Madre hispana fue decapitada por su hijo tras salir de la cárcel en Arizona

Por Alicia Marquez
03 de octubre de 2024 8:16 PM Actualizado: 03 de octubre de 2024 8:16 PM

Una madre hispana a quien esperaban en una reunión familiar para festejar su cumpleaños sorpresa le fue arrebatada la vida de una manera trágica el fin de semana pasado a manos de su hijo en Arizona, quien recientemente fue liberado de la cárcel, informó la policía.

Las autoridades de Arizona informaron que el viernes 27 de septiembre de 2024, cerca de las 11:45 p.m. la Policía de Glendale en el condado de Maricopa acudió a una residencia en la zona de 4400 W. Keim Dr. para atender a una llamada de emergencia, según un comunicado del 30 de septiembre.

«Las personas que llamaron reportaron haber encontrado a su familiar, identificada como Teresa DeJesus Cruz Rubio de 49 años de edad, muerta», informó el Departamento de Policía de Glendale.

El principal sospechoso de la muerte de la mujer es su hijo, Alejandro González de 25 años, quien posteriormente fue detenido.

«La persona que llamó al 911 declaró que un miembro de la familia estaba dentro de la casa y había fallecido, y que a la víctima le habían cortado la cabeza», dijo el sargento Bryan Hoskin, en una conferencia de prensa este lunes.

La familia comenzó a preocuparse luego de que la Sra. Cruz Rubio no asistió a una reunión familiar a la que acordó llegar el mismo viernes, que en realidad se trataba de una celebración sorpresa de cumpleaños para ella. La familia había intentado comunicarse con ella alrededor de las 15:40 p.m. del mismo viernes, sin éxito.

Cuando La Sra. Cruz Rubio no contestó el teléfono y seguía sin presentarse a la reunión, la familia comenzó a sospechar. Decidieron ir a su casa para saber cómo estaba, y allí finalmente descubrieron su cuerpo decapitado.

«Las puertas estaban cerradas. Las ventanas estaban cerradas. No había signos de que hubiesen forzado la entrada», explicó Hoskin. «Así que más tarde esa noche, fueron capaces de ingresar en la casa con la ayuda de un cerrajero local, y en ese momento localizaron a la víctima. Inmediatamente después llamaron a la policía y los agentes acudieron».

Cuando los agentes llegaron al lugar de los hechos la puerta principal de la casa se encontraba abierta, y cuando ingresaron al pequeño departamento, encontraron el cuerpo de la Sra. Cruz Rubio debajo de una manta.

Tras inspeccionar el lugar del crimen, los detectives se dieron cuenta que la ducha estaba abierta y que «había sangre por todas partes». También notaron que había un cuchillo en el fregadero de la cocina que «parecía tener sangre y cabello». Señalaron además que en la escena parecía que alguien había intentado limpiar los cuchillos, aunque en ese momento no sabían quién podría haber sido.

«La víctima sufrió una decapitación completa y presentaba numerosas puñaladas en el abdomen, el pecho y los brazos», detalló Hoskin.

Las fuerzas del orden patrullan una intersección en Phoenix, Arizona, en una imagen de archivo. (Brandon Bell/Getty Images)

La hermana de la Sra. Cruz Rubio dijo a los agentes que había prestado una camioneta GMC Yukon color Borgoña a la víctima y que el automóvil no se encontraba en la residencia.

El sargento dijo que ubicaron la camioneta entre las 4:50 p.m. y 5 p.m. en la zona donde ocurrió el lamentable hecho, con ayuda de las cámaras de vigilancia de la zona.

«La policía se enteró de que el hijo de la víctima, Alejandro González, vive con la víctima y recientemente salió de la cárcel por un asunto no relacionado por cargos de delito grave de otra agencia», explicó Hoskin.

«Y se informó que tenía problemas mentales», agregó.

El sargento señaló que González había sido visto conduciendo la camioneta GMC Yukon de su tía, y después de que los agentes observaran las imágenes de video encontraron que Alejandro nunca regresó a la residencia.

Los detectives ingresaron la camioneta a la base de datos de vehículos robados y en la madrugada del sábado 28 de septiembre un oficial del Departamento de Policía de Phoenix localizó la camioneta permitiendo la detención de González.

Cuando los detectives detuvieron al sospechoso «se dieron cuenta de que tenía restos de sangre en el cuerpo y en la ropa, además de heridas en las manos y los brazos», dijo el sargento.

Los detectives le realizaron un interrogatorio donde González admitió el delito contra su madre y les dio detalles del crimen, además habló sobre el consumo de metanfetaminas

«Alejandro afirmó que había otro sospechoso implicado, pero ninguna prueba apuntaba a ello», señaló Hoskin, indicando que la investigación sigue en curso.

El Sr. González fue ingresado en la cárcel del condado de Maricopa acusado de asesinato en primer grado y robo de un vehículo.

Las autoridades informaron también que se realizará una autopsia al cuerpo de la Sra. Cruz Rubio.

Hablando sobre el impacto del crimen para la familia de la víctima, para los agentes que presenciaron la escena y para la comunidad, Hoskin dijo que se trata de un crimen «absolutamente horrible».

«Es horrible para la familia que tuvo que soportar esto. Es horrible para los oficiales que tuvieron que ir y ver esto, los detectives que tuvieron que estar allí, los técnicos de identificación que tuvieron que procesar la escena y realmente entrar en ella y profundizar «, expresó. «Es horrible y traumático para la gente que vive en la zona, preocupada por el tipo de delitos que ocurren en su comunidad».

En estos casos, añadió finalmente el jefe de prensa, es prioridad sacar de las calles a las personas que cometen este tipo de delitos, porque lo último que quieren ver es otra familia victimizada.

The Epoch Times no pudo corroborar el periodo anterior de cárcel de González.

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