Un grupo de trabajo establecido bajo la administración Biden hace dos años reunió a más de 600 niños con sus familias que habían intentado entrar ilegalmente en Estados Unidos cuando estaba en vigor por breve tiempo una estricta política fronteriza bajo la administración Trump.
El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) anunció el jueves que 998 niños «siguen pendientes de reunificación.»
Las separaciones familiares tuvieron lugar bajo la política de «tolerancia cero» de la administración Trump, que estuvo en vigor entre abril y junio de 2018. Esta exigía que todos los adultos que cruzaran ilegalmente la frontera con Estados Unidos fueran procesados. Esto significaba que los menores, que no podían ser retenidos bajo custodia penal con sus padres, eran separados de sus progenitores y finalmente solían ser enviados a vivir con un patrocinador, que suele ser un pariente u otra persona vinculada a la familia.
Antes de la política de tolerancia cero, los agentes de la Patrulla Fronteriza habían descubierto que los inmigrantes ilegales alquilaban niños al sur de la frontera y los hacían pasar por familiares con el fin de aprovechar vacíos legales para conseguir una rápida puesta en libertad en el interior de Estados Unidos.
Debido a la reacción generalizada contra la separación de familias en virtud de la política de tolerancia cero, el entonces presidente Donald Trump detuvo las separaciones en la frontera menos de tres meses después de su aplicación.
La administración Trump de inmediato comenzó a reunir a las familias separadas bajo las críticas y alabanzas por la iniciativa de la administración. Cientos de familias demandaron al gobierno federal.
El Departamento de Salud y Servicios Humanos de la administración Trump, encargado de reunir a las familias, identificó posteriormente que casi el 13 % del grupo inicial de padres asociados a los menores, eran delincuentes con cargos graves en su contra o que habían mentido sobre ser los padres reales.
Después de que el presidente Joe Biden asumiera el cargo, en febrero de 2021, su administración estableció el Grupo de Trabajo Interinstitucional para la Reunificación de Familias con el fin de reunir a las familias que aún permanecían separadas.
En un comunicado el jueves, el DHS dijo que el grupo de trabajo había «perseguido sin descanso su misión de encontrar a las familias separadas y proporcionarles la oportunidad de reunificación».
«Al rastrear los registros del gobierno de Estados Unidos y coordinar con socios de ONG para identificar a los niños separados y a sus padres, el Grupo de Trabajo ha identificado hasta la fecha a 3924 niños que fueron separados entre el 20 de enero de 2017 y el 20 de enero de 2021», anunció el DHS.
«Hasta el 1 de febrero de 2023, 2926 niños separados han sido reunificados, ya sea antes del establecimiento del Grupo de Trabajo o a través del liderazgo del Grupo de Trabajo».
Las cifras del DHS indican que 689 se han reunido con sus familias desde que se creó el grupo de trabajo.
«De los 998 niños que quedan por reunificar, al 1 de febrero de 2023, 148 niños están en proceso de reunificación y 183 familias han sido informadas, por una ONG contratada, de la oportunidad de reunificarse».
«El número de nuevas familias identificadas sigue aumentando, a medida que las familias se presentan y se identifican como separadas bajo la política de tolerancia cero de la administración anterior».
Servicios de reunificación
El grupo de trabajo también ha informado a las familias sobre cómo acceder a los servicios de reunificación, lo que significa que pueden «recibir apoyo para solicitar la libertad condicional humanitaria, organizar un viaje a Estados Unidos y, una vez aquí, acceder a los servicios de salud mental de un proveedor de confianza», declaró el DHS.
Las familias pueden inscribirse para recibir estos servicios a través de los sitios web Together.gov o Juntos.gov, tras lo cual se les prestan servicios de apoyo a través de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), un socio contractual del gobierno federal.
Hasta la fecha, el grupo de trabajo ha llegado a 1999 familias a través del proceso de registro en Together.gov/Juntos.gov, y ha remitido a las familias elegibles a la OIM para completar el proceso de solicitud de libertad condicional humanitaria.
También ha proporcionado a 735 familias servicios de gestión de casos de salud mental y ha proporcionado a 385 familias evaluaciones y tratamiento de salud mental, según el DHS.
El trabajo para reunir a las familias «continuará hasta que todas las familias separadas que se puedan encontrar hayan tenido la oportunidad de reunificarse», dijo el DHS.
“El grupo de trabajo está trabajando en estrecha colaboración con colegas del DHS y otras agencias federales para desarrollar políticas que prioricen la unidad familiar, protejan contra futuras separaciones familiares y reunifiquen a las familias separadas restantes”.
Con la contribución de Charlotte Cuthbertson
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