Nueve cajas de documentos encontrados en el centro de estudios del presidente Joe Biden en Washington D.C. y enviados a una oficina de Boston del abogado Patrick Moore no han sido revisadas en busca de material clasificado, según la Administración Nacional de Archivos y Registros.
En una carta fechada el martes, la archivera en funciones de Estados Unidos, Debra Steidel Wall, respondió a algunas preguntas concretas formuladas por los senadores Ron Johnson (R-Wis.) y Chuck Grassley (R-Iowa) sobre el conocimiento de Administración Nacional de Archivos y Registros (NARA) del descubrimiento de los documentos de Biden en Boston, que datan de su época como vicepresidente.
Wall respondió entre otras preguntas, a sobre cómo y cuándo se enteró NARA del transporte de los documentos de Biden a la oficina de Moore en Boston, si Archivos Nacionales notificaron al inspector general o al Departamento de Justicia (DOJ) sobre el descubrimiento de estos documentos, y si alguno de estos incluía seudónimos y direcciones de correo electrónico utilizados por el entonces vicepresidente Biden.
«El personal de NARA recuperó nueve cajas de la oficina del Sr. Moore en Boston», escribió Wall en respuesta a las preguntas de los senadores (pdf).
El número de cajas retiradas de Boston no había sido previamente revelado al público por NARA.
Los abogados de Biden empezaron a revisar materiales en el Penn Biden Center en octubre de 2022, donde descubrieron 10 documentos clasificados el 2 de noviembre de 2022. Al día siguiente, los abogados informaron a NARA de que nueve cajas de documentos habían sido transportadas a Boston.
El 4 de noviembre de 2022, Archivos Nacionales remitieron el asunto a la Oficina del Inspector General y le informaron «de que algunas cajas habían sido trasladadas a Boston», señala la carta. Sin embargo, NARA desconoce las fechas concretas en que fueron trasladadas.
Los 10 documentos clasificados fueron descubiertos justo dos días antes de las elecciones de mitad de mandato de noviembre, pero su existencia no se hizo pública hasta casi dos meses después.
NARA no ha revisado el contenido de las cajas
En su carta del 24 de febrero, Johnson y Grassley preguntaron a NARA si algún registro de Biden descubierto en la oficina de Moore en Boston contenía seudónimos o direcciones de correo electrónico asociadas con el entonces vicepresidente Biden.
«NARA no ha revisado el contenido de las cajas encontradas en la oficina del señor Moore en Boston», escribió Wall como respuesta, revelando que los documentos no fueron revisados en busca de materiales potencialmente clasificados o sensibles.
NARA no recogió las cajas de la oficina de Moore hasta el 9 de noviembre de 2022. Según la carta, la agencia las transportó a sus instalaciones más cercanas, la Biblioteca Presidencial John F. Kennedy en Boston, a petición del DOJ.
No está claro si el DOJ revisó las cajas en busca de material clasificado. The Epoch Times se puso en contacto con el DOJ para obtener sus comentarios.
Wall informó a Johnson y Grassley de que NARA no conoce ningún otro lugar en el que Biden pueda haber almacenado documentos de su época como vicepresidente. Según la ley estadounidense, los documentos presidenciales y vicepresidenciales deben ser entregados al NARA para su conservación cuando un presidente deja el cargo.
«NARA solo tiene conocimiento directo de las cajas que se encontraban en el Penn Biden Center y en la oficina del señor Moore en Boston», escribió Wall. «NARA ha informado al DOJ que, de acuerdo con la Ley de Registros Presidenciales (PRA), cualquier registro presidencial o vicepresidencial que el DOJ obtenga de cualquier otra ubicación debe ser devuelto a NARA a más tardar al concluir su investigación».
Investigaciones
Durante una audiencia del comité de Inteligencia del Senado el miércoles, su presidente, Mark Warner (D-Va.), expresó frustración por la negativa de la comunidad de inteligencia a conceder acceso al Congreso a documentos clasificados recuperados de lugares asociados con Biden, Trump y el exvicepresidente Mike Pence.
Warner argumentó que la postura de la Oficina del Director de Inteligencia Nacional de negar al comité el acceso a documentos clasificados «que tenemos todo el derecho a ver en términos de nuestro papel de supervisión» no «pasa la prueba de ética».
«Esta relación de confianza tiene que ser bidireccional», dijo, refiriéndose a la relación entre el comité y la comunidad de inteligencia.
Biden ha intentado restar importancia al material clasificado encontrado en el Penn Biden Center y en su casa de Wilmington, Delaware. El 8 de febrero, afirmó que su contenido se remontaba a 1974 y que eran simplemente «papeles perdidos».
Este intento se produjo en respuesta a la pregunta de un periodista sobre los comentarios anteriores de Biden por el material clasificado encontrado en la propiedad de Trump en Florida en agosto de 2022, a los que Biden se refirió como «totalmente irresponsables».
Biden también trasladó la culpa a los empleados que, según él, no habían hecho un trabajo exhaustivo al revisar el papeleo de su anterior oficina.
«Pero una de las cosas que pasó, es que lo que no se hizo bien es que mientras empaquetaban mis oficinas para trasladarlas, no hicieron el tipo de trabajo que se debería haber hecho para revisar a fondo cada uno de los papeles que hay allí», dijo el mandatario.
Exfiscal de EE. UU. de Maryland, Robert Hur, fue designado por el fiscal general Merrick Garland como abogado especial para supervisar la investigación del DOJ sobre los documentos. El mandato de Hur es determinar si Biden o aquellos asociados con él violaron la ley en el manejo de los documentos.
Con información de Katabella Roberts.
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