprovecharon de al menos 600 niños, según el informe

Por Masooma Haq
07 de abril de 2023 3:10 PM Actualizado: 07 de abril de 2023 3:10 PM

El fiscal general de Maryland, Anthony Brown, finalmente publicó un informe que detalla ocho décadas de supuestos abusos sexuales por parte de más de 150 sacerdotes católicos y otras personas asociadas con la Arquidiócesis de Baltimore. El clero actual o anterior, los seminaristas, los diáconos, los religiosos, los maestros y otros empleados de la Arquidiócesis se aprovecharon de al menos 600 niños, según el documento.

“Este Informe ilustra el fracaso sistémico y depravado de la Arquidiócesis para proteger a los más vulnerables —los niños a quienes se le encomendó mantener a salvo”, dijo Brown en un comunicado de prensa (pdf). “Este Informe arroja luz sobre esta abrumadora tragedia, y fue el coraje de los sobrevivientes lo que lo hizo posible”.

El cardenal Daniel DiNardo, presidente de la Asamblea General de la USCCB, se ve en un televisor hablando sobre la crisis de abuso sexual en la iglesia católica durante la Conferencia anual de obispos católicos de EE. UU. el 12 de noviembre de 2018 en Baltimore, Maryland. (Brendan Smialowski / AFP a través de Getty Images)

Publicado el 5 de abril, el informe del fiscal general revela no solo el inmenso alcance y la escala del abuso, sino también los esfuerzos de la Arquidiócesis para ocultar el abuso, que salió a la luz después de citarse cientos de miles de documentos que datan de la década de 1940.

El documento incluye material recopilado de las líneas directas establecidas para fines informativos, entrevistas con víctimas y testigos, medios de comunicación de código abierto, documentos proporcionados por la Arquidiócesis en respuesta a las citaciones del gran jurado y cartas informativas de la Arquidiócesis.

La Arquidiócesis de Baltimore abarca gran parte del estado de Maryland. Además de Baltimore, incluye los condados de Allegheny, Anne Arundel, Carroll, Frederick, Garrett, Harford, Howard y Washington.

“La asombrosa omnipresencia del abuso en sí mismo subraya la culpabilidad de la jerarquía de la Iglesia”, dice el informe (pdf). “La gran cantidad de abusadores y víctimas, la depravación de la conducta de los abusadores y la frecuencia con la que abusadores conocidos tuvieron la oportunidad de seguir abusando de los niños es asombroso”.

La Red de Sobrevivientes de Abusados ​​por Sacerdotes (SNAP) dijo que espera que el público lea el documento del fiscal general para comprender mejor cómo se perpetró el abuso y cómo se permitió que continuara durante tanto tiempo, y para alentar a otras víctimas a dar un paso adelante.

“Este informe se remonta a 80 años, por lo que esta es una buena imagen del abuso histórico. Pero lo que más nos preocupa son los abusos recientes y continuos, y esperamos que esta noticia anime a cualquiera que haya sido lastimado por el clero en Maryland a presentarse y obtener ayuda”, escribió la red SNAP en una declaración del 5 de abril.

SNAP dijo que el objetivo del informe debería ser proteger a los niños identificando y responsabilizando a «figuras poderosas» clave por apoyar a los abusadores.

El actual arzobispo de Baltimore, William Lori, se disculpó con las víctimas y sus familias y dijo que el abuso es “reprobable” y que las víctimas no serán ignoradas ni olvidadas.

“Los relatos detallados de abuso son impactantes y desgarradores. Es difícil para la mayoría imaginar que tales actos malvados podrían haber ocurrido realmente”, dijo Lori en una declaración escrita. “Para las víctimas-sobrevivientes de cualquier parte, ellos conocen la dura verdad: estos actos malvados ocurrieron”.

St. Edward Iglesia Católica Romana 15 de mayo de 2002 en Baltimore, Maryland (Alex Dorgan-Ross/Getty Images)

Lori agregó que los estándares para denunciar e investigar el abuso sexual han mejorado. “Habiendo pasado cuatro años investigando la Arquidiócesis, el exfiscal general, Brian Frosh, señaló que los cambios culturales, las políticas de protección infantil y las medidas de rendición de cuentas que la Arquidiócesis comenzó a implementar hace más de una generación han demostrado ser exitosas”.

“No se equivoquen, sin embargo: el sólido historial de protección y transparencia de hoy no excusa las fallas pasadas que han llevado al daño espiritual, psicológico y emocional duradero que han soportado las víctimas-sobrevivientes”, agregó el fiscal.

Hasta hace poco, “los funcionarios de la iglesia que recibieron denuncias de abuso no se comportaron mejor. Una y otra vez, los obispos y otros líderes de la iglesia mostraron empatía por los abusadores, lo que superó con creces cualquier compasión mostrada por los niños que sufrieron abusos”, afirma el informe.

El mes pasado, la legislatura de Maryland aprobó el Proyecto de Ley del Senado 686 (pdf), para poner fin al estatuto de limitaciones del estado sobre las demandas civiles relacionadas con el abuso. El gobernador Wes Moore dijo que apoya la nueva legislación, que permitirá que las víctimas cuyos abusadores aún estén vivos busquen justicia.

Actualmente, las víctimas de abuso sexual infantil en Maryland no pueden demandar después de cumplir 38 años. La medida, si se aprueba, eliminará el límite de edad y permitirá demandas retroactivas bajo ciertas circunstancias.

El informe del fiscal general se enfoca principalmente en los años desde la década de 1940 hasta 2002, y muestra que ciertas parroquias tenían múltiples abusadores. Por ejemplo, st. Mark Parish en Catonsville tenía once abusadores de niños que vivían y trabajaban allí desde 1964 hasta 2004, según el documento.

El informe también detalla cómo algunos clérigos no fueron procesados ​​después de ser atrapados o admitir haber abusado de los niños, sino que los líderes de la iglesia los trasladaron a otras parroquias o instalaciones. Muchos de esos clérigos finalmente se retiraron con el apoyo financiero de la Arquidiócesis.

Aunque las leyes federales y estatales sobre abuso sexual han mejorado a lo largo de los años, el proceso interno de la Arquidiócesis de Baltimore todavía tenía fallas, incluida una lista pública incompleta de abusadores e investigaciones realizadas por clérigos que no estaban capacitados como investigadores y no eran independientes de la iglesia, dice el documento.

El exfiscal general de Maryland, Brian Frosh, inició la investigación inicial del caso en 2018. En 2022, presentó una moción ante el Tribunal de Circuito de Baltimore para hacer público el informe. El documento no se publicó de inmediato porque incluía información obtenida de funcionarios de la iglesia mediante citaciones del gran jurado, que son confidenciales en Maryland.

El documento incluye un descargo de responsabilidad que establece que «las acusaciones descritas en este informe no constituyen hallazgos de culpabilidad».


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