El fundador de Project Veritas, James O’Keefe, respondió a un registro del FBI en su apartamento durante una entrevista el lunes, diciendo que los agentes lo esposaron y lo lanzaron contra una pared.
En sus primeras declaraciones públicas sobre el asunto, O’Keefe confirmó la redada del FBI en su casa del condado de Westchester, Nueva York, después de que los vecinos dijeran a los medios de comunicación durante el fin de semana que los agentes se presentaron en su puerta el sábado. Los agentes también registraron las casas de los asociados de Project Veritas un día antes, confirmó O’Keefe en un video publicado en el canal de YouTube de Vertias.
«Me desperté con una redada antes del amanecer», dijo O’Keefe al presentador de Fox News Sean Hannity. «Golpearon mi puerta, fui a mi puerta para abrir y había 10 agentes del FBI con un ariete, luces blancas cegadoras, me dieron la vuelta, me esposaron y me tiraron contra el pasillo. Estaba medio vestido delante de mis vecinos. Me confiscaron el teléfono. Registraron mi apartamento”.
La semana pasada, O’Keefe dijo que las casas de los asociados de Veritas fueron allanadas después de que el grupo supuestamente recibió el diario perdido de la hija del presidente Joe Biden, Ashley. Nunca se publicó, dijo.
Su teléfono tenía notas de reporteros de fuentes no relacionadas con el diario de Ashley Biden, así como información confidencial de donantes, dijo O’Keefe. Los agentes pasaron cerca de dos horas registrando su apartamento, y dos de sus teléfonos fueron confiscados.
«Esto es un ataque a la Primera Enmienda por parte del Departamento de Justicia», dijo. «He oído decir que ‘el proceso es el castigo’. No entendí realmente lo que eso significaba hasta este fin de semana. Y Sean, no le desearía esto a ningún periodista», continuó.
El abogado de O’Keefe, Paul Calli, que apareció junto al fundador de Project Veritas en la entrevista, dijo que Project Veritas pagó a los presuntos informantes del diario por «el derecho a publicar el material». El grupo, en cambio, lo entregó a las fuerzas policiales locales, añadió.
O’Keefe añadió entonces que los periodistas tienen que oponerse a la supuesta persecución del FBI a su grupo.
«Una fuente viene a nosotros con información, yo ni siquiera decidí publicarla. Si pueden hacerme esto a mí, si pueden hacerlo a este periodista y allanar mi casa y tomar mis notas de reportero, lo harán a cualquier periodista», señaló O’Keefe. «Se trata de algo muy fundamental en este país. No sé en qué dirección va este país. Pero los periodistas de todo el mundo tienen que levantarse porque aquí no hemos roto ninguna ley. Si pueden hacérmelo a mí, se lo harán a cualquiera».
En una declaración en YouTube el viernes, O’Keefe dijo que se le dijo en una acusación del gran jurado que no discutiera el registro del FBI, pero decidió hablar después de que los reporteros del New York Times se pusieran en contacto con los reporteros de Project Veritas para hacer comentarios una hora después de que se llevaran a cabo las redadas. A continuación, cuestionó cómo obtuvo el NY Times la información sobre los registros y de qué se trataba.
The Epoch Times se ha puesto en contacto con el FBI para obtener comentarios.
Durante el fin de semana, un portavoz del FBI confirmó que «una acción de aplicación de la ley autorizada por el tribunal» se llevó a cabo «en el marco de una investigación en curso» en respuesta a las preguntas sobre el registro de la casa de O’Keefe.
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