El Inspector General Michael Horowitz, en sus primeros comentarios del reciente informe publicado sobre la investigación FISA, acusó a altos funcionarios del FBI que supervisaron el esfuerzo para obtener la autorización para vigilar a Carter Page, un asesor de política exterior estadounidense que trabajó en la campaña electoral del presidente Donald Trump.
«Estamos profundamente consternados por la cantidad de errores básicos y fundamentales que cometieron tres equipos de investigación separados y cuidadosamente seleccionados en una de las investigaciones más delicadas del FBI; después de que el asunto se informara a los más altos niveles del FBI; aunque la información que se buscaba a través del uso de la autorización de FISA se relacionaba estrechamente con una campaña presidencial en curso; y aunque los involucrados en la investigación sabían que sus acciones probablemente estarían sujetas a un escrutinio minucioso», dijo Horowitz en su discurso de apertura.
El informe de Horowitz se publicó el lunes mientras los demócratas en la Cámara de Representantes aumentaban sus esfuerzos del impeachment contra Trump.
Horowitz concluyó que los errores equivalían a una falla que involucraba la cadena de mando del FBI responsable de manejar las solicitudes FISA, incluyendo a altos funcionarios.
«Creemos que esta circunstancia refleja un fracaso no solo de los que prepararon las solicitudes FISA, sino también de los gerentes y supervisores de la cadena de mando de Crossfire Hurricane, incluidos los altos funcionarios del FBI que recibían información a medida que avanzaba la investigación», declaró Horowitz. «Especialmente en los asuntos más delicados y de mayor prioridad del FBl, y especialmente cuando se solicita permiso a los tribunales para utilizar una herramienta intrusiva como una orden FISA, incumbe a toda la cadena de mando, incluidos los altos funcionarios, para tomar las medidas necesarias que garanticen que están suficientemente familiarizados con los hechos y las circunstancias que apoyan y podrían perjudicar la aplicación de una FISA, a fin de ejercer una supervisión eficaz y coherente con su nivel de responsabilidad en materia de supervisión».
El Procurador General William Barr, después de la publicación del informe, dijo a NBC News que el FBI bajo las órdenes de James Comey pudo haber actuado de «mala fe» cuando abrió la investigación.
«Creo que probablemente desde el punto de vista de las libertades civiles, el mayor peligro para nuestro sistema libre es que el gobierno en funciones utilice el aparato del Estado, principalmente las agencias de aplicación de la ley y las agencias de inteligencia, para espiar a los opositores políticos. Pero para usarlos de una manera que pueda afectar el resultado de la elección. Por lo que yo sé, esta es la primera vez en la historia que esto ha sucedido en una campaña presidencial», dijo el martes.
Estados Unidos estuvo «de cabeza durante tres años» debido a una falsa narrativa propagada por los medios de comunicación convencionales, dijo.
«Creo que hubo graves abusos (…) y un comportamiento inexplicable que es intolerable en el FBI. Creo que eso deja abierta la posibilidad de que haya habido mala fe», dijo a la emisora.
Los comentarios de Horowitz el miércoles sucedieron después de que el presidente del Poder Judicial del Senado, Lindsey Graham (R-S.C.), lanzara una descarga contra el FBI y el Departamento de Justicia.
El informe no mostraba «algunas irregularidades», pero «lo que ocurrió aquí es que el sistema falló. La gente del más alto nivel del gobierno tomó la ley por sus propias manos», dijo Graham. Añadió sobre la cobertura de los medios de comunicación: «Claramente no lo leyeron. Si esa es su opinión de que esto se divulgó legalmente, y ese es el punto principal, se perdieron todo el informe».
«Lo primero que quiero que sepan es cómo se horneó el pastel aquí y mi meta es asegurarme de que… que vean esto como algo más que unas cuantas irregularidades, porque si esto se convierte en unas pocas irregularidades en los Estados Unidos, entonces que Dios nos ayude a todos», dijo el mandatario.
El informe de 476 páginas del del Inspector General (IG) publicado el lunes dice que Horowitz no encontró prejuicios políticos o mala conducta intencional en el inicio de la investigación FISA por parte del FBI, que ha sido disputada por Barr, Trump y el Fiscal General de los EE.UU., John Durham, quien está llevando a cabo una investigación criminal similar.
El informe de Horowitz identificó al menos 17 » imprecisiones y omisiones significativas» en la solicitud y en las renovaciones de la orden FISA de Carter Page.
En una declaración pública, Graham señaló que hubo mensajes de texto sesgados entre el subdirector adjunto del FBI, Peter Strzok, y la abogada del FBI Lisa Page, doonde criticaban a Trump y a sus partidarios. También hablaron de impedir que fuera elegido, de una llamada «póliza de seguro» y de un «impeachment» cuando se unieron al equipo del abogado especial Robert Mueller.
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