El gobierno de Estados Unidos está «cada vez más cerca» de identificar al individuo que supuestamente filtró documentos militares altamente clasificados en Internet, dijo el presidente Joe Biden a los periodistas durante su visita a Dublín el 13 de abril.
Cuando se le pidió que ofreciera información actualizada sobre la búsqueda, Biden dijo: «Ahora mismo no puedo. Como saben, la comunidad de inteligencia y el Departamento de Justicia están llevando a cabo una investigación exhaustiva y se están acercando, [pero] no tengo una respuesta para usted».
En cuanto a su grado de preocupación por el asunto, el presidente añadió: «No me preocupa la filtración. Me preocupa que haya ocurrido, pero no hay nada contemporáneo que yo sepa que tenga grandes consecuencias».
Los comentarios de Biden se produjeron a raíz de un informe publicado por The Washington Post en el que se afirma que el autor de la filtración era un «joven y carismático entusiasta de las armas» que decía trabajar en una base militar y que había compartido el material clasificado con un grupo de chat de Discord.
Citando a uno de los aproximadamente dos docenas de miembros de ese grupo de chat, el medio de prensa dijo que el filtrador fundó el grupo privado, apodado «Thug Shaker Central», en 2020, y se había identificado solo como «OG».
Sin embargo, la fuente que habló con The Washington Post afirmó conocer la identidad y la ubicación del filtrador, y añadió que no revelaría ninguna de las dos a las fuerzas del orden.
Los documentos filtrados contenían supuesta información altamente clasificada de defensa e inteligencia sobre la guerra de Ucrania y otros asuntos, los que se publicaron en múltiples sitios web, entre ellos Twitter, Telegram, 4chan y otros, según una revisión de los materiales realizada por The Epoch Times. The Epoch Times no puede confirmar la autenticidad de los documentos.
Comentarios de la Casa Blanca
El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, dijo el 10 de abril que los funcionarios creen que algunos de los documentos fueron alterados.
«Nosotros sabemos que algunos de ellos han sido manipulados», dijo en una rueda de prensa. «Yo no voy a hablar de la validez de todos los documentos —aquellos que (…) no parecen inmediatamente haber sido manipulados. Todavía estamos trabajando en la validez de todos los documentos que sabemos que están ahí fuera».
Kirby añadió que el Departamento de Defensa todavía estaba evaluando el asunto y las implicaciones para la seguridad nacional de lo que se había filtrado.
El 13 de abril, la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, señaló que la evaluación seguía en curso e instó a las empresas de redes sociales a impedir la difusión de los documentos en sus plataformas.
«Nosotros creemos que las empresas de redes sociales tienen la responsabilidad ante sus usuarios y ante el país de gestionar la infraestructura del sector privado que crean y que ahora gestionan», dijo Jean-Pierre. «Por tanto, creemos que tienen una responsabilidad».
«Nosotros normalmente instamos a las empresas a que eviten facilitar la circulación de material (…) perjudicial para la seguridad pública y la seguridad nacional», añadió la secretaria de prensa. «Pero no voy a referirme aquí a otras conversaciones ni a los cambios que se vayan a producir al respecto, desde luego no voy a hablar de eso aquí».
Con la contribución de Victoria Kelly-Clark y Jack Phillips.
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