Los hijos del expresidente Donald Trump afirman que Mar-a-Lago no se ha vendido.
«Estas son puras NOTICIAS FALSAS y Zillow ha corregido su listado», dijo Eric Trump, uno de los hijos, en un comunicado. «Mar-a-Lago no se ha vendido ni transferido en ningún sentido».
Zillow, un popular sitio web de listados inmobiliarios, publica propiedades en diversas condiciones, como en venta, supeditado y vendida.
Zillow ha anunciado esta semana la venta de Mar-a-Lago por 422 millones de dólares.
Esto dio lugar a reportes, basados en el listado, de que la propiedad se había vendido a Donald Trump hijo, otro de los hijos del presidente Trump.
«Me he despertado esta mañana con numerosas noticias de los medios de comunicación que afirmaban que mi padre me había transferido la propiedad de Mar-a-Lago, y aunque a cualquiera le encantaría que le regalaran una de las propiedades más hermosas del mundo entero, no son más que noticias total y completamente falsas», declaró Donald Trump Jr. a los medios de comunicación en un comunicado.
«Muchos medios de comunicación deberían avergonzarse de sí mismos por publicar una historia tan falsa, pero todos sabemos que la mayoría de ellos ni siquiera se retractarán de sus reportes porque no tienen vergüenza. ¡TRISTE!», añadió.
Un portavoz de Zillow dijo que el anuncio había sido publicado erróneamente por una persona.
«Zillow se esfuerza por la exactitud en nuestro sitio y si tenemos conocimiento de información inexacta, la actualizaremos inmediatamente. Tras una investigación, parece que la información facilitada era incorrecta. Hemos corregido la información sobre esta propiedad», dijo el portavoz a The Epoch Times por correo electrónico.
Se está investigando si fue un empleado de Zillow el responsable del anuncio.
Zillow suele extraer información de otros sitios, como Bright MLS, para sus anuncios. Bright MLS es utilizado principalmente por agentes inmobiliarios.
El anuncio de Zillow en cuestión corresponde al número 1100 de South Ocean Boulevard, en Palm Beach (Florida).
Allí se encuentra el complejo Mar-a-Lago del presidente Trump. El presidente Trump compró la propiedad en 1985, pagando 2 millones de dólares. Más tarde estableció allí un club, que sigue funcionando en la actualidad, al mismo tiempo que conserva una residencia privada en los terrenos.
Mar-a-Lago Club Inc. es la propietaria. El Sr. Donald Trump Jr. figura actualmente como vicepresidente y tesorero de la empresa, y el presidente Trump como presidente.
La propiedad tiene 58 dormitorios y 33 cuartos de baño. Ahora figura como retirada del mercado.
El sitio web de Mar-a-Lago lo describe como «uno de los clubes privados más impresionantes y exclusivos», con servicios que incluyen cenas de lujo, una piscina frente al mar, un spa, pistas de tenis y un campo de croquet.
Entrega
La supuesta venta se produjo cuando el presidente Trump se entregó por cargos en Georgia. Quedó rápidamente en libertad bajo fianza de 200,000 dólares.
El presidente Trump también se enfrenta a otros tres tipos de cargos, incluida una imputación en Nueva York.
Se le acusa de conspirar para obstruir el traspaso del poder presidencial en 2021, de obstruir una investigación sobre documentos con marcas de clasificación y de hacer declaraciones falsas mientras se relacionaba con funcionarios de Georgia.
«Si impugnas unas elecciones, deberías poder impugnarlas. Pensé que las elecciones eran unas elecciones amañadas, unas elecciones robadas. Y debería tener todo el derecho a hacerlo», dijo el presidente Trump a los periodistas tras ser puesto en libertad.
Entre los coacusados en el caso de Georgia se encuentran el exabogado del presidente Trump, Rudy Giuliani, el exjefe de gabinete de la Casa Blanca, Mark Meadows, y el exfuncionario del Departamento de Justicia Jeffrey Clark.
Uno de los casos se centra en parte en la presunta conducta en Mar-a-Lago.
Se acusa al presidente Trump de conservar sin autorización documentos sensibles en el club tras abandonar la presidencia a principios de 2021. Una imputación federal también alega que trabajó con otras personas para ocultar documentos al FBI y a un gran jurado convocado para investigar el asunto.
Uno de sus empleados, una persona anónima, ha accedido a declarar que mintió al gran jurado, según han declarado los fiscales en un escrito reciente.
El empleado, advertido de que podría enfrentarse a cargos por perjurio, se retractó de su testimonio de que no recordaba ni había mantenido ninguna conversación sobre las grabaciones de seguridad en el complejo turístico del presidente Trump, dijo el equipo del abogado especial Jack Smith. El hombre proporcionó información que «implicaba» al presidente Trump y a los dos coacusados del expresidente en el caso, los empleados Walt Nauta y Carlos De Oliveira, según el escrito de la fiscalía.
Stanley Woodward, abogado que representa al Sr. Nauta, respondió el viernes, acusando al equipo del Sr. Smith de intentar eludir una orden que sellaba una presentación anterior que había hecho.
«En lo que sólo puede describirse como un esfuerzo descarado y manifiesto por influir en el Tribunal y/o en el tribunal de la opinión pública, el asesor especial cita selectivamente la presentación del abogado defensor contraviniendo deliberadamente una orden de sellado emitida por el Tribunal de Distrito de los Estados Unidos para el Distrito de Columbia», dijo el Sr. Woodward. Pidió permiso al tribunal para presentar una réplica.
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