Los individuos que propaguen deliberadamente el virus del PCCh, que causa la enfermedad COVID-19, podrían enfrentarse a cargos criminales bajo las leyes federales relacionadas con el terrorismo, según el Departamento de Justicia.
El Subsecretario de Justicia Jeffrey Rosen ordenó a los fiscales, jefes de departamento y jefes de policía de todo el país que centraran sus esfuerzos en el procesamiento de los delitos relacionados con la pandemia en un memorándum el martes. Una de las categorías de delitos que que las oficinas pueden encontrar involucra a individuos que pueden participar en la «exposición intencional e infección del COVID-19 a otros».
«Debido a que el coronavirus parece cumplir con la definición estatutaria de un ‘agente biológico’ (…) tales actos podrían implicar potencialmente los estatutos de la nación relacionados con el terrorismo», escribió Rosen en el memorándum obtenido por The Epoch Times. «No se tolerarán amenazas o intentos de usar COVID-19 como arma contra los estadounidenses».
El segundo al mando del departamento también pidió a los fiscales e investigadores que prestaran atención a otros tipos de delitos como el fraude, la venta de drogas y curas falsas, la fijación de precios, la manipulación de licitaciones y el acaparamiento de suministros o dispositivos médicos, añadiendo que la lista no era exhaustiva.
El departamento también formó un nuevo grupo de trabajo para abordar la manipulación del mercado relacionada con el virus del PCCh, el acaparamiento y la estafa de los precios, según un memorándum separado enviado por el Fiscal General William Barr el martes. El memorándum señala que el grupo de trabajo será dirigido por el Fiscal General del Distrito de Nueva Jersey, Craig Carpenito, con la ayuda del programa criminal de la división antimonopolio.
Barr también ordenó a cada oficina del fiscal general y a cada componente del departamento relevante que designara a un abogado con experiencia como integrante del grupo de trabajo.
«Aunque esta crisis ha sacado a la luz lo mejor de la mayoría de los estadounidenses, parece que hay algunas excepciones desafortunadas», escribió Barr en su memorándum. «No toleraremos malos actores que traten la crisis como una oportunidad para enriquecerse rápidamente».
Esto sucede después de que el Presidente Donald Trump firmara una orden ejecutiva el lunes para evitar la estafa y acaparamiento de «recursos críticos» usados para combatir el virus del PCCh.
The Epoch Times se refiere al nuevo coronavirus, que causa la enfermedad COVID-19, como el virus del PCCh porque el encubrimiento y la mala gestión del Partido Comunista Chino permitieron que el virus se propagara por toda China y provocara una pandemia mundial.
La orden ejecutiva fue hecha de acuerdo con la Ley de Producción de Defensa, que prohíbe el acaparamiento de artículos designados, y ordena al Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) a proteger los escasos artículos médicos y de salud.
Barr enfatizó el lunes que los individuos que almacenen suministros esenciales no serán el objetivo de la acción presidencial, pero aquellos que acaparen artículos para venderlos con precios más altos son y pueden ser sujetos a investigación.
«Si tiene un gran suministro de papel higiénico en su casa, no es algo de lo que tenga que preocuparse, pero si está sentado en un almacén con máscaras quirúrgicas, oirá que llaman a su puerta», dijo.
En el memorándum publicado el martes, Barr dijo que el Secretario del HHS aún tiene que designar formalmente los artículos médicos según la orden. Añadió que el departamento está empezando a recibir informes de individuos que están acaparando «artículos médicos vitales» y luego haciendo «ganancias inapropiadas e imprevistas a expensas de la seguridad pública y la salud y el bienestar» del pueblo estadounidense.
Varios fiscales generales del estado han anunciado cargos contra individuos por supuestamente exponer a personas deliberadamente al virus del PCCh. El fiscal general de Nueva Jersey anunció el martes que su oficina impuso cargos a un hombre de 50 años de edad por amenazas terroristas, entre otros cargos, por supuestamente toser sobre una empleada de una tienda de alimentos y decirle que tenía el virus. Del mismo modo, un hombre de Missouri fue acusado de hacer una amenaza terrorista después de que fue filmado lamiendo una serie de artículos en un Walmart.
Isabel van Brugen contribuyó con este informe.
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