El gobernador de Pennsylvania, Tom Wolf, ha extendido la orden de quedarse en casa para todos los condados de la fase «roja» hasta el 4 de junio, según anunció su oficina el 7 de mayo.
Su oficina aclaró más tarde que antes de esa fecha, algunos de estos condados podrían salir de la clasificación «roja» si la situación mejora. En esta fase, los residentes tienen órdenes de quedarse en casa y se les ordena cerrar todos los negocios «no vitales».
«La extensión de esta noche de la orden original no impide que los condados pasen a la fase amarilla antes del 4 de junio», dijo la portavoz Lyndsay Kensinger en un correo electrónico, informó la WTAE. «La extensión de la orden general era necesaria porque expiraba esta noche».
With the April 1 statewide stay-at-home orders set to expire tonight at midnight, @GovernorTomWolf and @SecretaryLevine today extended the orders for all counties in red and signed new orders for the 24 counties moving to yellow at 12:01 a.m., May 8. https://t.co/98OWBd7iiz
— Office of the Governor (@GovernorsOffice) May 8, 2020
La orden de quedarse en casa de Pennsylvania se estableció inicialmente el 1 de abril y expiraba el 8 de mayo. La orden extendida seguirá siendo la misma que la orden original, según la oficina de Wolf.
El plan para reabrir
Según el plan de reapertura de Wolf para el estado, las regiones y los condados pasarán de la fase roja a la amarilla y luego, eventualmente, a la verde, bajo la cual se levantarán todas las restricciones de la pandemia, aparte de cualquier pauta de salud federal o estatal que permanezca en vigor.
Pero incluso bajo el amarillo, se mantendrá la prohibición de reuniones de más de 25 personas, los gimnasios, casinos, teatros y otros lugares de recreación, bienestar y entretenimiento bajo techo permanecerán cerrados. Los restaurantes y bares seguirán estando limitados a la comida para llevar o a la entrega, y los negocios deben seguir las pautas federales y estatales para el distanciamiento social y la limpieza.
El jueves, Wolf y la secretaria de Salud, Dra. Rachel Levine, también firmaron nuevas órdenes para 24 condados en las regiones norte-central y noroeste de Pensilvania para pasar a la fase «amarilla» del plan de reapertura del estado a partir del viernes, comentó la oficina del gobernador en un comunicado de prensa.
Tomorrow, 24 counties will move from the red phase to the yellow phase of reopening.
Find out more about how we’re making reopening decisions: https://t.co/sa8krZcWo8. pic.twitter.com/Ma7jcsZ1l5
— Governor Tom Wolf (@GovernorTomWolf) May 7, 2020
«Mañana, 24 condados pasarán de la fase roja a la fase amarilla de reapertura», anunció Wolf en Twitter el jueves.
«La orden de la fase amarilla se aplica a estos 24 condados: Bradford, Cameron, Centre, Clarion, Clearfield, Clinton, Crawford, Elk, Erie, Forest, Jefferson, Lawrence, Lycoming, McKean, Mercer, Montour, Northumberland, Potter, Snyder, Sullivan, Tioga, Union, Venango y Warren», dice el comunicado.
Wolf señaló a finales de abril que quería empezar a suavizar algunas restricciones de la pandemia el 8 de mayo en las zonas de Pensilvania que fueron ligeramente afectadas por el virus del PCCh (Partido Comunista Chino), comúnmente conocido como el nuevo coronavirus.
De acuerdo con la administración de Wolf, los negocios en los condados en fase amarilla podrán reabrir a partir del viernes por la mañana, dado que siguen las pautas de seguridad (pdf) emitidas para las instalaciones, el personal y los clientes.
Las escuelas permanecerán cerradas por el resto del año académico.
Important information regarding COVID-19 deaths. pic.twitter.com/s5TtKjqTed
— Speaker Mike Turzai (@RepTurzai) May 7, 2020
Hasta el 5 de mayo, Pensilvania reportó un total de 52,915 casos del virus del PCCh, con 3416 muertes, según los datos del gobierno.
Casi el 70 % de las muertes por el virus del PCCh, en el estado ocurrieron en hogares de ancianos, casas de cuidado personal y residencias de vida asistida, señaló el presidente de la Cámara de Representantes de Pensilvania, Mike Turzai, en una carta el miércoles a los miembros de la cámara, citando datos del secretario de salud.
La edad promedio de los que murieron hasta el 6 de mayo era de 79 años, expresó Turzai, mientras que el 61 % de los que murieron tenían hipertensión, el 54 % tenía enfermedades del oído, el 37 % diabetes y el 30 % enfermedad pulmonar crónica.
Associated Press contribuyó a este informe.
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