El gobernador de Texas, Greg Abbott, aclaró este martes que sí hay una crisis actualmente en la frontera de Estados Unidos y México, y dijo que el «dramático cambio» se debió a las acciones del presidente Biden.
El republicano dio una conferencia el martes por la tarde en el Valle del Río Grande, en donde habló sobre la actual crisis de inmigración y culpó a las acciones de Biden por tal situación.
«Permítanme comenzar dejando muy claro un punto: Sí hay una crisis en la frontera de Texas en este momento con la abrumadora cantidad de personas que están cruzando la frontera», dijo Abbott a la prensa el 9 de marzo.
«Esta crisis es el resultado de las políticas de fronteras abiertas del presidente Biden, la cual invita a la inmigración ilegal y está creando una crisis humanitaria en Texas en este momento que empeorará cada día más», continuó el gobernador.
Desde que asumió el cargo, Biden ha dado marcha atrás a varias medidas de seguridad fronteriza de la era Trump que tenían como objetivo frenar el flujo de inmigración ilegal en la frontera sur y aumentar la seguridad pública de Estados Unidos.
Abbott dijo que con la eliminación de la política de «Permanecer en México», hubo un «cambio dramático» de las personas que empezaron a cruzar la frontera. Asimismo, criticó que el gobierno del demócrata estaba al tanto de dicha información proporcionada por la Patrulla Fronteriza.
«Ellos no están para nada preparados para lo que está sucediendo ahora en la frontera y estarán aún menos preparados para lo que sucederá en los próximos meses», añadió.
El funcionario dijo que este año se arrestaron a 800 criminales violentos que ya habían sido deportados previamente pero intentaron nuevamente cruzar la frontera de forma ilegal–entre ellos, 78 eran delincuentes sexuales y 62 eran miembros de pandillas como la MS-13.
Abbott señaló que la estrategia de los cárteles es abrumar a los agentes de la Patrulla Fronteriza, y aprovechar ese periodo para traer a los «elementos más peligrosos a través de la frontera», como criminales violentos o personas de los países que representan un peligro para EE. UU., como Irán, Iraq, China, entre otros.
El gobernador de Texas también instó a Biden a que destine fondos a los programas de ICE, y a que administren vacunas para los agentes de la CBP, quienes corren más riesgo de contagiarse con el virus del PCCh (Partido Comunista Chino).
«La administración de Biden debería enviar vacunas a Texas para todos los hombres y mujeres de la Patrulla Fronteriza esta semana (…) Cualquier cosa menos que eso es el epítome de la inhumanidad», dijo.
Este sábado, el gobernador activó la «Operación Lone Star» que desplegará medios de seguridad fronteriza aéreos, terrestres, marinos y tácticos para impedir que las organizaciones criminales mexicanas introduzcan drogas y personas a Texas.
La operación se pondrá en marcha en colaboración con el Departamento de Seguridad Pública del estado.
Las acciones de Abbott se producen a medida que sigue aumentando la cifra de cruces ilegales en la frontera sur desde octubre del año pasado. Entre octubre de 2020 y enero de 2021 hubo 296,259 cruces, lo cual supone un aumento del 79.6 por ciento con respecto al mismo periodo de 2019 y 2020, según datos de la CBP. Asimismo, el aumento de menores no acompañados en las últimas semanas ha hecho que la administración de Biden abra más albergues de acogida para gestionar la afluencia.
Según las cifras anunciadas por Abbott, la Patrulla Fronteriza ha realizado 108,000 detenciones en la frontera en el sector del Valle del Río Grande, en comparación con las 90,000 detenciones registradas en todo el 2020 en dicho sector.
Con información de Janita Kan.
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