FORT LAUDERDALE Florida— Un empresario de Florida previamente acusado de secuestrar a su esposa en España, enfrenta nuevos cargos en Estados Unidos por haberla matado.
Un gran jurado federal del sur de Florida acusó el miércoles a David Knezevich en una acusación suplementaria de secuestro con resultado de muerte, violencia doméstica en el extranjero con resultado de muerte y homicidio en el extranjero de un ciudadano estadounidense. De ser declarado culpable, enfrenta la posibilidad de ser condenado a la pena de muerte.
El pasado mes de junio se declaró inocente del secuestro de su esposa, Ana Hedao Knezevich, de 40 años, desaparecida en un caso que atrajo la atención de los medios de comunicación internacionales. Knezevich, de 36 años, fue encarcelado sin posibilidad de fianza.
Su abogada principal, Jayne Weintraub, dijo el jueves que su cliente planeaba declararse inocente en una audiencia de lectura de cargos la próxima semana.
«¡Es un intento desesperado del Gobierno por imputar todo lo posible y ver qué resulta!». dijo Weintraub en un correo electrónico. «No hay evidencia de que David Knezevich haya secuestrado o asesinado a su esposa».
Ana Knezevich desapareció de su apartamento de Madrid el 2 de febrero, cinco semanas después de mudarse allí. Su cuerpo aún no es hallado.
Un hombre con casco de motociclista fue visto entrando en su edificio de Madrid e inutilizando una cámara de seguridad pintando su lente con spray. Más tarde se le vio salir con una maleta. Ana Knezevich mide 1.5 metros y pesa 45 kilos, según su licencia de conducción.
Los fiscales dicen que tienen pruebas sólidas de que Knezevich era el hombre del casco. Dicen que voló a Turquía desde Miami seis días antes de la desaparición de Ana y que inmediatamente después viajó a su Serbia natal, donde alquiló un automóvil Peugeot.
El 2 de febrero, un video de seguridad lo mostró a 2600 kilómetros de Serbia, en una ferretería de Madrid, utilizando dinero en efectivo para comprar cinta adhesiva y la misma marca de pintura en aerosol que el hombre del casco de moto utilizó, según registró la cámara de seguridad, dijeron los fiscales.
Cuando Knezevich devolvió el Peugeot a la agencia de alquiler cinco semanas después, condujo 7700 kilómetros, sus ventanas estaban tintadas, se habían quitado dos pegatinas distintivas y había pruebas de que la placa con la matrícula del automóvil fue retirada y vuelta a colocar, según la fiscalía.
La fiscalía, afirmó que la pareja se encontraba en pleno proceso de divorcio y se disputaban millones de dólares en propiedades. Llevaban 13 años casados.
En una audiencia celebrada a principios de año, Weintraub cuestionó las pruebas presentadas por el gobierno. El abogado defensor rebatió la afirmación del gobierno de que Knezevich había vendido alguna de las propiedades para tener dinero con qué huir de Estados Unidos. Weintraub también dijo que la separación fue amistosa y que se estaban negociando los acuerdos financieros.
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