Una pareja de mustangs salvajes de una manada de la montaña Onaqui de Utah fueron trágicamente separados y enviados a dos diferentes instalaciones de detención en una redada. Afortunadamente, su historia no había terminado; una mujer y su marido se propusieron reunir a la pareja, antes inseparable, y ofrecerles un refugio seguro para el resto de sus días.
La fotógrafa de caballos salvajes y subdirectora de la Campaña Estadounidense de Caballos Salvajes (AWHC), Melissa Tritinger, tenía un pony con pedigrí de mustang salvaje cuando era niña, lo que despertó su amor por la raza. Años más tarde, vio por primera vez al semental pinto Stargazer en su primera expedición a las montañas Onaqui fotografiando caballos salvajes.
«Me llamaron la atención sus marcas, cómo se destacaba en la manada… siempre daba un espectáculo. Siempre lo buscaba en mis viajes. Muchos lo amaban y lo que representaba: Libertad en sus términos», le dijo la señora Tritinger a The Epoch Times.
Stargazer tenía una compañera, una yegua pequeña de color gris oscuro llamada Northstar, «Nora» para abreviar, a quien conoció en la primavera de 2020 después de que la yegua supuestamente fuera abandonada por otros caballos debido a una lesión que la frenó. Stargazer se convirtió en su protector y nunca se apartó de su lado.
«Durante su estancia en la naturaleza, Stargazer frecuentemente se involucraba en conflictos con otros sementales, demostrando su determinación de proteger a Nora», dijo la señora Tritinger. «Se alternaban vigilando mientras el otro descansaba y, a menudo, se unían a la manada principal para visitar el abrevadero».
Apresados y separados
Stargazer y Nora deambulaban libremente por más de 200,000 acres de terreno público gestionado por la Oficina de Gestión de Tierras (BLM), rodeados de árboles de enebro, valles montañosos salpicados de artemisa y «senderos trillados que conducían a fuentes de agua», hasta que llegaron los helicópteros y las separaron.
Nora fue la primera en ser capturada en una redada el 16 de julio de 2021. La yegua fue «perseguida y conducida a una trampa metálica artificial por un helicóptero», mientras que Stargazer se quedó atrás.
«Stargazer supo que la había perdido ese día en el caos», dijo la señora Tritinger. «Vídeos e imágenes lo muestran corriendo frenéticamente, como si la buscara. Logró eludir la captura y permaneció en terreno salvaje una noche más. Sin embargo, al día siguiente, cuando el helicóptero regresó, él también fue capturado».
Cuando la señora Tritinger y su esposo se enteraron de lo que les había sucedido a Stargazer y Nora, tomaron el asunto en sus propias manos. Dijo que había que hacer algo para que la historia de Stargazer y Nora, que «parecía estar escrita en las estrellas», pudiera continuar.
«Para mí, encarnaban todo lo puro y salvaje, y no podía permitir que su historia terminara de esta manera», dijo la señora Tritinger.
«Los caballos que no encuentran hogar, y los que no pasan desapercibidos, son colocados en instalaciones de detención a largo plazo, todo a expensas del contribuyente… el espacio en santuarios adecuadamente administrados es limitado, y la «la cantidad de caballos necesitados es abrumadora».
Para poder reunir a los dos mustangs, los Tritinger tuvieron que asegurarse de hacer la oferta ganadora por ambos caballos en una subasta por Internet de una semana de duración organizada por la BLM. Después de «numerosos retrasos en el inicio de la subasta, junto con mucha ansiedad y aprensión», la pareja ganó ambas pujas y lloró de alivio.
Reunidos
El 10 de enero de 2022, seis meses después de su repentina separación, Stargazer y Nora fueron retirados de sus corrales y cargados en el mismo remolque para llevarlos a la granja de los Tritinger. La señora Tritinger viajó a Utah para presenciar su reencuentro.
«Fue un torbellino de emociones», dice. «La noche anterior los habían metido juntos en un corral especial y parecía que retomaban la conversación justo donde la habían dejado. Estaban muy cerca, a menudo se tocaban. Stargazer se colocó entre los barrotes y Nora… Adecuadamente, bajo un manto de estrellas, la caravana llegó a su espacio seguro».
A la mañana siguiente, la pareja pudo ver por primera vez a sus nuevos residentes.
«Ambos estaban muy sucios», dijo la señora Tritinger. «Tenían los ojos cansados y se movían lentamente, como si estuvieran cargando sobre sus espaldas los últimos seis meses… La acumulación de estiércol y restos de su estancia en el centro de retención les había formado grumos secos en el pelo, por todo el cuerpo, produciendo un tintineo audible cuando se movían».
La «máxima prioridad» de la pareja era examinar a Nora para ver si estaba preñada, pero la yegua, exhausta, se les adelantó; con Stargazer a su lado, se puso de parto y dio a luz a un potro pinto macho gris y blanco que nació muerto. Los Tritinger lo llamaron «Osa Menor», ya que la Estrella Polar, que da nombre a Nora, es la estrella más brillante de la constelación de la Osa Menor.
La Sra. Tritinger dijo: «Su primer y único potro fue concebido cuando eran salvajes y libres en la pradera. Nos gusta creer que ahora es salvaje y libre en el gran cielo estrellado… Aunque Nora y Stargazer ya no puedan llamar hogar a Onaqui, la constelación de la Osa Menor siempre estará arriba, ahora con un pequeño brillo extra».
Hogar para siempre
A pesar de su pérdida, Stargazer y Nora «parecieron reconocer que ya no estaban en peligro». Los Tritingers deseaban poder regresar a la naturaleza, lo cual estaba prohibido por el BLM, pero se sintieron alentados al ver a los mustangs aceptar lentamente a sus nuevos cuidadores humanos. Su recinto seco y cómodo, comida nutritiva y agua limpia, toques suaves y el perro doméstico residente, Ruby, ayudaron a facilitar su transición.
«Consideramos un privilegio y un honor ser su hogar para siempre», dijo la señora Tritinger. «Todos los días, estos dos increíbles mustangs son curiosos, abiertos y confiados, aunque algunos días más que otros. Escuchan atentamente con sus oídos hacia adelante y sus ojos oscuros y suaves siguen cada movimiento que hacemos”.
«Los queremos mucho y hacemos todo lo posible para ayudar a que los pasos hacia el mundo doméstico sean suaves y a su ritmo».
Si bien Stargazer y Nora tienen un final feliz para su historia, la suya es la excepción. Miles de mustangs y burros salvajes en cautiverio no tienen el mismo resultado afortunado, dijo la señora Tritinger, quien cree que crear conciencia es «un elemento esencial para ayudar a todos los caballos salvajes en el sistema gubernamental quebrantado».
Puedes seguir a Stargazer y Nora y su nueva vida en la granja en Instagram.
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