NORFOLK, Va. — Un hombre de Virginia acusado de almacenar el mayor número de explosivos acabados en la historia del FBI y de utilizar la foto del presidente Joe Biden para practicar tiro al blanco debe permanecer en la cárcel hasta el juicio, dictaminó un juez federal, escribiendo que ha «demostrado la capacidad de peligro extremo».
Brad Spafford, de 36 años, está detenido por un cargo federal de tenencia de armas de fuego por poseer presuntamente un rifle de cañón corto no registrado. Los fiscales dicen que se enfrenta a más cargos potenciales por los explosivos, incluidos los dispositivos encontrados en una mochila con la etiqueta «#nolivesmatter».
Spafford, padre de dos hijas pequeñas, también almacenaba un material explosivo altamente inestable en el congelador de un garaje junto a «Hot Pockets y mazorcas de maíz congeladas», según los documentos judiciales.
En una sentencia dictada a última hora del martes, la juez de distrito Arenda L. Wright Allen, de Norfolk, señaló que Spafford perdió tres dedos en un accidente con explosivos caseros en 2021, algo que, según ella, sus abogados defensores no rebatieron.
«El Sr. Spafford declaró específicamente que no cree en la regulación del Gobierno cuando se trata de armas de fuego, e intencionalmente burló los requisitos para el registro de rifles de cañón corto», escribió Allen. «La corte no confía en que el Sr. Spafford sea más respetuoso con las condiciones impuestas para su puesta en libertad».
Los abogados defensores argumentaron que las autoridades no aportaron pruebas de que Spafford estuviera planeando actos violentos. También señalaron que Spafford, que está casado y tiene un trabajo fijo como maquinista, no tiene antecedentes penales.
Sus abogados también cuestionaron que los artefactos explosivos encontrados en la propiedad de Spafford fueran utilizables porque «técnicos en explosivos con formación profesional tuvieron que manipular los artefactos para hacerlos estallar».
«No hay ni una sola prueba en el expediente de que el Sr. Spafford haya amenazado nunca a nadie y la afirmación sobre que alguien podría estar en peligro por sus opiniones y comentarios políticos carece de sentido», escribieron sus abogados defensores en una reciente presentación.
El abogado defensor Jeffrey Swartz dijo en la audiencia de detención de Spafford la semana pasada que los investigadores recopilaron información sobre él desde enero de 2023, durante la cual Spafford nunca amenazó a nadie.
«¿Y qué ha hecho durante esos dos años?». dijo Swartz. «Ha comprado una casa. Ha criado a sus hijos. Tiene un matrimonio estupendo. Tiene un trabajo fantástico y todas esas cosas siguen existiendo para él».
Los investigadores, sin embargo, dijeron que tenían un conocimiento limitado de las bombas caseras hasta que el informante visitó la casa de Spafford, escribieron los fiscales federales en una presentación el martes.
«Pero una vez que el acusado declaró en un audio grabado que tenía un explosivo primario inestable en el congelador en octubre de 2024, el gobierno se movió rápidamente», escribieron los fiscales.
Los investigadores incautaron más de 150 bombas de tubo y otros artefactos caseros cuando registraron la casa de Spafford en el condado de Isle of Wight en diciembre, según informó la fiscalía en documentos judiciales.
La mayoría de las bombas se encontraron en un garaje independiente, junto con herramientas y materiales de fabricación de bombas, incluyendo fusibles y piezas de tubería de plástico, según los documentos judiciales.
«Varias bombas de tubo adicionales se encontraron en una mochila en el dormitorio de la casa, completamente sin asegurar», en la casa que comparte con su esposa e hijos, escribieron también los fiscales.
La investigación comenzó en 2023 cuando un informante dijo a las autoridades que Spafford estaba almacenando armas y municiones, según los documentos judiciales. El informante, un amigo y miembro de las fuerzas del orden, dijo a las autoridades que Spafford estaba usando fotos del presidente para prácticas de tiro y que «creía que los asesinatos políticos deberían volver», escribieron los fiscales.
Numerosos oficiales de las fuerzas del orden y técnicos en explosivos registraron la propiedad el 17 de diciembre. Los oficiales localizaron el rifle y los artefactos explosivos, alguno de los cuales habían sido etiquetados a mano como ‘letales» y otros estaban cargados en un chaleco portátil, según consta en los documentos judiciales. Los técnicos detonaron la mayoría de los artefactos in situ porque se consideró que no era seguro transportarlos, aunque varios se conservaron para su análisis.
En una vista celebrada la semana pasada, el juez federal Lawrence Leonard determinó que Spafford podía ser puesto en libertad bajo arresto domiciliario en casa de su madre, pero acordó mantenerlo detenido mientras el gobierno presenta nuevos argumentos.
En respuesta, los fiscales reconocieron que Spafford «no es conocido por haber participado en ningún acto de violencia aparente».
Pero argumentaron que Spafford «ciertamente ha expresado interés en la misma, a través de su fabricación de bombas de tubo marcadas como “letales”, su posesión de equipo antidisturbios y un chaleco cargado con bombas de tubo, su apoyo a los asesinatos políticos y el uso de las fotos del presidente para prácticas de tiro y su creencia de que «ninguna vida importa'».
En la sentencia del martes, Allen escribió que el grado de peligro que Spafford suponía para su propia familia y comunidad era «extremo» y señaló «la enorme escala de la empresa».
«La corte no ha encontrado un caso comparable en términos de escala», escribió, «pero incluso los casos que implican un menor número de dispositivos destructivos y otros factores que fueron positivos para el acusado dieron lugar a la detención».
Por Ben Finley
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