Francia rozó este jueves los 18,000 muertos por el virus del PCCh, con 17,920 fallecimientos, 753 más que el día anterior, pero mantuvo la tendencia a la baja en el número de hospitalizados y de ingresados en unidades de cuidados intensivos (UCI).
Del total de muertes, 11,060 se dieron en hospitales, de ellas 417 en las últimas 24 horas, y 6860 en residencias de ancianos y centros de dependencia, aunque el Ejecutivo todavía no dispone de un censo concreto de esas dos últimas instituciones.
Aunque hay 31,305 personas que todavía siguen hospitalizadas, el saldo entre ingresos y altas se mantuvo por segundo día consecutivo a la baja, con 474 pacientes menos este jueves, al igual que en las UCI, con un balance negativo de 209 personas, hasta los 6248 pacientes.
Según el director general de Sanidad, Jérôme Salomon, el 67 % de los casos graves tenían problemas de salud previos al contagio.
Desde el principio de la epidemia en Francia el pasado 1 de marzo, se han confirmado 108,847 contagios, de ellos 2641 en el último día, pero las autoridades sanitarias francesas consideran que la circulación del virus se ha estabilizado, aunque a un «nivel elevado».
Entre esos casos hay un tercio de los integrantes del portaaviones Charles de Gaulle, el buque insignia de la armada francesa, que se encontraba de misión en el norte de Europa y el domingo regresó con dos semanas de antelación a la base naval de Toulon, en el sur del país.
El Ministerio de Defensa francés indicó anoche en un comunicado que de sus 1767 tripulantes 668 habían dado positivo por el virus del PCCh, mientras que todavía no se han recibido los resultados del 30 % de las pruebas.
Apoye nuestro periodismo independiente donando un «café» para el equipo.
A continuación
Documentos filtrados: China continúa ocultando nuevos casos en Wuhan
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.