George Soros dijo que ni conoce al fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg, ni contribuyó a su campaña electoral, y el financista multimillonario respondió a una pregunta sobre qué pensaba sobre la etiqueta de «fiscal de distrito financiado por Soros» que sus críticos suelen ponerle a Bragg.
Soros le dijo a Semafor que no contribuyó con ningún dinero a la campaña electoral de Bragg y que no lo conoce, mientras respondía a una pregunta sobre sus opiniones sobre los partidarios del expresidente Donald Trump que vinculan a Soros con la imputación sin precedentes a Trump.
“Creo que algunos en la derecha preferirían centrarse en teorías de conspiración inverosímiles que en los graves cargos contra el expresidente», respondió Soros.
El financiero multimillonario ha contribuido significativamente al Color of Change PAC, que respaldó a Bragg en su campaña para fiscal de distrito de Manhattan en 2021 y que prometió más de USD 1 millón en una campaña de gastos independientes para apoyar a Bragg.
El portavoz de Soros, Michael Vachon, dijo a CNN recientemente que, mientras Soros y Democracy PAC—un PAC al que Soros ha donado dinero—contribuyeron conjuntamente con USD 4 millones al Color of Change PAC, Vachon insistió, no obstante, en que ninguno de esos fondos estuvo destinado a la campaña de Bragg y que “no ha habido contacto entre los dos”.
En sus declaraciones a Semafor, Soros citó un artículo de opinión que había escrito explicando por qué ha donado a «fiscales reformistas» y por qué no tiene «ninguna intención de detenerse».
“Los fondos que proporciono permiten que los candidatos sensatos con mentalidad reformista sean escuchados por el público. A juzgar por los resultados, a la gente le gusta lo que está escuchando”, escribió Soros.
Muchos, especialmente los de derecha, no estarían de acuerdo con que las inversiones de Soros en el activismo político sean música para sus oídos.
Algunos, como la Liga Antidifamación, han señalado que las críticas a Soros por respaldar causas políticas progresistas suele ser «refundida como forraje para teorías de conspiración exageradas» que se basan en «mitos antisemitas de larga data, particularmente la noción de que los judíos ricos y poderosos trabajan detrás de las escenas, conspirando para controlar los países y manipular los eventos globales».
Soros, fundador de Soros Fund Management y Open Society Foundations, es judío.
«Financiado por Soros»
La etiqueta de «financiado por Soros» se ha aplicado a Bragg durante algún tiempo, aunque parece haberse convertido en la descripción predeterminada para el hombre que muchos ven como dirigido por imperativos políticos en la búsqueda de cargos penales contra el expresidente.
Trump fue imputado el jueves luego de que un gran jurado compuesto por Bragg votara para imputar al expresidente.
“Aparentemente, el fiscal de distrito de Manhattan respaldado por Soros, Alvin Bragg, en realidad está imputando a mi padre”, dijo el hijo mayor del expresidente, Don Trump Jr., en una declaración en video. “Seamos claros, amigos. Esto es como a nivel [improperio] comunista. Esto es algo que haría que a Mao, Stalin, Pol Pot… los haría sonrojar”.
“Es tan flagrante, tan loco”, agregó, y sus comentarios reflejan el tipo de crítica que se ha formulado contra Bragg por su búsqueda de cargos penales contra el expresidente, es decir, que el caso tiene motivaciones políticas y equivale a una interferencia electoral.
Además, mientras corrían rumores de que Bragg se estaba preparando para hacer su movida, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, alegó que Bragg no solo estaba jugando a la política, sino que había «convertido en arma» a la oficina del fiscal de distrito en detrimento de la seguridad pública al centrarse en Trump mientras ignoraba los crimenes violentos.
“El fiscal de distrito de Manhattan es un fiscal financiado por Soros, por lo que él, al igual que otros fiscales financiados por Soros, convierten en arma su oficina para imponer una agenda política a la sociedad a expensas del estado de derecho y la seguridad pública”, dijo DeSantis el lunes.
“Si hay un fiscal que ignora los delitos que ocurren todos los días en su jurisdicción, y elige retroceder muchos, muchos años atrás para tratar de usar algo acerca de los pagos secretos de estrellas porno, ese es un ejemplo de perseguir una agenda política y convertir en arma la oficina”, dijo DeSantis. “Y creo que eso es fundamentalmente incorrecto”.
DeSantis alertó además que otros “fiscales financiados por Soros” podrían llevar a cabo “un enjuiciamiento politizado de alto perfil, y eso es malo”.
Si bien las reiteradas solicitudes de comentarios a la oficina de Bragg por parte de The Epoch Times no han recibido respuesta, el abogado general de la oficina de Bragg escribió el viernes una carta denunciando “acusaciones infundadas y provocativas de que nuestra investigación tiene motivaciones políticas”.
Leslie B. Dubeck, abogada general de la oficina de Bragg, escribió en una carta a los principales presidentes republicanos de la Cámara de Representantes que el intento de interferencia de los «el intento de los comités de interferir con una investigación penal estatal en curso—y ahora el procesamiento—es una incursión ilegal y sin precedentes en los intereses soberanos de Nueva York».
Los republicanos de la Cámara han exigido documentos y testimonios de Bragg sobre su caso contra Trump, acusando al fiscal de distrito de Manhattan de jugar a la política.
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