Grupo verde que asesora a Joe Biden tiene vínculos con China

El Consejo de Defensa de los Recursos Naturales aconseja a la Administración en asuntos climáticos al mismo tiempo que ayuda y elogia a la República Popular China.

Por Rafael Marrero
07 de octubre de 2022 2:39 PM Actualizado: 07 de octubre de 2022 2:43 PM

Si las políticas medioambientales de Joe Biden son contraproducentes en sí mismas, más lo son todavía al saber que uno de los llamados grupos verdes que apoya al mandatario, el Consejo de Defensa de los Recursos Naturales (NRDC, por sus siglas en inglés), tiene nexos con la República Popular China (RPC) y su régimen comunista.

A sabiendas de esto, uno no puede menos que preguntarse hasta qué punto ha influido el NRDC en la formulación de los planes ecologistas de la presente Administración y hacia qué camino nos podría conducir un vínculo tan desacertado como polémico en medio de la batalla que libramos por independizarnos del régimen autocrático de Beijing.

NRDC: los orígenes del grupo

Fundado en 1970 y ubicado en Nueva York, el NRDC es una organización sin fines de lucro cuyos activos totales suman 450 millones de dólares. Según reza en su página web, nrdc.org, su misión es trabajar «para salvaguardar la tierra: su gente, sus plantas y animales, y los sistemas naturales de los que depende toda la vida».

Actualmente, cuenta con más de tres millones de miembros y activistas, 700 científicos, abogados y defensores de políticas en todo el mundo para garantizar los derechos de todas las personas al aire, el agua y la naturaleza. Su radio de acción no solo abarca a los Estados Unidos (EE. UU.), sino también a lo que denomina “países seleccionados”.

«El NRDC trabaja sobre el terreno para frenar las emisiones de gases de efecto invernadero en Asia, Europa, América Latina y América del Norte, y aboga por cambios en las políticas internacionales. Ayudamos a asegurar un nuevo acuerdo climático internacional en París y trabajamos de manera efectiva para promover políticas de energía limpia en China, India y América Latina», puntualiza su portal oficial.

Como los desafíos ambientales no conocen fronteras, el grupo asegura que ha «trabajado internacionalmente durante décadas en países seleccionados, así como en foros globales». O sea, básicamente, se ha unido a «socios de todo el mundo para proteger y mejorar juntos el hogar que compartimos».

China: el socio ambientalista

Desde hace alrededor de 30 años, el Consejo de Defensa de los Recursos Naturales influye y participa en asuntos climáticos de China. Su única oficina fuera de EE. UU. está convenientemente ubicada en Beijing, y registrada en la Oficina de Seguridad Pública Municipal de la capital china bajo la supervisión de la Administración Nacional de Silvicultura y Pastizales del gigante asiático.

De acuerdo con un reporte de Fox News Digital, «las declaraciones de impuestos más recientes del NRDC mostraron que la oficina china cuenta con 35 empleados y tiene un presupuesto anual de 4,2 millones de dólares. [Sin embargo], en comparación con el trabajo internacional en América del Norte, América del Sur, el sur de Asia y el Medio Oriente, [solamente] tiene 11 empleados y un presupuesto anual de 1,1 millones».

Si eso le resulta llamativo, prepárese para lo siguiente: «Numerosos miembros clave de la oficina de NRDC en Beijing trabajaron para el Gobierno comunista de China o abandonaron el grupo para ocupar un puesto en el Gobierno», según el mismo servicio noticioso.

Para evidenciar estos inequívocos lazos con el Partido Comunista Chino (PCCh), Fox News Digital puso como ejemplos los siguientes casos:

Jieqing Zhang, director del programa del NRDC en China, fue subdirector general del Departamento de Cooperación Internacional del Ministerio de Ecología y Medio Ambiente chino.

Kai Duan, gerente sénior de proyectos del NRDC, trabajó para una subagencia china dentro del Ministerio de Ecología y Medio Ambiente.

JingJing Qian, actual asesor estratégico sénior del programa de China, laboró en el Ministerio de Ciencia y Tecnología del país asiático.

Yinying Chen, asesora principal del grupo, trabajó en universidades, agencias gubernamentales y empresas estatales chinas.

Hui Huang, gerente del proyecto de energía y clima del NRDC en China, se desempeñó en China Datang Corporation, empresa estatal de generación de electricidad.

Zhiming Pan, director del proyecto de la ciudad del NRDC, fue funcionario del Ministerio de Vivienda y Desarrollo Urbano-Rural de China.

Sobre este particular, la directora gerente del programa internacional del NRDC, Amanda Maxwell, dijo a Fox News Digital en un comunicado que «en China, como en otros lugares, el grupo opera de acuerdo con la ley. [Asimismo], nunca ha recibido financiación directa o indirectamente de organizaciones afiliadas al PCCh».

Desde luego, eso habría que verlo. Según remarcó la misma fuente, el Servicio de Rentas Internas (IRS, por sus siglas en inglés) generalmente no requiere que las organizaciones sin fines de lucro divulguen públicamente la información de sus donantes.

En lo que respecta al registro del grupo en China, Maxwell apuntó que «las organizaciones sin ánimo de lucro, como el NRDC, deben registrarse en China con un patrocinador del Gobierno para coordinar las actividades en el país», explicando así por qué las actividades del grupo son supervisadas por la Administración Nacional de Silvicultura y Pastizales, el equivalente chino del Departamento de Estado de EE. UU.

Paralelamente, destacó que «China, como país más poblado del mundo, juega un papel importante en la búsqueda de soluciones sostenibles», argumentando, de paso, que de eso se trata su trabajo.

NRDC: el consejero climático de Biden

Según correos electrónicos internos del Departamento de Estado obtenidos por el grupo de vigilancia Protect the Public’s Trust y compartidos con Fox News Digital, el Consejo de Defensa de los Recursos Naturales mantiene una estrecha relación de trabajo con la Administración de Joe Biden.

Por ejemplo, la expresidenta del NRDC, Gina McCarthy, fue asesora climática del inquilino de la Casa Blanca desde enero de 2021 hasta septiembre de 2022; el actual presidente, Manish Bapna, ha asistido, al menos, a dos reuniones en la Casa Blanca y el grupo en sí se comunica regularmente con la oficina del Enviado Presidencial Especial para el Clima, John Kerry, para hablar de asuntos políticos.

Manish Bapna, presidente del Consejo de Defensa de los Recursos Naturales, habla en el escenario durante la «Noche de la Comedia» de NRDC, en honor a Anna Scott Carter, presentada en asociación con Warner Bros. Discovery el 20 de septiembre de 2022 en la ciudad de Nueva York. (Dimitrios Kambouris/Getty Images para NRDC)

A la legua se ve que hay una sólida influencia del NRDC sobre las políticas ambientalistas de Biden. Y así, mientras ambas partes concuerdan acerca de lo que supuestamente es “mejor” para nuestro país en ese aspecto, no solo se conocen los nexos del grupo con el PCCh, sino también la alta estima que le tiene a la RPC.

«China se ha comprometido seriamente a convertir sus ciudades en lugares más saludables para vivir y, actualmente, lidera el mundo en instalación de energía renovable y penetración de vehículos eléctricos», puntualiza el grupo verde en su portal oficial.

Yéndonos un poco más atrás, en 2016, la expresidenta del NRDC, Rhea Suh, señaló que «China está haciendo mucho para abordar sus problemas internos y ayudar a combatir el cambio climático»; en 2018, entretanto, el director de programas del grupo, Andrew Wetzler, sostuvo que «el trabajo más emocionante en conservación se está llevando a cabo en China».

Otro que se ha deshecho en elogios es el asesor principal del NRDC, Alvin Lin, quien, en 2018, puntualizó que los líderes chinos «están enviando una señal clara de que el cambio de los combustibles fósiles a la energía limpia se está acelerando y que la ‘nueva energía’ debería ser la base del futuro sistema energético de China».

El año pasado, otros expertos del grupo afirmaron que el acuerdo del gigante asiático con un tratado de las Naciones Unidas, fue una importante victoria climática global que debería dar un impulso de confianza a conversaciones más amplias sobre temas proambientales.

Particularmente, he de decir que tanto elogio hacia las supuestas victorias de la RPC en torno al clima me empalaga, máxime cuando se sabe que el NRDC nunca ha criticado al régimen chino, a pesar de que no es tan pronaturaleza como lo pintan.

Según el artículo de Fox News Digital, las emisiones de dióxido de carbono de la nación asiática representan alrededor del 27 % de las expulsiones globales totales, porcentaje que casi triplica el total registrado en EE. UU. Entonces, ¿de qué se trata todo esto?

El doble rasero del NRDC

Por lo dicho anteriormente, se deduce que este grupo verde tiene un doble rasero en lo que respecta a su postura a favor del medio ambiente. Tanto es así que, de acuerdo con el propio servicio noticioso, «los comunicados de prensa, las declaraciones y las publicaciones del NRDC sobre la política climática de China, representan un marcado contraste con la retórica y las acciones del grupo en EE. UU».

Para abundar más en este particular, la fuente señaló que este grupo «ha presentado docenas de desafíos legales que impulsan medidas ecológicas de extrema izquierda». Es decir, «a través de sus esfuerzos legales, se ha opuesto a los programas nacionales de perforación de petróleo y gas, de las plantas de carbón, del oleoducto Keystone XL y de los proyectos de minerales críticos».

Es que, en su propio sitio oficial en Internet, el NRDC dice que ha liderado la lucha contra el citado oleoducto y otros proyectos que expandirían la producción de arenas bituminosas (un tipo de petróleo no convencional resultante de la mezcla de arcilla, arena, agua y bitumen). Asimismo, destaca que trabaja en función de establecer límites y reducciones en el consumo de carbón y petróleo.

Volviendo al reporte de Fox News Digital, hoy se sabe que, en diciembre de 2019, el grupo, incluso, se atrevió a jactarse de haber presentado su demanda número 100 en contra de la Administración Trump. En aquel momento, afirmó que «ninguna Administración está por encima de la ley y que el NRDC seguiría demostrándolo».

Fiel a su promesa, prosiguió el texto, «el grupo ha continuado con sus esfuerzos de litigio en contra de los combustibles fósiles desde que el presidente Biden asumió el cargo hace 20 meses y ha demostrado [ser] una gran influencia en la agenda climática de la Administración».

En declaraciones a Fox News Digital, el director del Centro de Política Climática y Ambiental del Instituto Heartland, H. Sterling Burnett, dijo que, «para el medio ambiente, todo se trata de poder. ¿[Acaso] no se trata de las emisiones de gases de efecto invernadero? Bueno, si así fuera, [el NRDC] estaría hablando de China todo el tiempo, sin parar. [Y] no es así».

En su análisis sobre el tema, Burnett se preguntó por qué el NRDC no ataca a China, a lo que él mismo se respondió: «En primer lugar, [porque] sabe que China puede simplemente echarlo; en segundo, [porque] es difícil morder la mano que te da de comer. Si te pagan para que no critiques a alguien, entonces no necesitas criticarlo».

Naturalmente, los vínculos sospechosos del NRDC con China y su doble moral con respecto a las cuestiones ecológicas que dice defender, no solo han causado crispación en expertos, como Burnett, sino que también han provocado la ira de los legisladores republicanos.

Según el miembro de alto rango del Comité de Recursos Naturales de la Cámara de Representantes, Bruce Westerman (R-AR), el vínculo que los grupos ambientalistas, como el NRDC, tienen con China es algo que continuamos vigilando de cerca.

Tan es así que, en 2018, Westerman y el exrepresentante Rob Bishop (R-UT), se comunicaron con el liderazgo del NRDC a fin de conseguir más información sobre sus vínculos con el país asiático. En aquel momento, ambos sugirieron que la aparente afiliación del grupo con China podría requerir que este se registre en EE. UU. como un agente extranjero.

«La relación del NRDC con China cumple con muchos de los criterios identificados por las agencias de inteligencia y las fuerzas del orden de EE. UU., que ponen a una entidad en riesgo de ser influenciada o coaccionada por intereses extranjeros», escribieron ambos en una carta fechada el 5 de junio del año citado.

Según Fox News Digital, la misiva, «que podría anticipar las acciones futuras que Westerman puede tomar si los republicanos recuperan la mayoría en las elecciones intermedias de noviembre, sugirió que el NRDC estaría violando la Ley de Registro de Agentes Extranjeros (FARA, por sus siglas en inglés)».

Bajo las normas de FARA, un agente extranjero es aquella «persona cuyas actividades están directa o indirectamente supervisadas, dirigidas, controladas, financiadas o subvencionadas en su totalidad, o en su mayor parte, por un mandante extranjero».

A todas estas, recordemos que, dentro del alcance de la recién aprobada Ley de Reducción de la Inflación de 2022, el presupuesto destinado al medio ambiente asciende a 370,000 millones dólares, el mayor monto aprobado para ese fin en la historia de EE. UU.

Por lo que ha trascendido, una buena parte de esos recursos se destinarán a reducir los costos de energía, aumentar la llamada producción limpia y disminuir en un 40 % las emisiones de carbono para el año 2030. Y con certeza, seguramente una buena parte de esas políticas fueron sugeridas o apoyadas por el grupo verde en cuestión. Nada, que, como dice el dicho, una mano lava la otra, y las dos lavan la cara.


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Las opiniones expresadas en este artículo son propias del autor y no necesariamente reflejan las opiniones de The Epoch Times

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