WASHINGTON—Poderoso testimonio del «Phoenix 11», un grupo de sobrevivientes de abuso sexual infantil, dio inicio al anuncio de una nueva colaboración entre gobiernos y las compañías tecnológicas para detener el abuso sexual infantil en línea.
«El año pasado, todos dimos un paso audaz para superar los temores sobre nosotros mismos, para unirnos y convertirnos en una fuerza para el cambio», dijo el grupo en un video presentado en el Departamento de Justicia (DOJ, por sus siglas en inglés) el 5 de marzo.
«Somos sobrevivientes de tortura sexual, violación infantil, sesiones de fotos eróticas, pijamadas de pedófilos, espectáculos sexuales en escuelas primarias, transmisión de sadomasoquismo y deseos sexuales retorcidos, cuyas imágenes digitales fueron traficadas por todo el mundo para satisfacer las interminables necesidades de una comunidad pervertida y malvada que disfruta de nuestro dolor».
En los esfuerzos por prevenir el abuso sexual infantil en línea, Estados Unidos, junto con Reino Unido, Canadá, Australia y Nueva Zelanda, han creado nuevos principios voluntarios que las empresas tecnológicas están promoviendo.
Facebook, Twitter, Google, Microsoft, Roblox y Snapchat han respaldado los principios, los cuales les piden que eviten que se ponga a disposición material de abuso sexual infantil en sus plataformas, y que tomen medidas contra la publicidad, la prostitución infantil y la transmisión en vivo de abusos sexuales relacionados con niños.
Los principios no llegan a pedir a las empresas de tecnología que aborden el tema de la encriptación de extremo a extremo, lo cual es una lucha constante sobre dónde está la línea divisoria entre la protección de la privacidad y la protección de los delincuentes. El Departamento de Justicia ha dicho que la encriptación de extremo a extremo sin una puerta trasera para la aplicación de la ley obstaculiza las investigaciones criminales. Las compañías tecnológicas dicen que una puerta trasera presenta un riesgo de seguridad para los usuarios.
«Los supuestos intereses de privacidad de los criminales no deben superar la privacidad y seguridad de nuestros hijos», dijo el Fiscal General William Barr el 5 de marzo. «La tecnología ha facilitado la producción, encubrimiento y distribución de materiales de abuso sexual infantil».
El Departamento de Justicia ha visto un aumento del 160 por ciento en casos de producción de videos e imágenes de niños que fueron explotados y abusados sexualmente en la última década.
La CyberTipline del Centro Nacional de Niños Desaparecidos y Explotados (NCMEC, por sus siglas en inglés) recibió 1.1 millones de denuncias de explotación sexual infantil en línea en 2014.
En 2019, recibió 16.9 millones de denuncias. Barr reconoció a Facebook por enviar el 94 por ciento de esas denuncias (casi 16 millones).
Los informes de tipline incluían 69.1 millones de imágenes, videos y otros archivos relacionados con la explotación sexual infantil, según el NCMEC.
«Las imágenes de abuso sexual pueden ser preservadas en línea por períodos de tiempo mucho más largos y difundidas más ampliamente», dijo Barr. «Las víctimas no solo sufren el daño inicial del abuso, sino que son victimizadas una y otra vez cuando esas imágenes son recirculadas. Por ejemplo, las imágenes de abuso sexual de una víctima en particular se han encontrado en casi 21,500 investigaciones distintas en los Estados Unidos en los últimos 20 años».
El Ministro de Seguridad del Reino Unido, James Brokenshire, dijo que el problema es vasto y que la nueva coalición con la industria tecnológica es un hito importante para abordarlo.
«Los delincuentes sexuales de niños explotan los avances tecnológicos para infligir miseria, compartiendo materiales viles y consejos sobre cómo atacar a los niños. Se unen para aislar, atrapar y manipular a nuestros jóvenes, causar dolor y sufrimiento que puede durar toda la vida», dijo.
«La escala de la amenaza global es horrorosa y sabemos que está empeorando. Más de 3.5 millones de cuentas están registradas en los sitios web oscuros más depravados del mundo».
Brokenshire dijo que la encriptación sigue siendo el «elefante en la habitación», y señaló el Facebook Messenger. El año pasado, dijo, Facebook presentó alrededor de 12 millones de denuncias de explotación sexual infantil en su aplicación Messenger.
Facebook ahora planea encriptar la aplicación, muy parecido a lo que hizo con su aplicación de mensajería WhatsApp.
«La encriptación de extremo a extremo asegura que solo tú y la persona con la que te comunicas puedan leer lo que se envía, y que nadie se interponga, ni siquiera WhatsApp», afirma el sitio de WhatsApp de Facebook.
Facebook añadió la encriptación de extremo a extremo a su servicio de WhatsApp en abril de 2016, pero en agosto del mismo año, dijo en su política de privacidad que incluiría la «colaboración limitada de datos» con Facebook.
En 2019, el CEO de Facebook, Mark Zuckerberg, dijo que la compañía se está moviendo hacia la encriptación.
«En el último año, he hablado con disidentes que me han dicho que la encriptación es la razón por la que están libres, o incluso vivos», dijo. «Cuando miles de millones de personas utilizan un servicio para conectarse, algunos de ellos van a utilizarlo para cosas verdaderamente terribles como la explotación infantil, el terrorismo y la extorsión. Tenemos la responsabilidad de trabajar con las fuerzas del orden y ayudar a prevenirlas siempre que podamos».
Pero Brokenshire dijo que encriptar Facebook Messenger significaría que Facebook estaría ciego a los 12 millones de casos de explotación sexual infantil.
«Tengo que decir que poner a nuestros niños en riesgo, por lo que creo son ganancias marginales de privacidad, es algo que realmente me cuesta creer que cualquiera de nosotros quiere», dijo Brokenshire.
En el Congreso, un grupo de senadores bipartidistas presentó un proyecto de ley el 5 de marzo que crearía incentivos para que las empresas «ganen» protección de responsabilidad civil por violaciones de leyes relacionadas con material en línea sobre abuso sexual infantil.
La Ley de eliminación de la negligencia abusiva y desenfrenada de las tecnologías interactivas (Ley EARN IT) enmendaría la Sección 230 de la Ley de Comunicaciones y Decencia.
También permitiría a las personas demandar a las empresas de tecnología que no cumplan con las mejores prácticas o establezcan prácticas razonables para prevenir la explotación infantil en línea
«Los avances tecnológicos han permitido que la explotación de los niños en línea sea mucho, mucho peor en los últimos años», dijo la senadora Dianne Feinstein (D-Calif). «Las empresas deben hacer más para combatir este creciente problema en sus plataformas en línea».
Los 11 principios
Principio 1: Las empresas procuran impedir que el material conocido de abuso sexual de menores se ponga a disposición de los usuarios o sea accesible en sus plataformas y servicios, adoptan las medidas apropiadas con arreglo a sus condiciones de servicio e informan a las autoridades competentes.
Principio 2: Las empresas procuran identificar y combatir la difusión de nuevo material de abuso sexual infantil a través de sus plataformas y servicios, tomar las medidas apropiadas según sus términos de servicio, e informar a las autoridades competentes.
Principio 3: Las empresas tratan de identificar y combatir las actividades preparatorias de explotación y abuso sexual infantil (como la captación de niños para el abuso sexual en línea), tomar las medidas apropiadas según sus términos de servicio, e informar a las autoridades apropiadas.
Principio 4: Las compañías buscan identificar y combatir la publicidad, captación, prostitución o proxenetismo de un niño para explotación o abuso sexual, o la organización para hacerlo, tomar las medidas apropiadas bajo sus términos de servicio, e informar a las autoridades apropiadas.
Principio 5: Las empresas procuran identificar y prevenir la explotación y el abuso sexual infantil facilitados o ampliados por transmisiones en vivo, adoptar las medidas apropiadas de conformidad con sus condiciones de servicio e informar a las autoridades competentes.
Principio 6: Las compañías buscan prevenir que en los resultados de las búsquedas salgan a la luz la explotación y el abuso sexual infantil, y buscan prevenir las sugerencias automáticas de tal actividad y material.
Principio 7: Las empresas procuran adoptar medidas de seguridad reforzadas con el fin de proteger a los niños, en particular de sus compañeros o de adultos que tratan de realizar actividades sexuales perjudiciales con niños; esas medidas podrían incluir la consideración de si los usuarios son niños.
Principio 8: Las empresas procuran adoptar medidas apropiadas, incluida la posibilidad de informar, sobre el material que, a primera vista, puede no ser ilegal, pero que, con el contexto y la confirmación apropiados, puede estar relacionado con la explotación y el abuso sexual infantil.
Principio 9: Las empresas procuran adoptar un enfoque mundial bien fundamentado para combatir la explotación y abuso sexual infantil en línea y tener en cuenta la evolución del panorama de las amenazas como parte de sus procesos de diseño y desarrollo.
Principio 10: Las empresas apoyan las oportunidades de compartir conocimientos especializados pertinentes, prácticas útiles, datos y herramientas cuando sea apropiado y factible.
Principio 11: Las empresas procuran publicar o compartir regularmente datos y percepciones significativas sobre sus esfuerzos para combatir la explotación y el abuso sexual infantil.
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