Un ciudadano iraní acusado de espiar para la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de Estados Unidos y para el servicio secreto israelí (Mosad) y facilitar la ubicación del asesinado general iraní Qasem Soleimaní ha sido condenado a muerte, anunció este martes las autoridades del Poder Judicial iraní.
Se trata de «Mahmud Musavi Majd, quien a cambio de recibir dólares estadounidenses proporcionó informaciones acerca de áreas de seguridad, especialmente sobre las fuerzas armadas, incluida la Fuerza Quds» de los Guardianes de la Revolución, explicó el portavoz del Poder Judicial, Gholamhosein Esmailí, según la agencia oficial iraní de noticias IRNA.
Musaví Majd «proporcionó información sobre el lugar de la estancia y los movimientos del general mártir Qasem Soleimaní a los extranjeros», actividad por la que «fue condenado a muerte por orden judicial, que ha sido confirmada por la Corte Suprema. La pena se ejecutará muy pronto», subrayó Esmailí.
EE.UU. asesinó en enero pasado en un bombardeo selectivo en Bagdad al poderoso general Suleimani, de 63 años, comandante de la Fuerza Quds, lo que provocó una grave escalada de la tensión en la región.
Irán respondió días más tarde con ataques con misiles a dos bases militares iraquíes que albergaban tropas estadounidenses.
Soleimaní era el encargado de las operaciones fuera de Irán de los Guardianes de la Revolución y estuvo presente sobre el terreno en Siria y en Irak, supervisando a las milicias respaldadas por Teherán en ambos países árabes.
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