El gobernador de Virginia Ralph Northam propuso un paquete educativo de USD 1.2 mil millones, que incluye una inversión financiada con impuestos de USD 145 millones para hacer que la universidad comunitaria sea gratuita para los estudiantes de hogares de bajos y medianos ingresos.
El nuevo programa, denominado «G3», el cual significa «Adquirir habilidades, conseguir un trabajo, devolver» (“Get Skilled, Get a Job, Give Back”) será una beca de último dólar, lo cual significa que el estado pagará solo el saldo de la matrícula restante después de que el estudiante use todos las formas elegibles de ayuda financiera.
El plan proporciona fondos para matrícula, cuotas y libros. Para los estudiantes con los niveles de ingresos más bajos, también brinda apoyo para gastos que incluyen cuidado de niños, transporte y alimentos. Los solicitantes deben ser elegibles para la matrícula dentro del estado y con ingresos inferiores o iguales al 400 por ciento del nivel federal de pobreza o USD 103.000 para una familia de cuatro.
Para seguir siendo elegible para el programa G3, los estudiantes participantes deberán completar dos horas de servicio comunitario por cada hora de crédito en la que se hayan inscrito, y mantener un promedio mínimo de 2.0.
«Todos merecen la oportunidad de obtener una buena educación y un buen trabajo, sin importar quién sea o cuánto dinero tenga», dijo Northam, un demócrata, en un comunicado. «Esta es una inversión en equidad y en nuestra economía: al ayudar a los virginianos a obtener las habilidades que necesitan, estamos construyendo una fuerza laboral de clase mundial al tiempo que garantizamos que todos los virginianos puedan mantenerse a sí mismos, a sus familias y a sus comunidades».
Se dice que el programa G3 apunta a las industrias específicas de Virginia que necesitan trabajadores calificados, que incluyen atención médica, seguridad pública, educación de la primera infancia y tecnología de la información.
Avalada por varios candidatos presidenciales demócratas, la idea de la matrícula gratuita en las universidades públicas está ganando popularidad. El exvicepresidente Joe Biden solicitó 4 años de universidad gratuita en 2015, aunque no ha hablado de eso en los debates recientes. Elizabeth Warren propone un plan educativo de USD 1,25 billones para eliminar no solo la matrícula en las universidades públicas sino también la deuda estudiantil de millones de estadounidenses. Otro precursor demócrata, Bernie Sanders, promueve un plan más ambicioso de USD 1,6 trillones para borrar la matrícula universitaria y toda la deuda estudiantil.
Sin embargo, la efectividad de los programas universitarios gratuitos todavía está en debate. Un estudio de 2018 realizado por el Instituto de Política de Educación Superior analizó dos programas de universidades gratuitas del estado, Tennessee y Nueva York, e informó que la mayoría de los fondos no se destinaron a los estudiantes de bajos ingresos a quienes los programas fueron diseñados para beneficiar. Otro estudio realizado por el Banco de la Reserva Federal de Nueva York también encontró que las escuelas terminarían aumentando su matrícula en 63 centavos por cada aumento de dólares en matrículas financiadas por el estado.
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