Numerosos ejecutivos de grandes empresas como Starbucks, Microsoft, Mastercard o Walmart firmaron este lunes una carta conjunta para pedir a los legisladores del Congreso de Estados Unidos que extiendan el programa de protección de nóminas para ayudar a los pequeños negocios del país a superar las dificultades económicas ocasionadas por la pandemia del virus del PCCh, comúnmente conocido como nuevo coronavirus, y los confinamientos.
La carta está encabezada por el primer ejecutivo de Starbucks, Howard Schultz, y va dirigida la presidente de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, y a los líderes demócratas y republicanos del Senado y el Congreso con el objetivo de “asegurar una recuperación exitosa de los pequeños negocios estadounidenses”, que representan un 44 % del Producto Interno Bruto (PIB) del país.
«Las pequeñas empresas son demasiado importantes para la fortaleza económica de nuestro país como para dejarlas fracasar. Desde minoristas y restaurantes hasta consultoras y fabricantes, los propietarios de pequeñas empresas se enfrentan a un futuro de potencial ruina financiera que hará que la recesión económica de la nación dure más de lo que debería», apunta la carta.
A juicio de los directivos, si bien la primera ronda del programa de protección de nóminas supuso un alivio a corto plazo para muchos, ese «salvavidas» está llegando a su fin, por lo que pidieron alargar esta medida.
«Los sectores más afectados necesitarán un apoyo mucho más significativo y sostenido en el tiempo. Aunque nuestro país está en proceso de reapertura, difícilmente será un regreso a la normalidad. Es posible que se requiera que muchos negocios cierren nuevamente. La mayoría de las pequeñas empresas no tienen suficiente efectivo en el banco para soportar más meses de ingresos reducidos y menor clientela», apuntaron.
Para sobrevivir hasta que una vacuna esté ampliamente disponible, agregaron los ejecutivos en la misiva, «millones de pequeñas empresas requerirán el apoyo a largo plazo del Gobierno federal».
Los «CEOs» declararon que no estaban haciendo una llamada para dar «ayudas sin fondo», sino para demostrar cómo en un momento «decisivo» el capitalismo puede, a su juicio, «beneficiar a todos los estadounidenses, en particular a los empresarios que se han visto obligados a cerrar o reducir la capacidad de sus negocios sin tener la culpa».
Negocios que se evaporan en la Gran Manzana
Desde que se desató la pandemia del COVID-19 en Estados Unidos, muchos negocios se han visto abocados al cierre, incapaces de encontrar un equilibrio entre los parones forzosos, las pérdidas en las cuentas y los altos alquileres que pagan en ciudades como Nueva York.
En total, cerca de unas 2800 empresas en la Gran Manzana han cerrado permanentemente desde el 1 de marzo, según datos de la plataforma Yelp, un número más alto que en cualquier otra gran ciudad estadounidense.
Aproximadamente la mitad de los cierres se han producido en el corazón de la ciudad, en Manhattan, donde el turismo ha desaparecido por completo, se han vaciado los edificios de oficinas y donde los residentes más adinerados se han ido a segundas residencias lejos de la urbe.
Se calcula que una vez remita la pandemia, aproximadamente un tercio de las 240,000 pequeñas empresas de la ciudad no volverán a abrir nunca, lo que supondrá la pérdida de unos 520,000 empleos, según un informe de la Asociación para la Ciudad de Nueva York citado por The New York Times.
Apoye nuestro periodismo independiente donando un «café» para el equipo.
Le puede interesar
Documental: El encubrimiento del siglo – La verdad que el PCCh ocultó al mundo
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.