Dos indicadores clave del sector manufacturero estadounidense se contrajeron en agosto, señal de una posible ralentización generalizada de la industria.
La Encuesta Manufacturera del Empire State del Banco de la Reserva Federal de Nueva York (una encuesta mensual de 200 empresas) se contrajo por noveno mes consecutivo en agosto, ya que la actividad comercial en el estado se debilitó.
El informe detectó un descenso de los nuevos pedidos y un estancamiento de los envíos. Los niveles de empleo cayeron, mientras que las horas trabajadas se desplomaron. Las presiones sobre los precios de los insumos aumentaron a un ritmo más lento, y los incrementos de los precios de venta apenas variaron.
A pesar de la mala lectura, las empresas se mostraron optimistas respecto a la mejora de las condiciones empresariales en los próximos seis meses.
El Panorama Empresarial Manufacturero de la Reserva Federal de Filadelfia (una encuesta mensual a unos 250 fabricantes de Delaware, el este de Pensilvania y el sur de Nueva Jersey) se tornó inesperadamente negativo por primera vez desde enero y disminuyó desde un máximo de tres meses.
Los investigadores constataron un descenso general de la actividad manufacturera en un contexto de menor crecimiento de los nuevos pedidos y los envíos. El empleo se contrajo este mes.
En cuanto a la inflación, aumentaron los dos principales índices de precios, el de precios pagados y el de precios recibidos.
A diferencia de sus homólogos neoyorquinos, los fabricantes regionales han dicho que esperan que las condiciones se deterioren en los próximos meses.
Las publicaciones peores de lo esperado se produjeron después de que la Reserva Federal informara que la producción industrial y manufacturera se desplomó el mes pasado por el impacto del huracán Beryl en el sector.
En julio, la producción industrial cayó un 0.6 por ciento, la primera contracción desde marzo. El descenso se debió principalmente a una caída considerable del índice de vehículos de motor y piezas (8 por ciento negativo) y de los servicios públicos (3.7 por ciento negativo).
La producción manufacturera disminuyó un 0.3 por ciento, la primera caída desde abril, impulsada por la caída del 1.5 por ciento en la minería.
Una instantánea de la industria
En general, los últimos datos reflejan la debilidad observada en el sector en un par de otros informes ampliamente citados. Esto ha generado crecientes preocupaciones respecto a que la postura restrictiva de la política monetaria de la Reserva Federal desde marzo de 2022, que ha elevado las tasas de interés a sus niveles más altos en más de dos décadas, esté comenzando a afectar a la industria.
“La economía estadounidense también ha experimentado el ciclo de endurecimiento de la política monetaria más rápido y agresivo en más de 40 años, mientras que el rápido endurecimiento de las condiciones crediticias a raíz de las quiebras bancarias del año pasado han supuesto otra restricción para las empresas y sus clientes”, señalan los economistas de ING en una nota de investigación de marzo de 2024.
El Índice de Gerentes de Compras (PMI) del sector manufacturero del Instituto de Gestión de Suministros (ISM) (un indicador de la dirección de las tendencias económicas del sector) se afianzó en julio en territorio de contracción por cuarto mes consecutivo y el vigésimo descenso de la actividad en los últimos 21 meses.
“La demanda sigue siendo moderada, ya que las empresas se muestran poco dispuestas a invertir en capital e inventarios debido a la actual política monetaria federal y a otras condiciones”, declaró Timothy Fiore, presidente del ISM, en el informe. “La ejecución de la producción descendió en comparación con junio, lo que probablemente se sumó al descenso de los ingresos, ejerciendo una presión adicional sobre la rentabilidad”.
El PMI manufacturero mundial alternativo de S&P también se contrajo el mes pasado por primera vez desde diciembre. El informe reflejó el deterioro de las condiciones empresariales de los fabricantes nacionales en medio de una caída de los nuevos pedidos y un tibio aumento de los costes de los insumos.
Las empresas prevén que el mercado mejore tras las elecciones de noviembre, afirma Chris Williamson, economista jefe de S&P Global Market Intelligence.
“La recuperación del sector manufacturero dio marcha atrás en julio, aunque el panorama más sombrío del crecimiento vino acompañado de un marcado enfriamiento de la inflación en el sector productor de bienes”, afirma Williamson. “Muchas empresas esperan que la debilidad sea temporal, vinculada a la pausa en el gasto y la inversión de cara a las elecciones presidenciales. Sin embargo, las expectativas de producción de las empresas para dentro de un año siguen siendo moderadas en términos históricos, lo que refleja la preocupación adicional por el impacto de la subida de los tipos de interés y la persistencia de la inflación”.
Situación del sector manufacturero
En los años sesenta, la industria manufacturera aportaba aproximadamente el 26 por ciento del PIB. En la actualidad, representa más del 10 por ciento del crecimiento económico estadounidense.
Aun así, el último dato manufacturero del ISM dio señales de recesión, según John Belton, gestor de carteras de Gabelli Funds.
“Los datos económicos de EE.UU. se han ralentizado en los últimos meses, y la encuesta de julio del ISM manufacturero del pasado jueves mostró algunos indicadores a futuro preocupantes, con los componentes de nuevos pedidos y empleo muy por debajo de las expectativas y mostrando cifras de recesión”, dijo Belton en una nota enviada por correo electrónico a The Epoch Times.
Además, InterMarket Forecasting, una empresa de servicios de investigación de inversiones, señaló que los descensos del PMI manufacturero del ISM suelen predecir los primeros síntomas de una recesión.
El empleo en el sector manufacturero también se ha estancado desde agosto de 2023. La industria ha perdido 13,000 puestos en lo que va de año, según la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS).
El consenso entre los economistas académicos y empresariales sugiere que las probabilidades de una recesión en los próximos 12 meses son bajas.
En cuanto a la industria manufacturera, Torsten Slok, economista jefe de Apollo, afirma en una declaración enviada por correo electrónico a The Epoch Times que Estados Unidos está asistiendo a un “renacimiento industrial”, con una capacidad manufacturera que “crece tras haber disminuido durante muchas décadas” en medio de una inyección de inversión pública y privada.
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
