El gobernador de Tennessee, Bill Lee, pospuso la ejecución de un asesino por motivos del virus del PCCh (Partido Comunista Chino).
Citando la pandemia de COVID-19, Lee emitió el viernes un aplazamiento temporal para Harold Wayne Nichols, un preso que espera su ejecución en el corredor de la muerte.
Nichols violó y mató a Karen Pulley en 1988. Se había fijado su muerte para el 4 de agosto.
«Le concedo a Harold Wayne Nichols un aplazamiento temporal de la ejecución hasta el 31 de diciembre de 2020, debido a los desafíos y alteraciones causadas por la pandemia de COVID-19», escribió Lee en Twitter.
El equipo legal de Nichols había solicitado al Tribunal Supremo de Tennessee una suspensión de la ejecución debido al virus del PCCh, comúnmente conocido como nuevo coronavirus, alegando que «la pandemia requiere numerosas restricciones que frenan las actividades del equipo legal del Sr. Nichols».
El 4 de junio, el tribunal negó unánimemente la solicitud.
La orden de Lee no establece una razón específica para que la ejecución deba retrasarse como resultado de la pandemia.
La agencia CNN y el personal de Epoch Times contribuyeron a este informe
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