Análisis de noticias
Según un nuevo informe de la minoría del Senado, la pandemia de COVID-19 «fue muy probablemente el resultado de un incidente relacionado con la investigación» en el Instituto de Virología de Wuhan (WIV) en Wuhan, China.
El informe fue redactado por la minoría republicana del Comité de Salud, Educación, Trabajo y Pensiones del Senado. El hecho de que la mayoría demócrata no participara en él subraya la marcada división política en lo que debería ser una cuestión puramente científica.
Gran parte de las pruebas del informe de la minoría del Senado ya eran de dominio público, pero hay una serie de nuevas y sorprendentes revelaciones, como la existencia de un documento del WIV en el que se reconoce que «se había producido un problema de bioseguridad en el WIV en algún momento antes de noviembre de 2019».
El informe comienza analizando la posibilidad de un origen natural para el virus del COVID-19. Las cuestiones planteadas en el informe reflejan críticas y preguntas conocidas, como por qué no se ha encontrado ningún animal huésped y cómo se supone que el virus ha viajado mil millas a través de China —desde las cuevas de murciélagos en Yunnan hasta Wuhan— sin dejar rastro.
A continuación, el informe analiza las pruebas que apuntan a una fuga en el laboratorio. Una vez más, el informe reitera pistas ampliamente conocidas, como el hecho de que el WIV había estado construyendo coronavirus sintéticos durante muchos años, que el laboratorio borró misteriosamente su base de datos de virus, y que el virus del COVID-19 contiene un sitio de corte de furina extremadamente inusual que el laboratorio de Wuhan había propuesto insertar en los coronavirus existentes en 2018.
El informe también plantea preocupaciones en torno al momento y la naturaleza de ciertas adquisiciones del laboratorio de Wuhan, incluyendo un pedido de equipo de incineración altamente especializado en noviembre de 2019.
Sin embargo, el verdadero avance del informe parece ser la identificación de una serie de documentos internos del WIV que apuntan tanto a una profunda implicación del Partido Comunista Chino (PCCh) en la gestión del laboratorio como a la existencia de graves problemas de bioseguridad en el mismo.
No se sabe cuándo ni cómo el Comité del Senado recibió esta información. El informe del Senado se limita a decir que los documentos pertinentes están «en el archivo del personal».
El primer informe interno del WIV que se cita en el informe del Senado trata de los esfuerzos para mejorar la bioseguridad en el laboratorio y afirma que esos esfuerzos se vieron obstaculizados por un «problema de dominio», que aparentemente significaba la falta de acceso a tecnologías y materiales avanzados de bioseguridad extranjeros. Este informe del WIV de junio de 2019 se titula «Xiang Shuilun examina el trabajo del Instituto de Virología de Wuhan para establecer una ‘rama del partido de bandera roja'», por lo que rama del partido de bandera roja significa una rama de un comité del PCCh, presumiblemente un comité regional del PCCh.
El mismo informe también afirma que durante una reunión de junio de 2019, el liderazgo del WIV había instruido a los funcionarios del WIV que abordar el «problema de dominio» era fundamental para «impulsar la construcción y (…) el desarrollo de la ciencia y la tecnología para la nación». El informe del WIV de junio de 2019 también lamentaba que «el acceso limitado a tecnologías extranjeras clave de bioseguridad obligaba a los investigadores a desarrollar métodos de bioseguridad y a construir equipos para remediar las carencias».
No está claro en el informe del Senado cuál es la distinción entre el liderazgo del WIV y los funcionarios del WIV. El liderazgo puede denotar a los supervisores del PCCh mientras que los funcionarios pueden referirse a los que dirigen el laboratorio en el día a día. Recientemente se ha revelado que el vicedirector del WIV, Yuan Zhiming, es un funcionario del PCCh que supervisa la bioseguridad en el laboratorio.
El informe del Senado también revela que en julio de 2019 el liderazgo del WIV «dirigió una serie de reuniones internas sobre problemas de operaciones en la gestión en el WIV». El subdirector del laboratorio de máxima seguridad del WIV —nivel de bioseguridad 4 (BSL-4)— emitió un informe sobre «la escasez de equipos de biocontención y el impacto del cumplimiento de los objetivos de investigación del gobierno».
La fuente del Senado para estas alarmantes declaraciones es un informe interno del WIV de julio de 2019 titulado «El Instituto de Virología de Wuhan convoca un estudio del Grupo Central Plenario del Comité del Partido y una reunión especial de investigación y estudio del tema educativo ‘Nunca olvidar nuestra aspiración original y manteniendo firmemente en mente nuestra misión». La referencia al «Grupo Central Plenario del Comité del Partido» sugiere que el PCCh desempeñó un papel mucho más importante en la dirección de los asuntos del laboratorio de lo que se sabía.
Según la minoría del Senado, el mismo informe interno del WIV de julio de 2019 también se quejaba de grandes problemas en el laboratorio BSL-4, incluyendo «aspectos de hardware y tecnológicos de las instalaciones del laboratorio» y «la gestión de la bioseguridad». El informe dirigía al personal superior del instituto a «dar prioridad a la resolución de los problemas urgentes a los que nos enfrentamos actualmente».
En particular, los problemas de bioseguridad parecen haberse centrado en el laboratorio BSL-4 del WIV mientras que, según admiten, el WIV llevó a cabo sus experimentos con coronavirus en instalaciones BSL-2 y BSL-3 de menor bioseguridad. Si el laboratorio BSL-4 tenía graves problemas para mantener la bioseguridad y adquirir equipos de bioseguridad, la implicación es que las cosas eran aún peores en los laboratorios de bioseguridad de nivel inferior.
Si bien el momento de estos informes secretos en junio y julio de 2019 precede a la fecha más temprana conocida para que el COVID-19 se haya filtrado del laboratorio —que probablemente habría sido en septiembre u octubre de 2019— son muy relevantes para el brote de la pandemia, ya que destacan que había problemas de bioseguridad conocidos y muy graves en el WIV.
También hay una revelación en el informe del Senado que se refiere a los eventos después de que el virus probablemente se filtró fuera del laboratorio de Wuhan. Un informe interno del WIV de noviembre de 2019 advertía de que «una vez que se han abierto los tubos de ensayo almacenados, es como haber abierto la caja de Pandora. Estos virus llegan sin sombra y se van sin dejar rastro. Aunque [tenemos] varias medidas de prevención y protección, es necesario que el personal del laboratorio actúe con mucha precaución para evitar errores operativos que den lugar a peligros. Cada vez que esto ha ocurrido, los miembros de la rama del partido del laboratorio de Zhengdian siempre han corrido a la primera línea, y han tomado medidas reales para movilizar y motivar a otro personal de investigación».
El informe de noviembre de 2019 se titula «Mantenga firmemente en mente sus responsabilidades, manténgase firme en la misión, sea un pionero para nuestra nación en el ámbito de la bioseguridad de alto nivel: los logros de la rama del Partido del Laboratorio Zhengdian del Instituto de Virología de Wuhan de la Academia de Ciencias de China».
La frase «cada vez que esto ha sucedido» sugiere que el laboratorio ya había sufrido una serie de fallos de bioseguridad que la Rama del Partido del Laboratorio de Zhengdian del PCCh supuestamente tuvo que resolver.
El 19 de noviembre de 2019, siete días después de que se publicara el informe del WIV de noviembre de 2019, un alto funcionario de bioseguridad y seguridad biológica de la Academia China de Ciencias visitó el WIV para dar «importantes instrucciones orales y escritas» de los dirigentes chinos en Beijing al WIV en relación con la «compleja y grave situación a la que se enfrenta el trabajo de [bioseguridad]».
Aunque la mayoría de las pruebas presentadas por la minoría del Senado reflejan cosas que ya sabíamos, las declaraciones extraídas de los documentos internos del WIV no habían sido publicadas anteriormente, y apuntan a una implicación mucho mayor del PCCh con el WIV y a problemas de bioseguridad mucho más graves en el laboratorio de lo que se sabía. También plantean la posibilidad de una participación temprana y exhaustiva del PCCh en el encubrimiento del origen de la pandemia.
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